Chapter 292 El cálido ambiente familiar

Después de un rato, también llegó el automóvil de Margaret. Al mirar a su hija, que vestía ropa profesional y exudaba confianza en sí misma, aquella pareja de ancianos se sintió muy satisfecha. Al menos sabían por qué razón su hija estaba tan entregada a su trabajo. No se trataba simplemente de dinero. Su intención era hacer uso de sus propias habilidades para contribuir al desarrollo de su país.

"¡Tía!", exclamó el pequeño, al tiempo que saltaba delante de ella, deseando abrazarla.

Margaret lo levantó y lo besó en su carita. "¿Me extrañaste?", le preguntó.

"Sí, mucho", repuso.

"Tienes conciencia. Te traje una caja de bombones de chocolate", dijo ella. Acto seguido, sacó una delicada caja, en la que solo había seis bombones de una marca muy cara.

"¡Genial! ¡Me encanta el chocolate!", exclamó el pequeño, que tomó la caja inmediatamente.

"No te quedes afuera. Entra al salón y toma asiento. La cena estará lista pronto".