En este momento, el corazón de Xia Wan se había vuelto mucho más fuerte, porque alguien le había inyectado poder, y esta persona era Yi Xi.
No importaba cuán crueles y desagradables fueran las palabras de Ai Wa, no podían lastimarla.
"No depende de ti decidir si eres digno o no", respondió Xia Wan con calma.
Ai Wa pensó que iba a sufrir un fracaso, y de repente hubo un destello de expectativa en sus ojos.
"Entonces me gustaría ver cuánto te ama Yi Xi". Ai Wa sabía que en ese momento, Xia Wan estaría bajo presión de todos lados, ¡y Yi Xi también la odiaría!
Después de que Ai Wa salió, pensó en algo. Marcó un número y se quedó en el pasillo vacío. Una voz femenina se escuchó del otro lado. "¿Qué pasa?"
"Quiero que me prometas que a la señora Fran no le gusta saber nada sobre la "Fragancia Hechizante". No dejará que nadie más lo sepa. No lo mencionó en su propia carta".