Capítulo 338: Los Fuertes Nunca Se Quejan De Sus Circunstancias

Sun Changshan finalmente se dio cuenta de que el verdadero problema no estaba en su hija, sino en este interno.

Al ver que Zhang Yang y Sun Bingrou estaban a punto de irse, Sun Changshan gritó apresuradamente:

—Esperen, Zhang Yang, simplemente regresa a trabajar mañana, pero recuerda, se te registrará una falta grave.

Incluso ahora, Sun Changshan seguía comportándose con un aire de superioridad.

Zhang Yang se rio:

—Decano Sun, no hay necesidad de esa molestia, no vendré mañana.

¿Registrar una falta grave? Qué broma.

Zhang Yang simplemente abrió la puerta y salió, y Sun Bingrou lo siguió en silencio.

El Decano Sun, al ver esta escena, apretó los dientes de rabia. Había pensado que con su magnánima oferta, Zhang Yang debería estar agradecido hasta las lágrimas.

Después de todo, este hospital era el mejor de la provincia, y innumerables estudiantes de medicina harían cualquier cosa por entrar.

Nadie estaría realmente dispuesto a irse.