Destrozar Esta Ciudad

Cuando la puerta se cerró tras ellos, el apartamento quedó en silencio.

Logan miró el reloj de pared. 4:00 AM.

Jean se movió lentamente, cruzando la habitación para pararse junto a la ventana, su silueta perfilada por el tenue resplandor de la ciudad. Logan no dijo nada al principio, solo la observó.

El silencio entre ellos ya no era solo incómodo... Era pesado. Como si algo no dicho flotara en el aire, cargado de historia, amargura y algo más... anticipación.

—¿Finalmente vas a decirme qué está pasando realmente? —preguntó Logan en voz baja.

Jean no se dio la vuelta.

—No lo entenderías.

—No estoy pidiendo entender —dijo él—. Estoy preguntando porque necesito saber en qué me estoy metiendo.

Ella lo miró por encima del hombro, el más leve destello de vulnerabilidad cruzando sus facciones antes de enterrarlo nuevamente.

—Ya te lo dije —dijo ella—. Este matrimonio... No se trata de amor. Es guerra. Y no quiero que nadie más sangre por mi culpa.