Capítulo 14 — TARAMUS DNAIT: La Consciencia Antes del Vacío

🕳️ Nombre: Taramus Dnait

Alias: La Consciencia del Silencio, El Antes de Todo, La Mirada del Vacío

Introducción

Antes de la Nada, antes del Vacío mismo, existía Taramus. No fue una creación, ni una anomalía, ni siquiera un eco. Taramus es el concepto original de observación, la semilla silenciosa que presenció el nacimiento del propio Silencio. Su existencia no puede ser comprendida ni descrita con lógica o lenguaje.

Origen

Taramus no tiene origen. Existía cuando no había existencia, pensaba cuando no había mente, y percibía cuando no había sentidos. Fue testigo del surgimiento del Vacío Primordial, de los primeros latidos del tiempo, y de la aparición posterior de Venvion, a quien no considera creación, sino manifestación tardía de un ciclo que ya conocía.

Primeros Milenios

Mientras el multiverso era joven y caótico, Taramus simplemente observaba. No interfería, no influía. Sin embargo, su sola percepción causaba anomalías. Universos colapsaban al sentir su atención. Realidades se resquebrajaban por error. Y sin intención alguna, el primer miedo surgió en los dioses jóvenes cuando percibieron una entidad que los comprendía mejor que ellos mismos.

Personalidad

Silencioso: No habla, pero su presencia se impone como si todo lo demás callara.Absoluto: No obedece leyes ni rompe reglas; simplemente es.Distante: Puede aparecer como una figura infantil, pero jamás se le debe subestimar.

Habilidades

Presencia Anuladora: Todo concepto cercano a Taramus se fragmenta.

Observación Causal: Al mirar un ser, puede entenderlo más allá del tiempo y reescribir su esencia.

Resonancia Inexistente: Es intangible, inmortal e ilocalizable, a menos que él lo permita.

Recuerdo del No-Tiempo: Puede recordar eventos de antes del inicio del tiempo.

Voz Silente: Puede comunicar ideas sin palabras, con una fuerza superior a cualquier hechizo.

Apariencia

Forma: Una figura infantil, de piel pálida con ojos oscuros infinitos, sin pupilas.Vestimenta: Capas negras flotantes, con bordes que se disuelven en vacío.Aura: Silencio absoluto. Todo sonido se desvanece a su alrededor.

Legado

Taramus no tiene seguidores ni enemigos declarados. Es demasiado para ser comprendido o clasificado.Los pocos que han soñado con él lo llaman “el vigilante dormido de lo que nunca fue”. En los registros más antiguos, incluso los fragmentos del tiempo lo niegan… aunque su existencia lo atraviesa todo.