—¡Qué molesto! Si lo hubiera sabido, no habría invitado a Yu Lan y simplemente habría dejado que Lin Tian me follara a mí sola.
Zhang Mei se arrepentía profundamente en su corazón.
Sin embargo, cuando se trataba de dejar que Lin Tian la follara de inmediato, dudaba.
La indecisión la estaba matando.
Yu Lan se acurrucó en los brazos de Lin Tian y dijo:
—Guapo, eres increíble, realmente me gustas, ¿puedes decirme tu nombre? El mío es Yu Lan.
—¡Hmm!
Lin Tian le dijo su nombre a Yu Lan e intercambiaron información de contacto.
Zhang Mei observaba esta escena con celos; ella ni siquiera tenía aún la información de contacto de Lin Tian.
Lin Tian tomó la iniciativa y dijo:
—¡Hermana Mei, tú también deberías anotar mi información de contacto!
—Te llamaré para que puedas contactarme si necesitas algo.
Yu Lan aprovechó la oportunidad para preguntar:
—¿Cuál es su relación? ¿Cómo se conocen?
Lin Tian dijo honestamente: