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Uno por uno, todos se despertaron, y después del desayuno, Song Yunkai condujo a Ye Qingqing y a sus padres, planeando visitar la casa del Abuelo.
La casa del Abuelo estaba ubicada en un pequeño pueblo relativamente remoto en la Capital Mágica, enclavado entre montañas y ríos. Después de años de promoción, hacía tiempo que se había convertido en un destino turístico y vacacional.
Al llegar, contemplando las bulliciosas calles del pequeño pueblo, Song Bu se sintió profundamente emocionado. Dicen que el corazón puede flaquear cuando uno regresa a su tierra natal, un sentimiento que pensó que podría evitar, pero en el momento en que realmente pisó esta tierra, las piernas de Song Bu temblaron.
—¡Hermano pequeño!
El Tío Song había regresado a casa después de recibir la noticia ayer y estaba esperando temprano esta mañana en el camino que debían tomar.