CAPÍTULO 123

Los ojos de Avery parpadearon mientras su mente trabajaba a toda velocidad. Jaden tenía razón. Era normal que a los niños no les gustaran ciertas cosas pero terminaran queriéndolas debido a la influencia de su entorno. Sin embargo, el hecho de que algo tan extraño sucediera justo antes del incidente de Zilvia hizo que Avery sintiera que las cosas no eran tan simples. Preguntó:

—¿Zilvia alguna vez habló sobre sus sueños o metas? ¿O mencionó algo que quisiera hacer o lugares a los que quisiera ir?

Jaden hizo una pausa por un momento antes de decir:

—Aunque no lo dijo explícitamente, durante la encuesta escolar, mencionó que su objetivo era perseguir ideales sin límites y un futuro brillante.

Avery se detuvo a mitad de una cucharada de su postre, mirando hacia arriba con sorpresa. Al notar su reacción, Jaden sonrió.

—¿Qué pasa?

Avery respondió:

—Ese también era el mío. Cuando estaba en el jardín de infantes, di un discurso sobre ese tema y gané el primer lugar.