Capítulo 41: ¡El Santo en la Espada!

Esta casa de baños parecía ser propiedad de Peng Chao, pero Xiao Chen no tenía intención de alarmar a Peng Chao. Simplemente entró en la casa de baños como un cliente normal.

Acercándose a la recepción, el recepcionista preguntó cortésmente:

—Señor, ¿qué servicios desea?

—¡Dame una habitación privada con una bañera de madera!

—¡Por supuesto!

—¿Hay alguna restricción de tiempo en el área de baños? —preguntó Xiao Chen.

El recepcionista respondió con una sonrisa cortés:

—Nuestra casa de baños está abierta las 24 horas del día, sin restricciones de tiempo. Puede quedarse todo el tiempo que desee.

—Hmm, planeo quedarme hasta mañana por la noche. Durante este tiempo, ¡no quiero servicios ni molestias de nadie!

Xiao Chen dio instrucciones serias, no queriendo errores durante su baño medicinal y entrenamiento.

—Err...

El recepcionista claramente dudó.