Mi Otra Yo

"Aviso de peligro: La Pelimorada de este mundo conoce tu presencia. Fuente:

Noticias. Recomendación: Evitar contacto directo."

//"Eh." La máscara en su rostro paso por diferentes estados. 

El líder, Laurence, se encontraba revisando algunos papeles en su escritorio.

//"¿Qué sucede ahora, Ami?" —preguntó, levantándose.

Ami no necesitó escribir nada. La ventana de advertencia seguía frente a ambos, suficiente para que leyera el mensaje.

//"Puede ser… ¿Tu otra versión en este mundo?, debemos evitar cualquier contacto con ella. Ya sabes lo que dicen de los encuentros con uno mismo. Es como en los viajes en el tiempo. Podría pasar algo."

Toco la ventana de peligro y se desplegó información adicional.

Pelimorada - Residencia: Los Ángeles, Estados Unidos. Vive con su padre.

Las palabras aparecieron en la pantalla a la par que ella las escribía:

//"¡En este mundo vivo con mi papá!"

La emoción de saber que en este mundo tenía un padre biológico que no estaba ausente. "Uhm" la chispa de felicidad fue apagada por un torrente de pensamientos intrusivos.

"¿Qué hay de mis padres adoptivos? ¿Qué dirían si supieran que estoy pensando en conocerlo? ¿Es esto una traición?"*

El rostro detrás de la máscara se contrajo de culpa. Una pequeña pantalla interna en su interfaz reflejó los registros de su vida anterior: los abrazos de su madre adoptiva, la forma en que su padre le enseño andar en bicicleta, los primeros recuerdos con su hermano menor.

//"¿Ves? Por eso no la encontrábamos. Estaba fuera del radar todo este tiempo." —Cruzó los brazos, pensativo—. "Ahora tiene sentido, ¿no? Tu padre biológico era estadounidense, eso explicaría su paradero. ¿Y tu madre?"

//"No hay documentación sobre ella. ¿Cómo terminé en México?" Escribió.

Evaluó sus palabras con ese mismo análisis que lleva usado todo el tiempo, en archivos clasificados.

//"El registro de nacimiento indica que naciste, en Puebla, México. Mmmmm, tu pasado siempre ha sido un rompecabezas."

//"Mmmmm"

Quería conocer a esa otra versión de sí misma, esa chica que vivía con un padre biológico que ella apenas recordaba. Por otro, temía lo que eso significaría para sus padres adoptivos, quienes la habían querido y protegido a pesar de todo.

"(Encontré la mitad de una fotografía que llevo toda la vida guardando sin saber que estaba incompleta)."

Revisó la fecha de los registros 

"Fecha: 4 días antes del Día Z."

Esa fecha marcaba el mismo día en que su hermanastro había desaparecido. El día que todo se fue al carajo.

"Laurence, necesito que vayamos a una dirección. La escuela de mi hermano."

//"Dame la dirección. Prepararé el vehículo. —Recogió sus cosas y revisó su reloj—. "Volveremos a casa, soldado."

Ami caminó hacia el estante de armas en la esquina del cuarto. Sus manos se detuvieron sobre una SAX-200 Xiuhcóatl. Lo tomó, apoyandose de la cadera y ambas manos. "(El peso familiar)". 

Al girar hacía él, algo captó su atención en el rabillo del ojo. Ese mismo ente amorfo formado por sombras y manos, apenas invisible a través de su máscara.

Se frotó los ojos debajo de la máscara para despejar su visión y volvió a mirar… no había nada. Solo el brillo del reflejo en el cristal cercano.

//"¿Qué sucede?", preguntó.

Negó con la cabeza.

//"Ami, antes de salir, toma esto." Abrió el estuche con una prótesis biomecánica, diseñada para mejorar la funcionalidad de su mano.

"Sabía que este día llegaría. No estaba listo para verte en combate otra vez."

En cuanto encajó, su cuerpo reaccionó. Ese tipo de sensación, de haberla usado toda la vida.

"Vamos, no hay tiempo que perder."

Siguiendo el GPS que había configurado, pasaron por calles repletas vendedores ambulantes, pero carecía de la majestuosidad que ella recordaba.

"Es tan diferente… tan simple," pensó. La falta de los castillos y el esplendor imperial.

En su mundo, la Ciudad de México había sido la joya de la capital imperial francesa en las Américas. Aquí, solo veía edificios prácticos.

"Tal vez sea la doctrina de este mundo".

Llegaron a su destino justo al timbre de la campana de salida en la Secundaria San Rafael de los Vientos.

El emoji de concentración giraba, y levantó la mano para hacerle una señal: espera.

Airam, su hermanastro perdido, estaba aquí, de eso estaba segura. Pero su mente giraba alrededor de las posibles causas de su desaparición.

Sistema sobreescrito. Level 10

Misión secundaria: Rescate de Airam. Objetivo: Encuentra y salva a tu hermanastro. Recompensa: 100 fragmentos del alma del lucero de la mañana / 50 fragmentos de tela / 25 puntos de habilidad. Lucidez: ###

Presionó el botón de Aceptar misión.

