La gran procesión avanzaba majestuosamente, saliendo del palacio imperial.
La Ceremonia de Adoración Ancestral era un reflejo de una era floreciente, y la familia real había preparado este evento meticulosamente.
Solo los vehículos que llevaban ofrendas sumaban novecientos, seguidos por un séquito de ministros y figuras poderosas de todas las facciones.
Una poderosa procesión de decenas de miles de personas, semejante a un lujoso dragón dorado, salía del palacio. Tan pronto como abandonaron el palacio, la gente común que esperaba a ambos lados de la Calle del Pájaro Bermellón también los seguía atentamente por detrás.
La procesión se hacía cada vez más grande, la magnífica era brillaba con más intensidad.
Este era un evento que involucraba directamente a millones de personas.
Yang Kun estaba de pie junto al Emperador Qian, su rostro adornado con una sonrisa radiante.