Xiao Yi dio la vuelta a su mano y metió la espada larga en el anillo de almacenamiento.
La seriedad en su rostro se desvaneció, reemplazada por un toque de suavidad. Sonrió y dijo:
—Anciano Wang, por favor espere un momento, ¡déjeme manejar los asuntos aquí primero!
—¡Adelante!
Wang Zhiyuan asintió, su mirada hacia Xiao Yi llena de admiración creciente.
Tratar a los enemigos con frialdad y crueldad como un duro invierno, pero dar la calidez de la primavera a los amigos.
¡Así es como debería ser un verdadero hombre!
Xiao Yi miró a Fang Qingzhu, sosteniendo suavemente su delicada palma, y sonrió:
—Qingzhu, a partir de ahora serás la jefa de la Familia Fang.
Fang Qingzhu se quedó atónita, su expresión complicada.
¿Jefa de la Familia Fang, eh?