Bella Woods reunió una gran cantidad de valor para hacer esas pocas preguntas.
La respuesta de Ashton Marshall fue certera:
—Sí.
La miró a los ojos mientras lo decía, tan seguro y serio que el ansioso corazón de Bella Woods finalmente se calmó.
Ella incorporó ligeramente su cuerpo, rodeando con sus brazos el cuello de Ashton:
—Está bien, esperaré a que regreses.
Si, si...
Si lo que había entre ellos no era un juego, si era una emoción genuina, Bella quería luchar contra todo por ello en ese momento.
Quería obtener la bendición de Cyan Marshall.
Si su identidad no lo permitía, entonces se iría al extranjero, tendría una relación secreta de por vida, o una relación a larga distancia, podía aceptarlo todo.
Estaba verdaderamente, profundamente apegada a la sensación de ser cuidada por Ashton.
Tan feliz, que no podía soportar dejarlo ir.
Bella abrazó fuertemente a Ashton, como si hubiera tomado algunas decisiones en su corazón.