Primera Transformación.

Mis piernas se mueven a toda velocidad, como si no hubiera un mañana. mi aliento es cada vez más agitado y el sudor corre por mi frente. Efectivamente…

“¡Se me volvió a hacer tarde!”

No puedo creer que olvidé programar mi alarma y solamente me acosté a dormir.

Mientras me culpaba a mí misma por haber sido tan descuidada, e incluso, intentar justificarme con me encontraba cansada, corría desesperadamente para alcanzar el único metro que podría salvarme de llegar tarde. Lastimosamente no estaba ni cerca de lograrlo.

“A este paso, no lo lograré”.

Me decía a mí misma. El centro de la ciudad de Pokyo es un lugar extenso, y durante estas horas, es incluso peor. Los trabajadores se dirigían a sus trabajos, mientras que estudiantes como yo, corríamos a la escuela… o al menos los que siempre llegamos tarde.

Ahora que me acuerdo… ¡Algo más también tiene la culpa! Justo cuando me encontraba saliendo de casa, otra enorme caja me hizo tropezar y caer de frente. Me había enojado por un momento hasta que me di cuenta de que el paquete era para mí, aunque esta vez… juraría no haber encargado nada…

La caja incluía un extraño colgante de celular con forma de ajolote, era muy bonito, por lo que decidí usarlo en mí teléfono.

¡Por cierto! algo que me hizo pensar, fue el hecho de que la caja era más grande que el contenido, ¡Eso es un desperdicio de material!

***

Sigo corriendo, incluso ya puedo ver la estación a lo lejos.

“Creo que llegaré a tiempo”.

Al menos eso pienso. Bajo las escaleras a toda velocidad. Por un momento pensé en la posibilidad de deslizarme por el barandal, pero había un guardia, así que dejé de lado esa idea…

“Eso estuvo muy cerca…” me dije a mi misma.

Paso mi tarjeta y logro entrar, justo a lo lejos alcanzo a percibir el metro a punto de cerrarse.

“¡No llegaré a tiempo!”

Desesperación, es lo que siento en este momento, a pesar del intenso cansancio, el dolor de las piernas y mi incontrolable respiración, solamente una cosa se me pasa por la cabeza.

“Me falta mucho… tan solo… ¡Quisiera que el tiempo se detuviera!”

Suena estúpido llegar a pedir un milagro, más cuando sabes que no existe la magia, ni Santa Claus. Mis padres me lo revelaron a mis trece años… ¡Pero eso no es importante!

Anhelo un milagro, aunque sé que es improbable que ocurra.

“¿Qué está pasando?”

Nunca pude estar más equivocada. Justo cuando pensaba en un milagro, este ocurrió, el tiempo dejó de fluir y las puertas se detuvieron.

“¡Es mi oportunidad!”

Pensé, mientras corría hacia el metro, pero antes de que pudiera entrar, esta comenzó a… ¿pixelizarse?

No sé cómo llamar a este extraño fenómeno. Me recordó a esa extraña película de comedia en la que los videojuegos atacaban la vida real. La verdad, fue bastante chistosa. Pero esto no era una película, era la vida real.

El metro ya no es el mismo. Todo luce como un entorno postapocalíptico con un filtro rojo oscuro mal configurado. Un cielo rojo, un lugar desolado, un enorme trébol flotando como si fuera la Luna, vehículos y edificios destruidos, definitivamente, estoy en las Vegas.

¡No! ¡Ya enserio! ¡¿Qué rayos pasó aquí?!

“¡Enemigo a la vista!”

Escucho una voz algo infantil, y está muy cerca.

“Hiroko”.

¡Y sabe mi nombre!

“¡Hiroko!”

“¿Quién me está…? ¡¿EHHHHH!?”

Al voltear al lugar de donde provenía la extraña voz, me encontré con un ajolote color rosado que además… ¡Estaba volando!

“¡Un enemigo se aproxima!” No sé si ignoró mi reacción, o si simplemente estaba concentrado en darme su mensaje… ¡El cual no entiendo para nada!

“Hiroko ¡Debes Transformarte!”

Estoy al borde del colapso, ¿verdad?

A ver, un extraño ajolote el cual jamás en mi vida había visto, estaba frente a mí, flotando y, además, advirtiéndome de un extraño enemigo, sin olvidar que también me pedía transformarme… ¿Me ves con cara de chica mágica o qué rayos?

“Espera, Espera… ¿Qué rayos está pasando? ¡¿Cómo sabes mi nombre?!” Mi cabeza daba vueltas de tantas dudas, y para el colmo… ¡Ni siquiera fueron respondidas!

“¡No hay tiempo! Toma tu teléfono y grita… ¡Bajo el Alma de Saphir! ¡Transformación Estalla!”

“No entiendo nada”.

¿Esto es alguna clase de cámara oculta? ¡Porque está llegando demasiado lejos! Bueno… ¡Seguiré con el rollo!

“¡Bajo el Alma de Saphir! Transformación… ¡Estalla!” levanté mi teléfono y al recitar la oración, la pantalla brilló intensamente. Y después de una escena cliché de transformación que duró menos de un segundo, aunque para mí parecieron casi veinte segundos innecesarios, para ahorrar una animación que no existe… me encontré con un extraño atuendo y una enorme lanza en la mano, para ser precisa, parecía una lanza de justas.

“¡¿Qué rayos!? ¡¿Por qué la falda es muy corta?!”

Tomo el borde de la falda e intento estirarla para cubrirme más, pero es inútil. No importa cuánto lo intente, la falda sigue siendo corta. Ignorando el problema, me doy cuenta de algo.

“Espera… ¿Soy una chica mágica? ¡Genial!”

“Ahí viene!” dijo el extraño ajolote volador. Creo que me referiré a él como ‘ajolote’ a secas, será más entendible para nosotros.

El ajolote apuntó a una esquina oscura, donde no alcanzaba a distinguir nada. De pronto, un jabalí salió de las sombras.

Jabalí – Nivel 1

Eso es… ¿Una descripción de nivel? ¡Cómo en los juegos RPG! Esto no tiene ningún sentido…

Pero no solo eso, hay algo raro en ese jabalí, algo grande… algo poderoso… ¡Algo…!

“¡Hiroko! Debes pelear contra…” antes de terminar la oración, el ajolote se quedó boquiabierto. La razón, era la siguiente.

“¡Wow! ¡Ese jabalí se ve muy realista!” dije, realmente emocionada. Nunca en mi vida había visto detalles tan pulidos en un juego, y menos en uno de teléfono. El diseño del jabalí era tan genial que casi olvido que iba a ser atacada.