"Ya inició."

Ami puso un pie en el suelo y la luz alrededor de ella cambió. Al alzar abrir de nuevo los ojos su entorno cambio, estaba de regreso en su mundo.

La secundaria frente a ella ya no el mismo edificio. Cambio a un castillo en llamas, de altas torres humeantes y muros de piedra decorados en detalles barrocos. 

Busco a Laurence, pero él no estaba a su lado. Su búsqueda bajó hacia un charco cercano, y ahí estaba él, pero solo como un reflejo en la superficie del agua.

"¡Laurence!", proyectó en la pantalla de su máscara. "Por favor… por favor, te lo suplico, salva a Airam. Él usa una gorra morada con lucecitas."

—Ami… puedo verte, aunque no esté realmente ahí. No te preocupes.

Solo sonreí.

13.1 El Aquelarre de la Semilla Negra

"Hoy no puedo distinguir si son reales o parte de mi cabeza. No importa. Tengo que encontrar a mi hermano". Dijo la pelimorada.

//"No vayas por ahí," susurra una voz desde la sombra más cercana. Sus dedos alargados señalan hacia el patio central. "Es la secta del Aquelarre de la Semilla Negra." La voz suena desde el fondo de un pozo. "Vienen del cosmos. Han venido a expiar tus pecados, Pelimorada."

Le doy un culatazo con mi arma. Cae al suelo sin emitir sonido (mi imaginación) y los seres sombra aplaudieron.

Me abrí paso hasta el centro del jardín. Las figuras encapuchadas formaron un círculo alrededor de algo que no alcanzo a ver. El aire huele a metal y hay algo dulce que me revuelve el estómago.

//"¡Airam!", 'grite', entre comillas. Solo el eco de mi propia desesperación regreso a mí.

//"¡Colega!", dicen. "Debes esconderte. Ellos te están buscando. No debiste volver del limbo."

//"Ahora ese conocimiento te ha condenado," continúa. "Ellos te han engañado para que tomes su lugar y ellos puedan ser libres."

Los seres sombra se agitan a mi alrededor, (perros que han olido algo peligroso). Uno de ellos trata de advertirme, pero su voz es apenas audible bajo el zumbido en mis oídos.

"No te preocupes, yo te ayudaré," dice el encapuchado, extendió su mano, manchadoa de algo oscuro. "En mí puedes confiar."

//"(Mentira)," dice el ser sombra. "(Nadie es confiable aquí.)"

//"Lo que tienes que hacer," continúa el hombre, "es no ir... dice ser dios. Él no es dios, es una entidad corrompida por el poder."

Detrás de él, en la oscuridad del pasillo que lleva a la cafetería, algo se mueve. Algo grande. Escucho algo húmedo, (Masticando). No quiero ver, pero mis ojos se niegan a obedecer. La criatura está devorando a alguien. Por el uniforme escolar, sé que es un estudiante.

//"Ahora ven, ven, ven," insiste el encapuchado, ajeno a mi horror o fingiendo no notarlo. "Vas a despertar y tomar mi mano para fundirnos en un solo ser y salir de este error, que tanto te atormenta..."

Ami mantuvo la respiración estable mientras apuntaba el SAX-200 Xiuhcóatl. Los seres sombra que habían rodeado a la Pelimorada, se desvanecieron.

El primer disparo impactó la capucha del fanático más cercano. La descarga de energía azul dejó un rastro ionizado en el aire.

<+30 puntos>

Los encapuchados actuaron al son de una bandada de pájaros que detecta un depredador.

El segundo disparo derribó a tres ocultistas alineados. Los cuerpos cayeron.

<+90 puntos de combate>

<¡Triple baja! ×3 multiplicador>

El resto de los fanáticos canto en una lengua antigua.

Una figura pequeña apareció junto a ella. //"¡Ujuuuu ujum! ¡Tu querida servidora ha regresado!", canturreó la pequeña figura. "Es tiempo de explicarte..."

//"Oh, esa cosa... ok, ok."

VEN⁂M⁂ proyectó un fragmento de memoria reconstruido.

Vestia el uniforme táctico del Cuerpo de Investigaciones Especiales Antinarcóticos (CIEAN). Descendia de una aeronave con alas rotativas planas de plasma. La bata militar ondeaba a diez centímetros del suelo, sostenía un maletín metálico. 

"Lo reconstruí junto a cierto amiguito," explicó la versión miniatura de Ami.

La cosa en la oscuridad del pasillo emergió a la luz. Era una masa amorfa de carne con múltiples ojos que parpadeaban asincrónicamente. Numerosas manos humanas estaban incrustadas en su superficie, algunas de ellas aún con anillos o relojes en las muñecas.

Apuntó el arma hacia la criatura, pero ⁂VEN⁂M⁂ negó con la cabeza. "Necesitamos el maletín."

La memoria continuó.

