Señor Huai

Qing ayudó a Gu Chaoyan a salir del patio delantero, paso a paso.

No hacía mucho calor en este día de primavera, pero era lo suficientemente cálido. Las begonias florecían vívidamente. Pero si ella no hubiera sido la protagonista de este espectáculo, no habría podido poner un pie en este patio delantero.

Algunos sirvientes que pasaban junto a ellas, murmuraban insultos a Gu Chaoyan por lo bajo.

Pero, a ella no le importaban estas cosas insultantes. Todavía llevaba una ligera sonrisa en su rostro, sosteniendo la carta de anulación en su mano. Había logrado cancelar el compromiso y deshacerse de la papa caliente justo después de renacer. Había logrado algo, después de todo.

Ahora...

¡Estaba totalmente libre!

Gu Zhenkang le había dicho que se quedara en el Pabellón Qiong y que nunca saliera de él. Eso era precisamente lo que ella pretendía hacer. La anfitriona original no era físicamente fuerte. Además, acababa de ser rescatada del lago y había sido golpeada. Como resultado, no se sentía muy bien. En los días siguientes, iba a recuperar su salud, perder algo de peso y recuperar su piel blanca como la nieve.

Iba a estar muy ocupada.

No era frívola, pero sí se preocupaba por su apariencia, lo cual podría ser útil. Además, tenía la intención de ganar algo de dinero con sus habilidades médicas.

Tenía la intención de mudarse de la Mansión Gu y comprar una casa grande donde iba a pasar un buen rato.

Pensando en el futuro, su sonrisa se volvió más brillante.

—Señorita, ¿qué sucede? —Qing se asustó mucho al ver a su señora sonriendo ampliamente.

Estaba muy preocupada ahora. Su señorita había sido rechazada por el Príncipe hoy. Esta era la persona a quien solía querer mucho. Tenía miedo de que su señorita pudiera perder la cabeza debido a la tristeza. Después de que la Señora se fue, la vida de su señorita se había vuelto realmente difícil. Qing había estado esperando verla casarse con el Príncipe cuando creciera. Después de todo, la Señora había salvado su vida y el Príncipe y sus padres deberían haberla tratado bien. La promesa de compromiso era lo que mantuvo a Gu Chaoyan durante todos estos años sombríos.

Pero todo se fue al traste hoy.

Qing comenzó a llorar cuando pensó en esto.

Al ver las lágrimas de Qing, Gu Chaoyan inmediatamente entendió lo que esta chica estaba pensando.

Le dio una palmadita en la cabeza y dijo con una mirada sincera en su rostro:

—¡Deja de llorar! ¡Estoy realmente feliz!

Gu Chaoyan de repente se dio cuenta de que no debería actuar de manera demasiado extraña, de lo contrario, Qing no podría asimilarlo. Así que añadió como una ocurrencia tardía. —Después del incidente del lago, de repente me di cuenta de que nunca tendría una gran vida con el Príncipe si me casara con él. ¡Incluso me pidió que saltara al lago! Además, le desagradaba mucho.

...

—A partir de este día, no vamos a depender de otros. Vamos a labrarnos una buena vida para nosotras mismas —dijo Gu Chaoyan con resolución.

Qing podía ver la determinación en los ojos de su señora.

No parecía estar bromeando y lo que dijo tampoco sonaba mal.

Qing finalmente sonrió y decidió confiar en la promesa de Gu Chaoyan.

Cuando Gu Chaoyan regresó al viejo y destartalado Pabellón Qiong, se dio cuenta de que la casa parecía completamente estéril. Afortunadamente, al menos estaba limpia.

Qing era una chica diligente y trabajadora.

Aunque Gu Chaoyan a menudo hacía desastres en el pasado, Qing siempre había limpiado tras ella.

¡Hmph! La afirmación de Gu Xiuying sobre que ella apestaba era incorrecta. Al pensar en esto, se dio cuenta de que su imagen debía haber sido arruinada a través de tales rumores en el pasado.

Sacudió la cabeza e intentó dejar de lado esos pensamientos innecesarios. Tenía cosas mejores que hacer en este momento.

—Qing, ¿sabes algo sobre el Señor Huai? —Gu Chaoyan todavía no podía entender por qué el Señor Huai le había sonreído antes.

¡No había nada en su rostro que provocara tal reacción de él!