El Cielo Rojo Tomando El Mundo

El primer día del trayecto para salir de la ciudad, junto al nuevo grupo de personas, fue en realidad muy tranquilo, pues prácticamente recorrieron calles vacías y abandonadas.

Con sus pocas excepciones, casi no se encontraron con Caminantes, pero eso no significa que no surgieran problemas.

Esto se debió, a que aunque las calles estaban prácticamente desiertas de muertos y personas vivas, aun quedaba el rastro de los momentos crueles del apocalipsis, desde simples accidentes de tráfico, hasta claras matanzas entre sobrevivientes, e incluso, cuerpos cercenados y desmembrados de niños e infantes.

Esto provoco un gran sentimiento de desesperación entre el grupo civil de mujeres, escoltadas por el ejército, lo cual incluyo a algunos hombres, y por supuesto, varias mujeres del grupo de Takashi, tampoco se lo tomaron muy bien.

A pesar de todo, solo ese primer día de viaje, sirvió para establecer una clara presencia e imagen de fuerza y habilidad, por parte del grupo de Takashi.

Sobre todo de personas como Rika, Godou y Saeko, que eran los más activos, pero claro, nadie se atrevía a menospreciar a Takashi, Kohta, Ayane, Yuriko y Rei, sin hablar de la habilidad ya conocida de Kiriko.

Mientras que los hombres mayores y más experimentados del ejercito, veían con mayor asombro a mujeres aparentemente frágiles, como Shizuka, Sumire, Saya, Yuuki y hasta Alice, las cuales en su mayoría, ni siquiera habían hecho nada a los ojos de otras personas, pero si te fijabas lo fácil que era para ellas seguir el ritmo, de las personas capaces, a diferencia de los otros civiles o incluso de algunos soldados novatos, entonces era casi inaudito.

Aunque la distribución del grupo, se veía a simple vista hecho un desastre, nada era más falso, siempre había soldados que se movían más lento, más rápido o se alejaban de vez en cuando, como si rodearan de forma constante al grupo, a si mismo, Ayane, Kiriko, Godou y Rika, eran los encargados de dicho trabajo, en su propio equipo.

Aunque los pocos Caminantes que se encontraron eran de nivel 3, siendo el más fuerte un nivel 4, la facilidad con que Saeko y Godou los eliminaron, antes de que los soldados pudieran siquiera reaccionar, dejo un impacto visual muy grande en las personas, de múltiples maneras.

Aunque la mayoría aun no aceptaría que dichas habilidades, tenían que ver con capacidades sobrenaturales, lo cual, dependiendo de la situación, en realidad no era incorrecto, debido a que personas como Saeko y Godou, ya tenían la capacidad para enfrentar a Caminantes de nivel 3 y 4, antes de su despertar espiritual, solo que ahora les resultaba más sencillo.

Cuando llego la noche, Mitsuki, tomo una cierta alineación de edificios, como protección, al tiempo que ponía guardias en la cima de estos, y ordeno preparar las tiendas de campaña o bolsas de dormir.

A pesar de que hubo una clara división entre los campamentos, todavía había una tienda que "unía" a los dos grupos, donde Rika, Kiriko, Takashi, Mitsuki y el hombre llamado Tatsuya, se reunieron para platicar y hablar de varias cosas, principalmente sobre la espiritualidad y los cambios del mundo, que eran cosas nuevas para Mitsuki y Kiriko.

Incluso antes de la muerte de Soichiro, Saya tuvo la idea de poner a trabajar a Kyoko, Sumire, Shizuka y por supuesto, Alice, para que ellas se sintieran útiles y al mismo tiempo, aprendieran varias cosas sobre los Caminantes.

Esto se logro, al hacerlas escribir y copiar varias veces información, sobre la forma en que cambiaria el mundo, las modificaciones y transformaciones de Caminantes y animales, energía espiritual, formas o consejos de cómo crecer y volverse más fuerte, así como muchas otras cosas.

