Capítulo 47
POV INFRAMUNDO:
La noticia de la caída de Zeus y sus hermanos del poder del Olimpo fue una noticia impactante en todo el mundo sobrenatural.
Pero cuando todos pensaban que la facción se debilitaría, eso no ocurrió. La facción se recuperó con el mando de Orcus, Apolo y Hermes.
Ellos empezaron a buscar una alianza con otras facciones, una de ellas, la facción del diablo. Facción la cual era dirigida por las cuatro Maous.
—Entonces Siena-chan....¿Eso fue todo lo que hizo Orión durante su estancia allí?.—Pregunto Serafall Leviathan, una de las cuatro Maous.
—Asi es.—Respondió con un suspiro cansado Siena Lucifer, la Maou carmesí que era amiga de Serafall.
—Pensar que Orión derrocarla a Zeus y a sus hermanos y tomaría posesión de un arma de semajante calibre. Eso sin contar que sobrevivió al Tártaro.—Terminó de hablar la Maou Lucifer mientras su amiga, reina y <
—Orión no deja de hacerse más fuerte, según Orcus, está al inicio de la clase Apocalipsis. Es increíble que haya superado la clase Dios.—Dijo Grayfia mientras procedía a sentarse con las dos Maou.
—Pues tienes razón....Un dios demonio, un Lucifer, clase apocalipsis y portador de un Longinus antiguo.....La Espada del Cataclismo. Tifón.—Dijo Siena mientras terminaba su bebida.
—Si lo dices así lo haces sonar como a un villano Siena-chan.—sonrió de forma irónica la Maou mágica generando sutiles risas en las otras dos mujeres.
—¿Y a donde creen que Orión se dirigirá ahora?.—Pregunto Serafall.
—La verdad que no lo sé. Supongo que habrá que esperar las noticias sobre futuras locuras que cometa nuestro futuro esposo. ¿No?.—Dijo Siena.
Las tres mujeres asintieron ante las palabras de su <
FIN INFRAMUNDO POV
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Estaba en medio de mi travesía saliendo de Grecia, pero me retrasé debido a que el cielo se oscureció y empezó a tronar y llover sin motivo alguno.
Gracias a mi control sobre el agua, no terminé empapado, la cuestión era que no tenía dónde resguardarme ya que estaba en medio del mar, más específicamente entre Grecia y Turquía.
Así que todo lo que había era agua....agua y más agua, ni una sola mujer, ni un sola embarcación, absolutamente nada.
—Woof.—Cleo también parecía estar aburrida de ver solamente agua, así que hizo sentir su molestia.
—Sé que ver solo agua es algo cansado Cleo, pero estamos en medio de una tormenta en medio del mar y.....—No pude terminar de hablar ya que un enorme trueno cayó en nuestra posición.
Al abrir mis ojos pude ver que aún tenía a Cleo en brazos, pero ya no había mar y ni lluvia.
¿Ahora dónde estamos?.
El nuevo lugar estaba cubierto de nubes negras y el cielo no dejaba de producir enormes truenos de color azul. Lo curioso era que me podía para sobre las nubes, algo que no esperaba.
Pero mientras analizaba el entorno, junto a los truenos, los gritos de un animal resonaron junto con los truenos. El sonido era muy similar al que emitia las aves de caza como las águilas.
Fue entonces que pudimos ver una enorme silueta estampada contra una nube cuando un trueno apareció.
Sin previo aviso, enormes rayos cayeron a posición. Al ver esto, sujeté a Cleo y salí de la nube dónde estaba parado. La nube al ser impactada por los rayos se destruyó por completo.
Al levantar la mirada lo pudimos ver. Una enorme ave con tonalidades azules, celestes y blancas. La criatura se tenía cuatro alas con las cuales se mantenía en vuelo.
Sus patas tenían cuatro enormes y afiladas garras en cada una de ellas, su pico puntiagudo y sus ojos azules, sumado a los truenos que aparecían alrededor de ella la hacían ver imponente.
[Aviso anfitrión: La criatura se encuentra a inicios de la clase Apocalipsis, se recomienda no bajar la guardia frente a ella]
Al escuchar la notificación de System mire a Cleo, quien empezó a gruñir de forma amenazante a la colosal ave que teníamos frente a nosotros.
—Cleo, crees que puedas crear una barrera y controlar el poder de ambos.—Le pregunté esto ya que no sabía si estábamos en un sitio similar a la prisión donde luché contra Cleo.
—Woof.—Cleo asintió y de inmediato salió de mis brazos y empezó a transformarse a su forma auténtica, lo cual pareció enojar al ave.
