Capítulo 30 Calidez

Narra Ailie

+Después de la comida y de limpiar todo los chicos propusieron ver una película.

>¡Quiero ver una de terror!

¬¡No, que sea una de acción!

>¡Catalina!

~Basta chicos, podemos ver las dos.

¬¡¿En serio podemos?!

~Sí, mañana no trabajo así que está bien.

>¡¿Nos podemos quedar a dormir?!

~Si, pero se comportan.

¬Quiero la habitación grande.

>¡No, yo la quiero!

+Para estos chicos les es difícil ponerse de acuerdo para cualquier cosa, ¿así serán siempre?

~No, eso lo determino yo.

>¡Alec!

~Siempre me hacen lo mismo, una habitación es una habitación, si no pueden arreglarlo entre ustedes en 10 minutos, las habitaciones las asignare yo.

+Los chicos hicieron berrinche pero Alec no se retractó, luego centró su atención en mi.

~¿Quieres quedarte en la silla o pasarte al sillón para ver la película?

+Agradezco la invitación pero no podré acompañarlos.

¬¡¿Qué?!

>¡¿Por qué no?!

+Los chicos me escucharon y replicaron de nuevo.

~¿Por qué no?

+Aún tengo trabajo pendiente.

~¿Cuánto tiempo tardarás?

+Entre 40 minutos a una hora.

¬Pues lo esperamos, termine sus pendientes y regresé.

>Si, lo esperamos, ¿qué dice?

+¿Esperarme?, ¿por qué harían algo así por mi?, ¿acaso esto es algo normal entre ellos?, ¿que ganarían ellos esperándome? -¿por qué ustedes querrían hacer algo así cuando pueden hacerlo sin mi?-.

¬¿Ah?, ¿por qué lo haríamos sin usted?, queremos ver la película juntos y usted forma parte, eso debería ser suficiente ¿no?.

+Vaya respuesta, ¿eso significa que es porqué quieren que este con ellos? -bueno, supongo-.

¬Pues entonces ya no lo molestamos, entre más rápido termine más rápido podremos ver las películas, Alec, ¿puede trabajar en tu estudio no?

~Si, es más cómodo ahí que en la habitación supongo.

>¡No se diga más, vámonos!

+¡E-espera Michael! -para ser un omega recesivo tiene mucha fuerza y energía, Michael me llevó a toda prisa al estudio de Alec el cual tenía su estilo por todo lados, elegante pero cálido, Michael rápidamente me dejó frente al escritorio-.

>¡Bien!, ¿qué más necesita?.

+Pues…mi computadora -Michael salió corriendo en dirección a la habitación-.

>¡Aquí está!, ¡¿qué más?!

+Mi teléfono -volvió a salir corriendo-.

>¡Tome!, ¡¿algo más?!

+¿Puedes llamar al señor Rodrigo?

>¡Voy!

+Volvió a salir corriendo y luego solo podía escuchar que alguien se acercaba de manera apresurada.

>¡Aquí lo tiene!, ¡¿algo más?!

+No, ya no, gracias.

>Bien, entonces a trabajar, nosotros ayudaremos a Alec a preparar las cosas.

+Michael salió corriendo y Rodrigo solo se quedó desconcertado.

° Eso fue extraño.

+Ya lo creo.

° ¿Y bien señor?, ¿qué necesita?

+Necesito por favor que vayas a la empresa y me traigas los papeles del proyecto U******la, hay cosas que se tienen que corregir del contrato y tengo que enviarlos de regreso, mientras yo reviso los reportes de gastos de M*******se.

° Ya regreso señor.

+Gracias.

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-Después de 30 minutos-

+Estaba por terminar, ya solo esperaba a Rodrigo con los papeles, haría las correcciones y lo entregaría, estaba dando revisiones finales cuando alguien tocó la puerta.

-toc, toc-.

+Adelante -y por la puerta entró Alec-.

~¿Cómo vas?