Takashi contaba con una grabadora, en la que guardaba la información que se le venía a la cabeza o recordaba, luego, Saya la clasificaría y la organizaría de cierta manera, para que las mujeres hicieran notas de tales cosas.

Por supuesto, había información general, para que se le pudieran entregar a cualquiera, y la especifica, solo para el grupo o personas de confianza.

Varias de esas cosas escritas por las chicas, fueron dadas a Mitsuki, para que las revisara y distribuyera a su propio juicio.

El siguiente día, comenzó con un ataque de Caminantes, al menos de cincuenta, entre ellos, dos nivel 5.

Pero Godou y Saeko, se deshicieron de ellos con relativa facilidad, y debido a que los muertos atacaron, justo desde la dirección del grupo de Takashi, en realidad no hubo siquiera oportunidad, de que los militares interfirieran.

Takashi mismo no actuó, pero hizo que Rei, Saya y Yuuki atacaran, mientas las cuidaba, al mismo tiempo que Kiriko, Yuriko, Ayane y Rika, también usaban sus habilidades para luchar.

Ese evento dejo a todas las otras personas anonadadas, pues aunque había Caminantes de nivel 3 en ese grupo, la mayoría eran de nivel 4, y a las personas comunes, les era muy difícil y casi imposible, defenderse de dicho monstruo, mucho menos enfrentarlo, por no mencionar una multitud.

Eso hizo que muchos miraran con asombro, miedo, e incluso odio, al grupo de Takashi, mientras que los más listos y los militares, en primer lugar aumentaron su cautela contra ellos y en segundo, por primera vez, se pusieron a reflexionar seriamente, sobre lo que se les había dicho del poder espiritual.

Eso era casi lógico, pues si vieras a alguien como Godou, Takashi y hasta Saeko, vencer a esos monstruos, cualquiera podría aceptarlo, incluso si surgieran dudas, pero cuando veías a alguien como Saya, Yuuki e incluso Yuriko-san, mujeres que parecían frágiles o de las que se notaba, no tener aptitud o técnica de artes marciales o siquiera entrenamiento de defensa personal, moviéndose casi tan rápido como Caminantes de nivel 4 y con una aparente fuerza, capaz de cortar cabezas de un solo tajo, la cuestión empezaba a resultar bastante irreal e inquietante.

Por otro lado, había que decir, que nadie se percato de Zeke, el "perrito", que mientras todos luchaban, vigilaba de manera casi perezosa a Aliice, Sumire, Shizuka y Kyoko.

Sin embargo, Zeke había cambiado mucho, en un principio, era un animalito, que parado en cuatro patas, apenas alcanzaba los treinta centímetros de altura, pero ahora, tenía casi cincuenta centímetros de altura.

Al mismo tiempo, el iris de sus ojos, había tomado un verde azulado muy hermoso, mientras que su cola, estaba comenzando a crecer.

Lo que nadie se imaginaba, al menos entre el grupo de militares y otras personas, incluyendo Asami y Kiriko, era que su velocidad podría resultar ridícula, a lo que Takashi calculaba, que mínimo en ese aspecto, estaba a la par con un Caminante de nivel 10, mientras que cada una de sus patas, era tan poderosa, que avergonzaría al boxeador profesional más fuerte que se pudiera hallar, al tiempo que sus garras, dejaban en ridículo a las cuchillas de muchas espadas.

En concreto, la fuerza y capacidad del pequeño "perrito", avanzaban a velocidades soberbias, y era la carta secreta más fuerte del grupo.

El día continúo con bastante actividad, y mientras más avanzaban hacia las afueras de la ciudad, aunque en su mayoría estaban en solitario, cada vez había una mayor cantidad de Caminantes de nivel 4 y 5, que los atacaban.

Gracias a eso, Takashi aprovecho para entrenar a Rei, Saya y Yuuki, sobre todo las últimas dos, así como incluso a Kohta, Nana y Yuriko, la cual, aunque tenía talento, solo sobresalía con armas de fuego, y en algunas técnicas de autodefensa.

