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¡Ascensión a un dragón!
El caparazón de esa antigua tortuga-dragón ahora estaba arrugado, y sobre él, un verdadero dragón estaba elevándose y danzando.
Desprenderse de su caparazón para convertirse en un verdadero dragón, tal ascensión solo había sido escuchada por Chu Fengmian en textos antiguos—esta era la primera vez que lo presenciaba con sus propios ojos.
Criaturas como la antigua tortuga-dragón, con sangre de Dragón Verdadero, de hecho tenían la oportunidad de ascender a dragones, pero tales oportunidades eran una en diez mil.
Muy pocos podían realmente ascender a dragones.
Solo obteniendo una gran oportunidad se podía lograr esto. Para la antigua tortuga-dragón, atravesar al reino del Poder Divino había sido casi su límite—una enorme oportunidad.
La ascensión a un dragón había sido algo que nunca había soñado.