Eira ajustó su postura, preparándose. Estos no eran atacantes ordinarios. Su velocidad, precisión y silencio los marcaban como profesionales entrenados.
[Maestra,] la familiar voz mecánica de la IA resonó en su mente, y Eira tuvo que moverse a un lado para esquivar un ataque que no había esperado debido a su momentánea sorpresa.
[¿IA? ¿Eres tú? ¡¿Dónde diablos has estado?!]
[Maestra, he estado sometida a una actualización a mi capacidad completa debido a su próximo cumpleaños.]
[¿Mi decimoctavo cumpleaños? Deberías habérmelo dicho.]