Casi a medio día, cuando el grupo hizo un descanso, mientras algunas personas se distribuían para buscar alimentos, agua y otras cosas que fueran útiles, de pronto, del lugar hacia donde se habían ido un grupo de soldados, se escucharon varios disparos y hasta una explosión.

Después de una pequeña conmoción, un soldado se acerco a pedir ayuda y a decir que la situación había sido controlada, esto hizo que todo mundo se dirigiera hacia aquel lugar, para ver lo que había pasado.

Cuando Takashi y los otros llegaron, vieron a dos personas muertas, uno de los "plebeyos" y uno de los gánsters, que la hacían de guardaespaldas, para los hombres que parecían políticos.

Por otro lado, un soldado, de unos cincuenta y cinco años, con el pelo algo canoso, pero alto y de constitución férrea, estaba sentando en el suelo, con una cara de dolor y un brazo casi desprendido.

Mitsuki se había acercado al hombre rápidamente, muy preocupada, y otro soldado, al parecer medico, estaba atendiendo su herida, pero con una expresión de asco y miedo, la cual provocaría, que si no fuera por la amenazadora mirada de la comandante, ese "medico", se distanciara de inmediatamente del hombre herido.

Mientras que muy cerca, se encontraba el cadáver de un perro, que debido a las anomalías de este, así como los evidentes signos de destrucción a su alrededor, era obvio, que la explosión escuchada antes, fue hecha para matar a ese animal.

El perro era muy grande, a pesar de no ser su raza, era tan enorme como un Gran danés, pero el pelo de su cuerpo, era de un color rojo brillante, junto a unas garras inusualmente gigantes.

Entonces, notando algo, Takashi se acerco al cadáver de la bestia, mientras ponía una mano en su Katana, algunos soldados lo notaron, e hicieron un ceño de enojo.

Pero cuando el chico se paro cerca del "cadáver" del perro y un soldado iba a decir algo para regañarlo, el perro en realidad se movió.

Levantando la parte frontal de su cuerpo y abriendo las fauces de una manera anormalmente grande, el animal intento morder a Takashi, pero este ya estaba preparado, y desenfundando su espada de forma muy rápida, corto la cabeza del perro.

Después de presenciar esa escena, todos se quedaron como de piedra, y nadie pudo decir una palabra.

Tal vez ni ellos estaban seguros de que era más impresionante, si el perro que no había muerto después de múltiples balazos y la explosión de una granada, o que el adolecente delante de ellos, le cortara la cabeza tan fácilmente.

Después de reaccionar un poco, Mitsuki respiro profundamente para calmarse, después de todo, ella también estaba demasiado anonadada.

Se tenía que mencionar, que para los tres soldados, que presenciaron el ataque del animal, así como para Mitsuki, que recibió el informe, la actuación de Takashi fue mucho más anómala, ya que ellos sabían, que el perro recibió más de cientos de disparos de frente, incluso en la "cara", mientras que una granada, que es la que supuestamente lo había derribado, exploto justo bajo su abdomen, pero todo eso, ni siquiera le quito un pedazo de pelo al animal, mientras que el chico, solo con una espada, corto la cabeza entera.

Una vez tranquila, la mujer se acerco a Takashi y dijo.

- ¿Qué pasara con Matsumoto?

- … –después de escuchar la pregunta, el chico volteo a mirar al hombre y sus ojos soltaron un resplandor, esta vez muy evidente para todos.

Sin embargo, mientras todos se sentían raros y algo intimidados, ante esa nueva y extraña demostración, el hombre herido, Matsumoto Saito, estaba casi aterrado, ya que al recibir esa mirada, sintió como si todo de él, fuese visto por el chico, su pasado, presente, futuro, sus pensamientos y miedos; esta era la primera vez, desde hace mucho tiempo, tal vez desde su juventud, que sentía miedo.

Aunque eso era solo una ilusión de la imaginación del hombre, no evito que sudor frio se derramara de su espalda, y hasta el dolor de su brazo desapareciera por un instante.

