(Academia Militar de Rodova – 2do Piso, Edificio de Administración, Sala de Personal Docente)
Mientras Leo se dirigía hacia la sala de personal, su mente seguía pensando en las consecuencias de su pelea con Su Yang.
Revelar su pérdida de memoria a Su Yang había sido una apuesta. Una debilidad expuesta. Una vulnerabilidad al descubierto.
Pero al final, algo bueno había surgido de ello.
El Mayor Hen le había dado una pista—un profesor que podría tener la capacidad de ayudarlo a recuperar sus recuerdos perdidos, y si realmente funcionaba, Leo sentía que podría cambiar completamente su situación.
«Si puedo recuperar mi memoria sin depender de aquellos que la borraron... entonces podré retomar el control de mi vida—»
Ese pensamiento por sí solo lo llenó de un renovado sentido de determinación.
Optimista, llegó a su destino con una suave sonrisa asomando tras sus labios magullados.