Capítulo 11) Los hombres lobo renegados.

Punto de vista de Damien,

En silencio, Anastasia y yo seguimos la sombra. La luna estaba llena, lo que nos permitía ver claramente en la oscuridad.

Cuando Anastasia no me estaba mirando, yo le robaba una mirada a su rostro. «Se siente diferente», pensé. Mis ojos púrpuras se oscurecieron momentáneamente antes de volver a la normalidad.

«Tienes razón. Se siente tan diferente y familiar al mismo tiempo. Extraño» —admitió Darren. Él es mi lobo.

Al llegar al final de la frontera, la sombra se detuvo. Agarré la mano de Anastasia y la hice esconderse detrás de un árbol alto conmigo. No podía arriesgarme a que la sombra nos descubriera. Si eso sucede, se escapará.

El dueño de la sombra se quedó fuera de la frontera, pero Anastasia y yo permanecimos en la frontera y nos escondimos adecuadamente detrás del árbol.

Fuera de la frontera, no había árboles de ningún tipo. Era solo tierra. Gracias a eso, finalmente vi la cara de la persona.