- …. Respecto a los animales, las posibilidades de transformar en Caminantes a los que muerden o hieren, es muy pequeña, hay que preocuparse más por infecciones y venenos –empezó a hablar el chico– no sé de muchas cosas, pero no está envenenado ni se transformara en Caminante, lo demás, depende de las capacidades del médico, de la fuerza del hombre y de su suerte.

Una vez que termino de decir eso, se dio la vuelta y se dirigió hacia su propio grupo.

Esta vez, a Mitsuki no le importo la actitud del chico, por el contrario, solo se sintió aliviada, y se retiro para dar órdenes y hacer que Matsumoto, tuviera una buena atención.

… … … … …

Ese mismo día, un poco más tarde, justo antes de que la noche cayera, Takashi miro profundamente el cielo.

Después de un rato, le hablo a Rika y le pidió que le dijera a Mitsuki, que esa noche, no había que dormir cerca de ningún edificio.

La mujer acepto fácilmente, y después de organizar el campamento, en el sitio más desolado de edificios que pudieron encontrar, Takashi le dijo a Godou y Saeko, así como a Rika y Ayane, que recorrieran un perímetro mayor y destruyeran todo lo que estuviera dentro de este.

Mirándose mutuamente, todos entendieron lo que se acercaba, así que solo pusieron caras serias y se fueron a trabajar.

Mas noche, cerca de las once, en la tienda de Mitsuki, aparte de esta y Tatsuya, se reunieron Takashi, Saeko, Rika, Kiriko y Godou.

Después de que todos entendieran la situación, una vez que el chico se las conto, un largo silencio cubrió el lugar.

Tatsuya tenía una cara disgustada, pero había visto las capacidades de Takashi y los otros, por lo que no podía evitar empezar a creer, aun así, lo que el chico decía, era una situación mucho más inverosímil, pero dado que su comandante, estaba dispuesta a tomarlo en cuenta, solo pudo mantener la boca cerrada.

- …. Déjame ver si te entiendo –hablo Mitsuki después de un rato– mañana amanecerá con el cielo pintado de color rojo, esto hará que el ciclo cambie, y el día dure 28 horas, así mismo, la duración del cielo rojo será de ocho horas en el comienzo y se extenderá… … bueno, ya recibí las notas con esa información, y lo comprendo, pero lo que acabas de decir… ¿por qué no venía con las notas?, y ¿Qué significa un temblor tan devastador como un terremoto, pero menos evidente?, ¿Qué significa la dispersión de energía y la aceleración del crecimiento espiritual?

- …. Bueno, en cierto sentido, olvide esos detalles, ya que son… no importa, no es como si pudieras prepararte para algo como eso, solo por saber… las medidas que tomamos son las mejores –contesto Takashi, y luego de organizar un poco mas sus pensamientos, siguió hablando– justo antes de que el cielo rojo se ponga, sentiremos un temblor, pero incluso si estamos en un lugar en que sea percibido muy fuerte, no superara los 4 o 4.5 grados aproximadamente, sin embargo, en realidad será más poderoso de lo que te puedas imaginar… explicártelo… no lo creerías, más que lo vieras… pero como mínimo, puedo decirte que este evento, romperá continentes enteros, solo que debido a la fuerza sobrenatural, incluso si hay tsunamis, serán pocos y no muy poderosos, así mismo, ni siquiera podremos sentir la magnitud de dichos cambios…

- … –no hablar de Tatsuya, que parecía morderse los dientes, para no hablar de lo absurdo que sonaba lo que el chico decía, incluso Rika y Saeko, tenían caras extrañas.

- … si tuviera que decir algún ejemplo de esto, es como el truco que se hace con una banana, que con una especie de aguja, separas levemente la cascara, sin embargo esta no cae, pero cuando el "mago" le pone fuerza con los dedos, esta se abre "mágicamente", o algo parecido –dijo Takashi– la idea es similar, el temblor dejara las tierras, edificios y lugares, en un estado frágil, luego, el mar y… otras cosas, harán el resto, de manera lenta, pero dependiendo del lugar, aun se puede percibir.