Radio: //"Agentes, esta noche comienza el fin del narcotráfico. El golpe en la cuna del poder de los carteles… Hemos sitiado la ciudad a las 0200 horas.

Agente Ami, tenemos ubicado a Alisa alias 0.77 en el sector este de la ciudad. Este sicario ha disuelto a cinco de nuestros agentes en la última semana. Confirmación requerida."

//"Confirmado. Objetivo: Alisa 0.77. Uso de compuestos químicos de origen desconocido para disolver a sus víctimas. Procederé según protocolo estándar de eliminación."

La criatura del pasillo emitió el sonido de cientos de voces gritando simultáneamente. Las manos incrustadas en su superficie aplaudieron.

Una figura encapuchada emergió desde las sombras del pasillo. Se despojó de la túnica. Debajo de ella, trae el traje de combate táctico negro, acompañado del símbolo de un ojo inscrito en un triángulo sobre el pecho. 

//"Minerval Scarioth, al servicio de la Primera Vigilancia."

Extendió ambas manos hacia la criatura. La masa amorfa se cristalizó y la entidad quedó congelada en un bloque de energía azulada traslúcida.

"Intrusión no autorizada en zona de operaciones del Consejo," declaró con voz carente de emoción. "Se requiere eliminación inmediata."

Ami levantó su arma y disparó una ráfaga entera contra el Minerval. Los proyectiles de energía surcaron el aire, Scarioth había desaparecido. Reapareció instantes después detrás de una columna, ya trazaba nuevos símbolos en el aire.

//"¡Cuidado! ¡Está canalizando un Sello Mayor!"

Eyectó el cargador vacío de su SAX-200 Xiuhcóatl y deslizó uno nuevo en su lugar.

Otro movimiento en el extremo opuesto del pasillo interrumpió el sello. Una silueta delgada y oscura se deslizaba por las sombras, siguiendo la dirección por donde el Minerval había desaparecido.

//"Ah, tú..." siseó. "Maldito asesino de segunda..."

Aprovecho la distracción temporal para buscar entre los cuerpos caídos a su hermano. Su ausencia significaba que podría seguir con vida. Siguió el rastro de cadáveres, hacia una de las mesas del laboratorio.

Agachándose, Ami iluminó con la linterna táctica de su arma el espacio debajo del mueble. Allí, abrazada a sus rodillas y temblando, encontró a la maestra de su hermano.

//"Señorita Jiménez... ¿Puede oírme?", pregunto, ajusto su máscara para proyectar su texto.

//"¿A-Ami? ¿Eres tú?, todo pasó tan rápido... un fragmento... un fragmento de la sede espacial cayó en el patio de la escuela durante el recreo..." tragó saliva con dificultad. "Salieron... salieron esas cosas... luego llegaron esos locos religiosos cantando y... y..."

"La sacaré de aquí." Se acercó más, arrodillándose para quedar a la altura de la maestra. "¿Sabe algo sobre mi hermano? ¿Lo ha visto?"

//"Unas chicas extrañas se lo llevaron... hace un día," confesó entre sollozos. "Tenían símbolos en sus ropas.... Me amenazaron... dijeron que si le contaba a alguien irían por mi familia..." La mujer se cubrió el rostro con las manos. "Lo siento tanto, Ami... no le dije nada a las autoridades ni a tu madre... perdóname..."

El sistema de Ami registró la información.

//"No se preocupe, señorita Jiménez. Voy a encontrarlo."

"Es hora de patear trasero alienígenas. Vamos al jardín. ¡Vamos!", dijo el ⁂VEN⁂M⁂

Alrededor de ellas, varios supervivientes que habían permanecido ocultos salieron de sus escondites. En elos, Ami pudo ver algo que no había notado antes: esperanza. La veían como su salvadora.

//"Mierda."

Una figura se incorporó al fondo del pasillo. Era una chica de pelo corto. En su mano izquierda portaba una espada. Sobre su pecho, lucía el símbolo de los Cazadores de Asesinos.

"¿Alguien ha visto a un asesino de segunda?"

//"Se fue por el pasillo principal, perseguía a un Minerval."

La chica asintió y pasó caminando junto a Ami. "Gracias," dijo sin detenerse. "Me encargaré de esas cosas del espacio."

//"Voy contigo."

"Haré las cosas rápidas," respondió.. "Tinhithus me regañará si no elimino a mi objetivo rápido." Expreso la frustración el su rostro. "¡Aaahhhh!", exhaló con exasperación. "Ese asesino es escurridizo."

Ami y los supervivientes siguieron a la Cazadora hacia la salida que conducía al jardín central de la escuela.

En el centro del jardín, crecía una enredadera compuesta de tendones entrelazados y tejido muscular. La masa orgánica se extendía desde un punto central donde el suelo se había hundido, el cráter. 

Ramas carnosas se entrelazaban con los columpios y juegos infantiles, otras serpenteaban hacia el edificio principal, introduciéndose por ventanas rotas y grietas en las paredes. Lo que fuera aquella cosa, se estaba expandiendo.