Capítulo 56: Las Tornas Cambiadas

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Sin embargo, todo esto le fue informado por sus experiencias como el Emperador de los Dragones Demonio.

—Tú, ven conmigo.

Ji Dong se levantó y llevó a Lin Feng al Salón Ancestral de la Familia Ji, luego a una cámara secreta subterránea. Ji Dong, sin embargo, no entró; se quedó vigilando afuera.

Este lugar estaba prohibido incluso para el Cabeza de Familia. Cuando Lin Feng entró, liberó el Alma Residual de Ji Wuya, que se había vuelto casi transparente y estaba al borde de desaparecer. Sin mencionar hablar, ni siquiera podía abrir los ojos. Pero una vez dentro, se podía sentir claramente un poder especial que nutría el entorno.

—Ya he cumplido tu deseo.

La declaración de Lin Feng fue seguida por su giro y salida. Al ver salir a Lin Feng, Ji Dong miró dentro. Al ver el Alma Residual de su antiguo Cabeza de Familia, sus ojos se enrojecieron instantáneamente.