- … –todos se frotaron la cabeza, y no sabían que decir, así, casi como si fuera unánime, decidieron dejar el tema de lado, no es como si esto les afectara de manera inmediata, según las palabras del chico.

- … …. Respecto a lo otro, es mucho más sencillo –volvió a hablar Takashi, ganándose la atención de las personas– una ola de energía espiritual, tan pura, que llamarla como tal, casi es ridículo, barrera el mundo, esta energía, obligara a que toda la demás energía se disperse, para luego ser absorbida… es como si una botella entera de aceite, callera en un vaso de agua, solo que debido a la naturaleza de la energía, una terminara asimilando a la otra.

- Y cuando digo toda energía, me refiero a toda, desde la energía eléctrica natural, cinética, y espiritual, por supuesto, la energía contenida en aparatos, armas y plantas nucleares –continuo hablando el chico– esto claro, provocara, la avería de muchas cosas, lo único bueno, es que no tendremos que preocuparnos por el daño de la radioactividad, por que dicha "energía", también será barrida e incluso purificada.

Tomando unas notas que Saya le había dado, se las paso a los presentes, pues con la forma en que la niña explicaba las cosas, era más sencillo de entender.

Después de comprender las cosas un poco mejor, casi nadie sabía que decir.

- … …. Habías mencionado que esto ayudara al crecimiento espiritual, significa eso, ¿Qué después de mañana, todos podrán usar la espiritualidad?

- No, por supuesto que no, pero será más sencillo despertar dicha energía, los que nazcan a partir de mañana, ellos sí que nacerán casi en el primer nivel del despertar del alma, y ciertamente ayudara a que algunos humanos lleguen al nivel de despertar espiritual –contesto Takashi– Mientras que para alguien como tú, te da grandes posibilidades de amanecer con un nivel de Alma Pasiva.

- … …. Veo, sin embargo, esto también hará más fuerte a esos monstruos, ¿cierto? –dijo Mitsuki, un poco frustrada.

- Así es, mucho más que a nosotros.

Con esas palabras, el lugar volvió a caer en un silencio sepulcral.

- … … …. ¿Debemos prepararnos para un ataque? –pregunto Mitsuki algo agotada.

- A menos que haya de esas cosas cerca, no, e incluso si lo hacemos, no necesitas preocuparte, la situación es mucho más sutil que el momento del Destello Primario, y esos monstruos no entraran en un estado de frenesí, aunque claro, todo tiene su lado negativo, pues eso también significa que se hacen más fuertes, en un lugar en el que no podemos interferir, ni siquiera un poco.

- Pero por otro lado –intervino Rika– desde mañana nuestro movimiento debe ser más rápido y más compacto, así mismo, estar listo con todo lo que tenemos, pues cualquier cosa con la que nos encontremos, puede significar un riesgo mortal, sobre todo para los civiles y tu unidad.

- …. Entiendo.

Una vez que terminaron de hablar con Mitsuki, el grupo de Takashi se retiro y se reunió con sus otros compañeros.

También hablaron y explicaron varias situaciones, todos tenían caras serias y se pusieron algo nervosos.

- No deben preocuparse, por el momento, no corremos peligro, al menos no mayor, que en el que hemos estado hasta ahora, lo único es que deben ser mentalmente más fuertes, para adaptarse –dijo Takashi– con muy pocas posibles excepciones, a partir de mañana, todos serán Alma Pasiva, así que tendrán más capacidades de defenderse, siempre y cuando no pierdan el deseo de ello.

- … –después de sus palabras, Sumire y hasta Kyoko, tenían miradas un poco sombrías, pues no confiaban en sí mismas.