System, ¿Hay alguna forma de domar al ave?.
Pregunté ya que si pude domesticar a Cleo, y ella era un clase apocalipsis baja al igual que al ve frente a mí, pensé que si debía haber alguna manera o algún requisito para hacerlo.
[Si la hay anfitrión, solo debe luchar con ella y derrotarla al igual que lo hizo con su Cerbero]
—Bueno, supongo que aquí vamos de nuevo.—Dije mientras sacaba a Tifón de la Puerta de Babilonia.—Balance Breaker.
La explosión de poder fue aún mayor que cuando luché contra Chronos, pero el ave logro contrarrestar mi poder usando el suyo.
Al ver esto, Cleo de inmediato materializó una barrera, la cual resistió el choque de ambos poderes.
—Bien, serás quien me ayude a dominar mi Ancient Longinus, ya que ni Chronos ni el Hecatónquiro me permitieron usarlo por mucho tiempo.
Mis palabras hicieron que el ave se enfurezca, bueno puedo entenderlo ya que a nadie le gustaría ser el sujeto de pruebas de otra persona.
Y así de un momento a otro, tanto el ave como yo empezamos a intercambiar golpes, ajenos a que pese a tener la barrera, en el mundo normal se estaba llevando a cabo una brutal tormenta que ocurría alrededor de todo el mundo.
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POV CLERIA:
—Se recomienda a toda la población de mantenerse en la seguridad de sus casas. El gobierno japonés ha dispuesto una alerta de seguridad de nivel máximo. Sin duda alguna está la peor tormenta que ha golpeado el mundo.—Fueron las palabras de una de las periodistas en noticiero del día.
—Ha....esto es raro, nunca antes había ocurrido una tormenta de semejante magnitud.—Dije mientras apagaba el televisor en la mansión.
—Esto es obviamente algo que va más allá de lo sobrenatural, lo único que se me ocurre es.....ser de clase apocalipsis.—Comentó Ddraig mientras nos miraba de forma seria.
—¿Clase apocalipsis?.—Pregunto Elsha.
—Asi es, según escuché hace tiempo, los clase apocalipsis son monstruos o seres que pueden hacer temblar el planeta con su poder o en su defecto, producir este tipo de fenómenos a nivel global.—Contestó Ddraig.
—Pero yo solo sé de un clase apocalipsis. Uno de los dioses dragón. Trihexia, el Dios Dragón del Apocalipsis. Un Dragón que fue sellado en la antigüedad por el Dios Bíblico con ayuda de otros seres.—Lo dicho por Ddraig me dejó sin palabras, en serio en este mundo existen seres de ese nivel de poder.
—¿Entonces, esto es obra de Trihexia?.—Dijo Elsha.
—No lo sé, Elsha.—Contestó Ddraig mientras negaba con la cabeza.
Yo miré por la ventana y por solo una fracción de segundos, me pareció ver la silueta de un joven y un enorme ave en el cielo.
En ese momento sentí una presión en el pecho, no se por qué, pero me vino a la mente el nombre y la imagen de un chico al cual conocía muy bien.
Inconscientemente mi mano derecha bajo a mi vientre, a la zona donde tenia lo que daba sentido y color a mi vida.....su marca.
La marca que indicaba que le pertenecía completamente, la marca que indicaba que solo él podría tenerme, la marca que indicaba que volvería a mí...—Orión.—Susurre su nombre recordando todo el tiempo que pasamos juntos.
—Asi que también lo sentiste ¿Eh?.—Dijo Elsha mientras ponía una mano en mi hombro y Ddraig me daba una sonrisa reconfortante.
—Tenemos que confiar en él y esperarlo, ya que al igual que tú, siento que todo esto tiene que ver con él.—Dijo Elsha.—Tienes razón.—Dije mientras daba un último vistazo al tormentoso y oscuro cielo.
FIN CLERIA POV
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El Thunderbird. Una criatura de clase apocalipsis baja similar al Cazador de Almas, Cerbero. Según muchos textos Olímpicos antiguos, se decía que dicha criatura fue la que le concedió y enseñó el poder del rayo a Zeus.
Pero el dios al obtener dicho poder, se volvió tan arrogante que descuido la única condición que le impuso la legendaria ave para entrenarlo.
Nunca usar su poder para el mal.
El dios rompió dicha condición al usar su poder para amenazar a las mujeres y abusar de ellas o para simplemente matar a los esposos de aquellas mujeres con las cuales quería acostarse.
El ave al ver este comportamiento desapareció sin dejar rastro alguno, dejando al dios con el conocimiento superficial del poder del trueno divino.