Villa de la Familia Zhang.
Un grupo de personas regresó con rostros pálidos y se sentó en la sala, con aspecto abatido.
Sin embargo, la mayoría de ellos no podía tragarse su orgullo y seguían maldiciendo y jurando.
Zhang Guohua tenía dolor de cabeza de tanto escucharlos y no pudo evitar gritar:
—¡Todos cállense!
Fue entonces cuando finalmente todos cerraron la boca.
Zhang Guohua dio un gran sorbo de té y decidió:
—Transfieran otro 10% de las acciones a Zhang Yixin, y después de que se haya calmado, entréguenle el contrato de transferencia de acciones. Chengshan, esta tarea depende de ti, debes traerla de vuelta a la Familia Zhang.
Al ver que el anciano daba otro 10% de acciones a Zhang Yixin, todos se agitaron inmediatamente.
—Abuelo, ¿qué estás haciendo? Acabas de darle a Zhang Yixin el 30% de las acciones, ¿por qué?
—Papá, nosotros también somos tus hijos y nietos. Con esta distribución de acciones, ¿no se convertirá Zhang Yixin en la accionista mayoritaria?