- Para lograr o tratar de asegurar, de que todos obtengamos el mayor beneficio esta noche, hare un pequeño truco, pero este también necesitara de su cooperación, por lo que esta noche, dormiremos en cuatro grupos –dijo Takashi, después de pensarlo un poco– Kohta, Nana, Sumire, Asami, Alice y Zeke, ustedes dormirán juntos en el centro del campamento, luego será Rika, Shizuka, Kyoko, Yuriko, seguido de Godou, Ayane, Kiriko-san y Rei, mientras que Yuuki, Saya y Saeko, dormirán conmigo. Nos acomodaremos en forma de espiral, siendo yo y mi grupo, la parte externa, y el grupo de Kohta el centro, ¿alguna objeción?

Aunque personas como Nana y Sumire tenían caras algo rojas, pues todos parecían asociarlas en una relación con Kohta, en realidad no se quejaron, las únicas con caras oscas, eran Kiriko, Rei y Ayane, haciendo que esta última, mandara una mirada mortal a Takashi, el cual se hizo el tonto y fingió no verla.

Ahora ya todos sabían de la conexión de almas, por lo que entendían, que solo con las personas más cercanas, se podrían obtener los mayores beneficios, por eso muchos se sentían incomodas.

Asami era la más ajena al grupo, pero era buena con los niños y los animales, mientras que se llevaba bien tanto con Sumire, como con Nana, y junto a su "buen" carácter, era la mejor opción para quedarse en ese grupo, haciendo que Alice y Zeke, sirvieran de comodín, para relajar el ambiente.

Rei se sentía excluida, pues aunque había oído que la conexión entre parientes, sobre todo los que se querían, era mayor que la de los amantes, aun se sentía hecha a un lado por Takashi.

Mientras que Kiriko, estaba molesta, tanto por su hija, como por la asociación de ella con Godou, pero no tenía razones para exteriorizar sus malestares, debido a varias cosas.

… … …

- … si las plantas nucleares, se asemejaran a bombillas de luz, que simplemente se apagaran, para una vez que pase el evento, exploten por la energía repentina que regresa a ellas o esta simplemente no regrese, ¿significa que los humanos ya no podremos usar la mayoría de la tecnología? –preguntaba Saya dentro de su carpa de dormir.

- … ¿las pistolas serán inútiles? –pregunto Takashi.

- … no, no son armas basadas en energía, si alguien dispara durante el evento, la bala caerá, debido a la perdida de toda clase de energía, incluyendo la cinética, pero una vez que el evento pase, y tu acciones los mecanismos, estos aun producirán energía cinética… …. Eso incluye a humanos, durante un segundo, tal vez perdamos fuerza, pero luego podremos usarla –contesto Saya.

- Exacto, así mismo, la energía se puede volver a usar, pero dado que su naturaleza será distinta, controlarla de la misma manera o con los mismos aparatos que hasta ahora, será mucho más complicado, a menos claro, que tengas suficiente capacidad para manejar energía espiritual… sin embargo, el mayor problema es la forma simple en que se usa esa energía y las limitaciones, claro, eso a mi manera de ver, pues a mi parecer, nada será más útil y poderoso, que lo que podamos usar con nuestro propia capacidad y fuerza –comento Takashi.

- …. Veo –dijo Saya, luego miro al chico y pregunto– ¿Qué me estas ocultando?, ¿Por qué es que hasta yo, me acabo de enterar de la naturaleza de los temblores?

- …. Solo te oculto lo que no sé cómo explicar, mientras hay cosas que tienes que experimentar, para poder comprender –comento Takashi.

Desde el primer momento que se prepararon para dejar la mansión Takagi, habían traído varias cosas, entre ellas, algunas carpas y bolsas de dormir.

Gracias a la espiritualidad, todos tenían fuerza de sobra para cargar una gran cantidad de peso, sin mermar resistencia, o que se convirtiera en un obstáculo.

Las carpas que trajeron, eran simples y no muy estorbosas, pero lo suficientemente grandes, para acomodar entre cinco y diez personas.

De esta manera, podían moverse dentro de ellas, de manera muy natural.

Takashi, que estaba sentando en el suelo, sobre una cobija, se estiro un poco y jalo a Saya, hacia él, la cual había estado de pie.

