Capítulo 19: Espinas Bajo La Corona

El sol apenas había salido y Lily ya estaba en los campos. Su hombro aún le dolía con cada movimiento, sanando más lentamente de lo que debería porque estaba sin lobo. Ellos susurraban, ponían los ojos en blanco y hacían sus burlas habituales.

—¿Qué clase de hombre lobo no puede sanar fácilmente? —murmuró uno mientras ella pasaba—. Es tan tonta que quizás también sea sorda.

Lily no respondió. Mantuvo la mirada baja y se concentró en la tierra frente a ella.

De repente, algo duro golpeó el borde de su azada. Hizo un ruido metálico contra algo sólido enterrado bajo el suelo. Curiosa, Lily se arrodilló y apartó la tierra con cuidado.

Era un pequeño tótem, con forma de animal. Un zorro, tal vez. Los bordes estaban desgastados, pero los detalles aún se mostraban—orejas curvadas, ojos huecos, símbolos tallados en su espalda. Cabía perfectamente en su palma, suave y extrañamente cálido al tacto.