Su rostro—ah, su rostro. Es como ver agrietarse un muro de fortaleza en tiempo real. Algo vulnerable y crudo destella detrás de esos ojos gris tormenta antes de que su expresión se endurezca de nuevo. Mis palabras lo han tomado genuinamente por sorpresa.
—Viable —repite. Parece como si estuviera escuchando la palabra por primera vez.
Me muevo otra vez. Ambas nalgas han perdido sensibilidad, pero aún no quiero interrumpir el sueño de Bun. —Sí. Ya sabes—a largo plazo. Valores. Moral. Visiones del futuro.
—Estás cuestionando si aceptar el vínculo de pareja —su voz baja una octava, más áspera en los bordes. No amenazante, pero definitivamente inquieto.
—No. Lo he aceptado...
—¿Lo has hecho?
—No lo estoy negando. Solo estoy pidiendo más. Esto no se trata solo de alguna conexión mística, Caine. Se trata de dos personas con vidas separadas averiguando si son compatibles.
Su risa es corta y dura. —La compatibilidad es irrelevante. El vínculo no comete errores.