Capítulo 82

Capítulo 82 - Midiendo más que tela

—Lamento si te hice sentir incómoda —dijo Damien mientras caminábamos hacia mi estudio después del almuerzo—. No era mi intención.

Levanté la mirada, encontrándome con su sincera mirada. Mi corazón se agitó. Incluso disculpándose, este hombre era imposiblemente atractivo.

—No lo hiciste —mentí, jugueteando con la correa de mi bolso—. Solo que... no estoy acostumbrada a que alguien se preocupe tanto.

La forma en que me había mirado durante el almuerzo —como si quisiera ser responsable de mi seguridad, de mi felicidad— era abrumadora. Después de la traición de Julian, después de años aprendiendo a valerme por mí misma, la idea de dejar entrar a alguien más me aterrorizaba.

—Tu estudio está justo después de esta esquina, ¿verdad? —preguntó Damien, cambiando de tema sin esfuerzo. Mis hombros se relajaron con alivio.

—Sí, justo después del...