Esta tarde, Chávez se fue enojado. Agustín no lo retuvo ni estuvo de acuerdo con su irrazonable petición.
Tres días después, el avión de Agustín y Vivianna se dirigió directamente al país donde se celebró la cumbre.
Chávez se vio obligado a divorciarse. Su esposa estaba decidida a divorciarse de él. Sobre este punto, se lo ocultaron a Vincent y a su esposa en el hospital. Chávez se arrodilló frente a su esposa, quien celebraba el divorcio con cara fría.
Si no se divorciaban, ella se llevaría a los niños de aquí para siempre y nunca volvería. Si se divorciaban, ella le dejaría volver a ver a los niños.
Chávez se vio obligado a divorciarse de su esposa por la tarde. La única casa a su nombre se la dio a su esposa y él realmente no tenía nada.