Hoy nos vamos a dedicar a tratar un tema susceptible de generar mucha literatura y mucha ficción en torno a él, principalmente por el proceso de creación de una mitificación basada en el miedo. Nos referimos a los piratas.
El término pirata fue usado con anterioridad como actos puntuales de amotinados y saqueadores y no solo referente al mar. Cuando esto era así aún no existían piratas en el concepto que más tarde se implantó. Como suele suceder en todas las épocas, una voz aplicada para denominar a un determinado colectivo, sobre la base de un determinado hecho, se acaba generalizando a un rango mayor y menos específico y aplicando a todo saqueador en general, y más específicamente a los saqueadores del mar (toda vez que existían múltiples voces para designar a los «saqueadores de tierra»). Al hablar de piratas, resulta más propio desde un punto de vista histórico hablar más de navíos que de barcos. No obstante, a fecha de hoy usamos ambiguamente barco como sinónimo de casi cualquier embarcación.
Este término califica a las acciones llevadas a cabo por personas en embarcaciones y, desde mediados del siglo XX, en aviones, para retener por la fuerza a las tripulaciones y pasajeros, así como a los propios transportes. Esta definición es dada por organismos como la ONU, la Real Academia Española, o autores altamente reconocidos...
Históricamente hablando, las zonas de mayor actividad de los piratas coincidían con las de mayor tráfico de mercancías y de personas. Las primeras referencias históricas sobre la piratería datan del siglo V a. C., en la llamada Costa de los piratas, en el Golfo Pérsico. Otras zonas afectadas fueron el mar Mediterráneo y el mar de la China Meridional.
Aunque los datos no son muy abundantes, en Grecia y Egipto por medio de los mitos sabemos fueron buenos piratas. Uno de los más famosos fue Jasón, quien guio a los Argonautas hasta La Cólquida en busca del Vellocino de oro, lo que, aunque no entre en la definición española de piratería, para algunos es, sin ningún género de dudas, un acto de piratería (personas que vienen por mar para robar).
También Ulises u Odiseo, según las traducciones griega o latina, realizó varios actos de piratería en su regreso a Ítaca, como narra Homero en la Odisea.
Los piratas son, en muchas ocasiones, considerados héroes nacionales en sus países, pese a practicar lo que en tierra se llamaría robo y secuestro...
Uno de los piratas griegos más famosos de los que sí se tienen referencias fue Policrates de Samos, quien en el siglo VI a. C. saqueó toda Asia Menor en diferentes expediciones y llegó a reunir más de 100 barcos.[6]
También los egipcios consideraban piratas a los Pueblos del Mar porque su principal expedición invasiva se dio por vía marítima y con la finalidad de efectuar saqueos.
Lo que respecta a Roma; En la época final de la República, los piratas en el Mediterráneo llegaron a convertirse en un peligro, desde sus bases primero al sur de Asia Menor en las montañosas costas de Cilicia y más tarde por todo el Mediterráneo, puesto que impedían el comercio e interrumpían las líneas de suministro de Roma.
Y así Podría nombrar muchas otras situaciones a lo largo de la Historia, hasta hoy día, donde el termino pirata es comúnmente usado, y no específicamente para quienes van en un navío...