+Ya casi termino, solo faltan unas cosas que le pedí a Rodrigo que me trajera.

~¿Quieres algo de tomar?

+¿Tienes té?

~Sí, tengo Darjeeling y Earl Grey.

+Earl Grey.

~Ya regreso.

+Alec salió del estudio cuando escuché que la puerta principal se abrió y enseguida unos pasos apresurados.

° Señor, perdone la tardanza, había un tráfico horrible.

+Está bien, acabo de terminar con los demás pendientes.

° Aquí tiene los documentos señor.

+Bien -Rodrigo me entregó el sobre con los documentos y unos momentos después entró Alec con una pequeña charola y esperó de pie un momento-.

° Con permiso señor, me retiro.

+Gracias Rodrigo -apenas se fue Rodrigo, Alec se acercó-.

~Aquí tienes el té.

+Gracias -en la mesa Alec dejó con delicadeza una pequeña charola plateada que tenía una taza pequeña y una tetera, ambas de cristal, eran preciosas y luego procedió a servirme un poco de té, la manera en como lo hacía era tan propia y elegante-.

~No sabía si lo prefieres solo o con azúcar así que traje un poco.

+Lo tomo solo un poco dulce, gracias.

~Descuida, ¿hay algo más en lo que pueda ayudarte?

+No, muchas gracias, en cuanto termine voy con ustedes.

~¿Necesitas ayuda?

+No, esta vez voy yo solo.

~De acuerdo, entonces te esperamos, me retiro.

+Adiós -y de nuevo me quede en el estudio de Alec, estar aquí es reconfortante, aunque estoy solo me siento tranquilo, este lugar se siente con una energía diferente, me da paz y me hace sentir acompañado, es la misma sensación que tuve aquel día en su cumpleaños cuando conocí a sus padres, quisiera quedarme aquí…-.

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Narr Alec

~Salí del estudio para dejar que Ailie terminará su trabajo, ya casi no había nada que hacer así que le propuse a los chicos hacer palomitas los cuales aceptaron encantados.

>Alec, ¿él señor Ailie ya va a terminar?

~Si, ya casi, esperemos un poco más, ¿ quieren palomitas saladas o con azúcar?

¬¡Azúcar!

~Bien -saqué el maíz y me dispuse a preparar las palomitas cuando el señor Rodrigo habló-.

° ¿Les parece si voy por una pizza?

>¡Si, con muchos champiñones!

° Entonces ya regreso.

~Gracias.

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~Pasaron cerca de 20 minutos cuando el señor Rodrigo regresó.

° Perdonen la tardanza.

¬No se disculpe señor Rodrigo, de hecho no tardó casi nada.

° Traje dos, pizzas, pensé que no alcanzaría con una.

>¡Genial!

~Lo olvidé, ¿entonces quién se va a quedar en qué cuarto? -los chicos se miraron entre sí y luego Catalina me respondió-.

¬Bueno, Michael se puede quedar en la grande.

>¡Si, gracias!

~Bien, entonces la próxima vez a Catalina le toca la grande.

>Está bien.

~Bueno, ayúdenme a poner las cosas para ver las películas, ¿ya tienen cuales vamos a ver?

¬¡Si!

~Michael y Catalina se apresuraron a poner todo, fui por los vasos para la bebidas, las puse sobre en una pequeña mesa de centro cuando vi que Ailie venía hacia nosotros.

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Narra Ailie

+Termine las correcciones y por primera vez agradecí ya no tener trabajo, así que me apresure y salí del despacho de Alec y vi como estaban ordenando la sala, así que me acerqué con cuidado.

~Ailie.

+Hola, perdonen la tardanza, he terminado mi trabajo.

~Bien, solo faltan algunos detalles para empezar.

+En ese momento vi algo muy extraño, la sala de Alec era extraña, separó los sillones para que pudiera estar entre ellos y no en una orilla.

~Ven.

+Yo no me movía, esto es…

~¿Necesitas ayuda?

