- Esperen olvide algo en la recepción del hospital- les digo a mis hermanas.
- ¿Queeeeee? ¡lo que quieres es ir a ver a papi nuevamente! - se queja Anna.
- Dudo que me dejen entrar a verlo. Ya es muy tarde y las enfermeras son muy quisquillosas- respondo.
- Hmmm…. No demores Maki- dice Antonia.
- Si lo sé, espérenme en el restaurante familiar que ahí en la próxima esquina, no creo que demore más de 15 minutos en ir y volver- les digo a mis hermanas.
- No se preocupe por nada joven ama Mackenzie, yo cuidare a sus hermanas- exclama Astrea con clásica cara de póker. Cosa que me molesta bastante.
- Lo que sea….
Me regreso corriendo hacia el "hospital"
Pero lo que realmente hice fue ir unas calles más abajo y esconderme en un callejón, ya no podía soportarlo, esto me va a matar….
Maki estaba totalmente poseída por su egoísmo, la presión que ejerce dicho estado es demasiado alto para su cuerpo, apenas puede ocultar el cambio en sus ojos, internamente su cuerpo estaba hirviendo. Eso no era lo único que le molestaba, lo que más le molestaba era ver que su tía seguía fuera de su alcance. Con cada cosa que ella mejoraba, veía que su tía se transformaba en un muro más alto, fuera en su habilidad de combate, su inteligencia y ahora que sabía que su tía Velvet tenía control total de su egoísmo mientras que ella lo tenía descontrolado a niveles peligrosos hacía que Maki se sintiera inferior. Ese sentimiento de inferioridad la molestaba bastante. No encontraba forma "humana" posible para alcanzarla.
Para empeorar las cosas.
Ella sabía que una de las guardianas de su tía la seguía.
- ¿Vas a seguir escondida? - pregunto molesta.
No hubo respuesta alguna.
- ¿Qué quieres? ¿vas a contarle a tía Velvet? Me importa un comino si le dices. Pero supongo que solo eres una molestia para ella.
A los pocos segundos Salah aparece en el callejón.
Cielos eso si la pico. Pienso mientras me rio internamente.
- Por orden del emperador se me asigno la protección de mi ama Velvet- responde ella- de lo cual estoy muy orgullosa.
- ¡JA! ¿en qué tipo de ridícula ilusión vives? ella no necesita que la protejan y dudo que las necesite, es más ni les habla.
Eso molesta a la guardiana.
- Por favor joven ama, no diga esas palabras.
- Me da igual, a tía Velvet solo le importa la opinión de Verónica o Astrea, lo que ustedes digan o hagan como guardianas le importa una mierda.
- …. He de reconocer que usted es….- Salah se contiene- terrible señorita Mackenzie- responde con fastidio Salah.
- Así que eso piensas de mi- respondo en burla- de hecho, no te equivocas, mamá me crio para que fuera así.
- Entonces se equivocó demasiado en su forma de criarla, que bueno que ahora la ama se encarga de su crianza- comenta Salah.
Me rio un momento luego respondo:
- A mamá la crio de la misma manera tía Velvet, la misma persona que tanto amas y que te desprecia profundamente- le digo mientras me apoyo contra el muro del callejón- por si fuera poco, soy el vivo reflejo de tía Velvet, ¿acaso no sabes como era tía Velvet cuando estaba vivía en Liare junto a mi madre?
La guardiana lanza un "shc" al escucharme, entonces prosigo.
- Me encanta ver como mendigan su atención, esa misma atención que mis hermanas con solo decir "tía necesitamos tal cosa" ella va inmediatamente junto a ellas o envía a Astrea para ello, mientras sigue hablando con Verónica y tu junto a tu compañera al margen como siempre. Enserio ¿Qué esperan? ¿a qué tía Velvet les diga que la acompañen a su cama? ¿Qué les diga te amo? tía Velvet solo amo a mamá y a nadie más.
Salah sale del callejón, entonces de manera muy educada le dice a Maki:
- Me gustaría acompañarla a su entrenamiento mañana joven ama Mackenzie- exclama la guardiana imperial con suma caballerosidad.
Miro a la guardiana directamente a los ojos. Ella intenta ocultar su molestia, sabe que estoy en estado de egoísmo, todo lo que diga ahora es cierto.
- Que así sea, mañana me acompañaras en la noche.
- Si joven ama.
- Ah, por cierto, si vuelven a hablar de mi padre como si fuera un objeto sexual para ustedes, juro que les arranco la lengua- le digo molesta.
La guardiana imperial con suma cortesía responde:
- Solo la ama Velvet me puede ordenar hacer tal cosa- responde desafiante Salah- y por cierto joven ama, aunque su padre lo niegue se puede ver en sus ojos que el ama a Astrea.
- Hija de-
La guardiana desaparece.
Me dio la estocada final….
Me golpea donde más me duele.
Voy al restaurante donde me encuentro con mis hermanas y Astrea.
Mis dos hermanas felices charlando entre ellas o picándole la lengua a Astrea, quien no sabe cómo responder.
Debo ser sincera en algo y es en que no soporto a Astrea esa jodida bruja solapada, es algo que viene en mí. No sé cómo describirlo, pero esa chica rara, no sería capaz de ver a papá enredarse con ella, tiene ese algo que no puedo soportar. Mentira, se lo que sucede…. Odio ese favoritismo de tía Velvet frente a esa chica, la trata mejor que a nosotras. Detesto eso, detesto que se haga la santa frente a papá, me molesta su poca comunicación esa falta de expresiones. No puedo soportarla.
Lo que más me duele es que….
Salah tiene algo de razón….
Papá siempre ha visto a Astrea de otro modo fuera de amigos, él la ha rechazado no porque no le guste, sino porque el siente que no le da la talla….
¡COMO MIERDAS PAPÁ PUEDE PENSAR SEMEJANTE MIERDA! Aunque recapitulando los recuerdos de mamá estoy segura de que… papá nunca tuvo experiencia real frente a una relación. Ya que fue mamá quien hizo todo el trabajo. Papá solo estuvo allí y ya, todo se movió gracias a mamá.
Lo que me hace preguntarme. ¿Cómo es la novia de papá? Si hizo que papá realmente se decidiera es porque debe… ser… muy importante para él.
Mientras mis hermanas comen y charlan entre ellas observo por la ventana la oscura noche de la capital. Pensativa sobre como debo comportarme cuando vea a aquella mujer que le robo el corazón a mi padre.