Para todos aquellos que, como Alwen, están en un viaje de autodescubrimiento, enfrentando sus miedos más profundos y las sombras de sus propias inseguridades.
Que esta historia sea un refugio, un susurro de consuelo entre páginas, un alivio silencioso en medio del caos.
La verdadera lucha no siempre ocurre afuera. A veces se libra dentro, entre el odio y el amor.
Amarse a uno mismo se vuelve necesario. Kaelan lo entendió al aceptar su oscuridad, no para destruir, sino para proteger lo que amaba.