Luego la puso en su regazo, y la abrazo con fuerza, para luego acercarse y besarla con mucha pasión, metiendo su lengua y sorbiendo un poco de su sabor.

- ¿Estás molesta? –pregunto Takashi una vez que se separo de sus labios, pero la niña no contesto– aunque como cualquier hombre tengo esa fantasía, en realidad no es muy fuerte, pues me gusta disfrutar adecuadamente de mis mujeres, así que no te preocupes, nunca te haría hacer algo que no quieres, la única razón para tenerlas a las tres durmiendo conmigo, es para que todas obtengan el mayor beneficio, ya que para mí, ustedes tres son lo más importante que tengo en la vida.

- …. Lo sé –contesto Saya con una cara aun algo osca– no es eso lo que me molesta… hace dos noches estuviste con Saeko, y durante la tarde, pasas mucho tiempo con ella, mientras que ayer dormiste con Yuuki… … no hemos estado juntos desde que abandonamos la mansión.

- ¡Oh! –exclamo el chico como si recibiera una epifanía, dado que después de abandonar la mansión, el viaje fue muy rápido, luego ocurrió el Destello Primario, seguido de la muerte de Soichiro, Takashi ciertamente no había estado con Saya de forma intima desde hace varios días, mientras que paso dos noches con Saeko, aunque en una de ellas, debido a su situación, no sucedió nada.

Acercándose a Saya, empezó a besarla, haciendo que esta se recostara sobre la cobija y poniendo su peso sobre ella.

Luego comenzó a juguetear con su lengua, así como a acariciar sus pechos y piernas, mientras una erección naciente, se empezaba a frotar contra la zona intima de la niña.

- … ….. idiota… ahora no… es el momento –dijo Saya, con la respiración algo entrecortada, mientras volteaba la cabeza.

- Pero no se dé que otra forma demostrarte, que yo también deseo mucho estar contigo –respondió Takashi con una cara inocente, pero con ojos ardiendo de lujuria.

- … –logrando separarse del chico, Saya se paro, y se fue hacia la entrada de la carpa– … yo no dije que quisiera estar contigo… de todos modos, ya lo entendí, y esta noche es un no.

Después de decir esas palabras, salio con la cara roja, mientras Takashi hizo una sonrisa muy feliz.

Quizá su vida se estaba volviendo monótona, en algún tipo diferente de sentido, a la de antes del apocalipsis, pero para él, pelear con monstruos y luego hacerle el amor a hermosas mujeres, a las cuales quiere mucho, es un tipo de perfección en su vida, no solo eran tres tipos de sabores diferentes y muy deliciosos, con sus propias características y peculiaridades, sino que no podía pensar en saciarse nunca de ellas.

Mientras que los monstruos, siempre cambiarían y se volverían más fuertes, el solo tenía que luchar, para conservar lo que había ganado.

… … …

Cerca de las cinco de la madrugada, del día siguiente, todos sintieron una leve sacudida, pero esta fue muy debil y apenas duro más de un minuto.

Durante ese momento, Takashi sintió, solo por un instante, una debilidad y también una especie de sensación fresca, que se extendía por su cuerpo.

Luego, giro la cabeza hacia donde dormían los otros, con sus ojos iluminándose, lo que le permitió ver como la naturaleza de cada persona, se fortalecía.

Era como ver una imagen que se hacía más clara, pues su energía, se cernía más sobre la realidad.

Cuando llego la mañana, no había cielo nublado o grisáceo, y por supuesto, no había luz solar, que iluminara el mundo con colores vivos.

Solo se encontraba un cielo rojo, que daba una sensación opaca al mundo, y hacia que las personas sintieran como si apenas pudieran respirar, mientras sus cuerpos pesaban más.

Así es como el cielo rojo, se reflejaba sobre el mundo, dando una imagen de desolación, con su color, que a pesar de que daba luz, se sentía como si careciera de esta, por su opaques y melancolía, incluso la noche más oscura, seria mas anhelada y menos temida.