Capítulo 1, El miserable.

En un día de lluvia Tarik tenía mucha hambre, este llama a su madre pero ella no le presta atención y Tarik procede a preguntarle a su hermano mayor.

- ¿Sabes dónde está mamá? - dice Tarik.

- No me andes molestando - responde su hermano con un tono amenazante.

Tarik sigue buscando a su madre hasta que la ve sentada en la ventana de su diminuta habitación, era algo desorganizada pero al menos podía dormir en ella.

- ¡Tarik! - dice su madre con un tono de furia - Deja de estar gritando por toda la casa.

- Solo quería decirte que tengo mucha hambre - replica Tarik con notable tristeza en su tono.

Su madre lo ignora completamente y Tarik se va triste de su habitación. Ya en la sala ninguno de sus hermanos le presta atención. Tarik procede a jugar con su único amigo, su osito de peluche Craig.

Al cabo de unas horas, Tarik, casi moribundo por el hambre ve a un ratón en un agujero de la casa, según lo que ve Tarik el roedor quiere darle algo, este se le acerca con cautela, la rata muy tranquila le da un pedazo de pan. Aunque es raro Tarik acepta el obsequio y come, la rata por su parte entra a su agujero.

En la noche Tarik quiere abrazar a su madre pero esta lo rechaza y lo saca de la habitación, dentro esta grita - ¡Odio mi vida por este estúpido niño! - Aunque Tarik la escucha intenta creer que no se lo dijo a él. Tarik intenta dormir pero no puede, abraza a su osito fuerte intentando sentir algo de cariño hasta que se queda dormido.

Al día siguiente Tarik sale al patio a jugar, mientras pasa un buen rato su madre sale de la casa sin decir dónde va.

- ¿Dónde vas mamá? - pregunta Tarik.

Su madre lo ignoró, regresó ya acabado el día con alimentos, luego preparó algo de cenar y lo dejó sobre la mesa, la madre se alejó silenciosamente hacia su habitación. Cada uno tomó sus distintas porciones, pero, Tarik al ser el menor solo alcanzó a tomar las sobras. Al pasar el rato sus tripas ya rugían de hambre, Tarik se sentó al lado del agujero donde el ratón del día anterior lo había ayudado, este quedó pensando por qué este animal lo ayudó.

Al pasar unos minutos, la madre de Tarik sale de la habitación y empieza gritarle groserías - ¡Este niño de mierda! - decía ella con mucha furia, Tarik no sabía lo que estaba pasando pero sabiamente corrió a su habitación y se escondió debajo de la cama. Mientras lloraba este pensaba que era mejor irse ya que en esa situación no duraría mucho, así que decidido tomó su peluche y esperó escondido hasta el amanecer.

Antes de que el sol saliese por completo Tarik ya estaba listo para irse, con su peluche en brazos salió de la casa sin que nadie siquiera se diera cuenta, con un largo camino por recorrer valientemente siguió colina abajo hacia el pueblo más cercano.