Jessamyn tomó asiento de inmediato y extendió su mano para sostener la de su esposo. "Oh, querido... lo siento. Me equivoqué. Estuve mal, realmente no quería mentirte".
"Oh, pero claro que no lo hiciste a propósito. Claro que no quisiste usar este embarazo falso para incriminarme y hacerles creer que acabé con la vida del descendiente de la familia Lambert. Y aún no te he perdonado por lo que me hiciste ese año y aun así te atreves a preparar una trampa como esta", se burló Vivianna con un tono sardónico.
La mirada de Xenophilius se posó en el rostro de la joven. Luego, miró a su esposa y preguntó: "¿Lo que dijo es verdad? ¿Solo pretendiste tener este ab*rto? ¿Lo hiciste para incriminarla?"
"Yo... yo..." intentó hablar. Sus labios rojos temblaron, pero no pudo decir nada porque esa era la verdad. Y, ante la verdad, ni siquiera tuvo el coraje para sentir pánico.