Definitivamente, Margaret no podía evitar pensar en él. En ese momento, no había ningún coche en la ancha carretera y de repente, un vehículo todoterreno se apareció frente a ella. De hecho, le resultaba difícil poder disminuir la marcha a la velocidad a la que iba, por lo que tuvo que tocarle bocina y pedirle que le cediera el paso. Sin embargo, el vehículo se detuvo en medio de la carretera, bloqueando el camino.
"Ah ..." Aunque Margaret intentó frenar con todas sus fuerzas, aun así golpeó la puerta lateral del otro vehículo. Afortunadamente, no venía a demasiada velocidad y simplemente chocó con fuerza contra el otro auto.
En consecuencia, Margaret sintió un leve dolor en la cabeza. Además, cuando chocó, sacudió la cabeza y se sintió un poco mareada.
En ese momento, un joven saltó del vehículo todoterreno, se acercó y llamó a la ventana, para luego sonreírle y dirigirse a ella. "Señorita, baje. Hablemos de la compensación".