Un Cara Cortada tan honesto

Así que, la persona que los había dejado sin un centavo era en realidad ¡Ling Chuxi!

—Ella es la discípula del Profesor Mu, ¿no es así?

—Tuvimos suerte —Cara Cortada se frotó el cuello con la palma de la mano para tranquilizarse. Afortunadamente su cuello estaba intacto. Para alguien que había sido aceptada por Mu Liufeng como su discípula, ¿qué tan ordinaria podría ser?

—En el futuro, nunca la ofendamos. Es demasiado fuerte —dijo la persona que había dicho palabras tan desagradables a Ling Chuxi anteriormente. Se dio palmadas en el pecho mientras hablaba para calmar el trauma que sentía.

—Exactamente, exactamente. Tendremos que dar un rodeo o desviarnos por una ruta diferente si la vemos. —Una de las mujeres habló esta vez. Estaba empapada en sudor frío.

—¿Ling Chuxi? ¡Ella no cuenta como nada! —Justo cuando Cara Cortada y el resto de su pandilla lamentaban sus destinos, una voz femenina resonó desde cerca. Su tono era enojado y despectivo.