+No, lo siento, yo puedo solo, gracias -avance con la silla y quedé en un pequeño espacio que había sido especial y solo para mi-.

~Bien, pues ya que estamos todos hay que acomodarnos.

+Y entonces todos se sentaron Alec puso las películas y finalmente comenzamos a verlas en compañía de palomitas, pizza y un poco de té que Alec guardó y calentó para mi.

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-Después de las películas-

¬¡Estuvo genial!

>¡Y lo mejor es que podremos desayunar pizza!

~Bien chicos, ahora ayúdenme a recoger todo, no podemos dejar así la sala.

+Michael y Catalina ayudaron al igual que Rodrigo -¿puedo ayudar yo también?-.

~Por supuesto, ¿te gustaría ayudar a secar los trastes?

+Sí.

¬Venga, ¿puedo ayudarlo?

+Si, gracias -Michael hace unas horas me tomó como si fuera un carrito de carreras, ¿que puede ser tan malo?-.

¬Bien, vamos.

+Alec y Rodrigo se ocuparon de tirar la basura y guardar la comida mientras que Michael se adelantó al fregadero y Catalina me llevó delicada y lentamente dejándome a su lado-.

¬Bien, Michael enjabona, yo enjuago, usted seca y cómoda a una lado, ¿está bien?

+Es perfecto.

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-Después de terminar de organizar y guardar todo-

+Toda la sala regresó a estar en orden cuando Alec hizo una sugerencia imprevista.

~Bien, terminamos, son casi las 10 de la noche, ¿quieren salir a pasear un rato?

>¡Si, vamos!

¬¡!

+¿Pasear?, ¿cómo voy a hacerlo?

~Ailie, ¿no quieres venir?

+No se cual fue mi expresión porque de inmediato Alec pregunto si no quería ir -no es eso, es que…¿cómo se supone que voy a hacerlo?-.

>No se preocupe, ¿o es que no quiere ir en la silla?

+No quiero ser una carga.

¬¿Qué cosas dice?, para nada, a no ser que a usted le moleste ir con nosotros.

+¡Claro que no! -en ese momento levanté la voz a lo que todos se sorprendieron por un momento-.

¬En ese caso vámonos.

° Déjeme ayudarle señor.

+Entonces salimos del apartamento todos juntos.

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-Después de 30 minutos de caminata-

+Este tiempo fue muy agradable, no había mucha gente en la calles y la noche era fresca caminamos lentamente teniendo un conversación casual sobre las películas finalmente regresamos y Alec mando a los chicos a descansar.

~Bien chicos, a dormir.

¬Si, estoy muy cansada.

>Yo también, buenas noches.

+Los chicos se despidieron y se fueron a sus habitaciones, he de admitir que el departamento de Alec es muy grande para un soltero, aunque ¿de qué me quejo?, mi casa es aún más grande y no hay nadie que ocupe las habitaciones, es una pérdida de tiempo y dinero.

~Rodrigo, ¿quiere pasar aquí la noche?

+Esa pregunta me tomó por sorpresa.

° ¡Ohh no señor Alec!, agradezco la invitación pero tengo a mi esposo que me espera.

~¿Es casado?

° Así es, agradezco la bella tarde pero tengo que retirarme, no avise que me quedaría afuera así que voy que regresar.

~Regrese con cuidado.

° Muchas gracias, igualmente, descanse señor, llame si necesita cualquier cosa.

+Si Rodrigo, muchas gracias.

° Con permiso.

+Rodrigo salió y nos quedamos Alec y yo solos en la sala pues Michael y Catalina ya estaban en sus habitaciones, el silencio era un poco incómodo sin embargo recordé que tenia que decirle algo importante a Alec, ¿será que podre irme y él estará dispuesto a esperarme?.....se que dije que se lo diría hoy, pero no me siento listo, tal vez debería decirle luego, no creo que sea malo si lo pospongo un poco, ¿o sí?, bueno aún falta tiempo, todo estará bien si se lo digo luego...si, luego.