Capítulo 133 - La Ofrenda Envenenada y una Sorprendente Inversión

Un suave golpe en mi puerta rompió la quietud de la mañana. Levanté la mirada del antiguo texto de cultivación que había estado estudiando, preguntándome quién visitaría a una hora tan temprana.

Cuando abrí la puerta, Ellis Mitchell estaba allí, su postura encorvada y sumisa—un cambio dramático de su habitual comportamiento arrogante. Círculos oscuros sombreaban sus ojos, y su ropa normalmente impecable parecía ligeramente arrugada.

—Liam —dijo, con voz apenas por encima de un susurro—. ¿Puedo pasar? Necesito hablar contigo.

Lo estudié cuidadosamente. A pesar de nuestra confrontación hace apenas unos días, había algo diferente en él hoy—una desesperación que parecía casi genuina.

—¿Qué te trae por aquí, Ellis? —pregunté, sin moverme de la entrada.

Tragó saliva con dificultad. —He cometido errores terribles. Yo... necesito orientación. Y he traído algo para hacer las paces.