—¡Ese es el tipo que nos faltó al respeto!
Las palabras de Pelo Amarillo quedaron suspendidas en el aire mientras su primo daba un paso adelante, rodeado por su séquito de matones. El hombre era bajo pero de constitución poderosa, con la cabeza rapada y un cuello grueso como el tronco de un árbol. Tatuajes de serpientes se enroscaban por ambos brazos, desapareciendo bajo su ajustada camiseta negra.
—Así que tú eres el que cree que puede causar problemas en mi establecimiento —gruñó, haciendo crujir sus nudillos. Sus ojos se entrecerraron mientras me evaluaba—. Tienes agallas, niño bonito.
Permanecí sentado, haciendo girar el líquido ámbar en mi vaso.
—¿Y tú eres?
—Marcus Nolan. Administro Midnight KTV para mi primo César. —Hinchó el pecho—. Eso significa que yo decido quién vive y quién sale de aquí en pedazos.
Eamon se tensó a mi lado, pero puse una mano tranquilizadora en su brazo.