Cap 12: selección trascendental parte 1

Arco 3 la pereza ataca.

En la aldea de arlam esa mañana

Kino: bien niños canten

Niños: Chala head chala brillante mi corazón siente emoción, hare una Genkidama chala head chala

No pienses nada solo escucha sueños hay en tu corazón chala head chala, no importa lo que suceda sonreiré el día de hooooyyyy

Las personas que lo acompañaban en su exuberante radio calistenia eran habitantes de la Villa Arlan, la más cercana al Feudo Roswaal.

Probablemente la mitad de la villa estaba presente.

Kino había sugerido cantar, pero como casi no se sabe las letras de las canciones de Liliana

Sugirió a los aldeanos y los niños cantar una canción que él se sabe de memoria

Kino: bien hecho niños lo hicieron bien

Niño: si me gusta

Niña: otra canción Kinomoto sama

Petra: tienes más canciones

Kino: si, pero luego se las cuento

Después de un tiempo, su placentera charla con los aldeanos acabó. Kino se despidió y se puso en marcha. Se acercó a un árbol en las orillas de la plaza del pueblo, llamando exhausto a una chica que descansaba contra el tronco en la sombra.

Kino: vaya día uff. De cualquier manera, lamento dejarte esperando, Emili

No, está bien. Veo que trabajaste duro, Kinomoto.

Emilia arregló su cabello plateado con una sonrisa encantadora, reajustando la capucha que llevaba cubriendo su rostro.

Los aldeanos parecen mucho más felices estos días, y todo es gracias a ti,

Betty: supongo que eres un famoso con los aldeanos de hecho

Kino: si así parece Betty

Emilia: Está bien. Aún no estás en plena forma, y Ram y Rem no pueden venir por su trabajo en la mansión. Además, realmente no me importa hacerlo.

Kino: de hecho, esto es algo extraño era antes difícil que conviviera con otros

Emilia: ¿enserio?

Kino: si rara vez salía a pasear solo lo hacía con mi familia por lo que casi no convivía con otros además que eso era más peligros en mi hogar, pero aquí es todo más tranquilo, claro sin contar con el incidente de las mabestias claro.

Él pudo notar un pequeño rubor en la cara de Emilia bajo su capucha.

antes de que se diera cuenta siquiera de lo que estaba pasando.

Últimamente, Emilia había ido con él a la villa tan pronto como terminaba sus charlas diarias con los espíritus menores, regresaban juntos después de que Kino completara la rutina de entrenamiento matutina. Por unos quince minutos, él y Emilia caminaban lado a lado por el camino de la villa regresando a la mansión. Kino atesoraba esos raros momentos más que nada.

Emilia: Tengo que decir, sin embargo, realmente te llevas bien con los aldeanos,

Kinomoto. Ahora mismo probablemente seas más famoso que Ram y Rem.

Betty: tiene sentido pues aquí eres visto como un héroe de hecho

Kino: oye, pero si tu hiciste más que yo Betty

Betty: Entonces porque cargas esa espada...

Kino: ¿ehmm tenía que combinar no?

Betty: ...

Betty no le cree a Kino

Emilia puso un dedo en sus labios, ladeando su cabeza ligeramente con una mirada conflictiva. Por su parte, Kino estaba un poco abatido por el hecho de que ella hiciera a un lado su apoyo tan fácilmente.

Ella continuo, ―Creo que los aldeanos te ven como alguien singularmente perspicaz en vez de como un héroe que los salvó a todos. Quiero decir, sabes algunas cosas muy misteriosas.

Emilia: las canciones, e, baile, ¿silbar incluso los educas si se equivocan eres muy paternal Kinomoto no lo crees?

Kino: paternal yo ehhhm no solo bueno un poco...

Betty: lo es de hecho trata a Betty como una niña

Kino: pero bien que te gustan los dulces Betty no lo niegues

Betty: si supongo....

Pese su actitud Betty era cercana a Kino y Emilia

Se le podría considerar una tsundere a Beatrice

Kino: (Ha pasado mes desde que llegue a este mundo, y en ese mes me contrataron como mayordomo en la mansión mathers, y he hecho mucho aprendí a leer esta extraña lengua, aprendí magia conseguí una amiga espíritu.)

Antes no podía ni leer, pero gracias a la ayuda de rem y Betty lo puede hacer, realmente me mataba estudiando, ahora puedo leer sin tanta dificultad además que puedo hacer tres hechizos por mi cuenta, cuatro en realidad, pero Betty dice que mejor no use el shamack

Y también como que el reino tubo una guerra contra los demihumanos y una canción del demonio de la espada junto a la laúd Liliana masquerade

En este tiempo aprendí muchas cosas según el lugar que estoy es el reino de Lugunica el reino del dragón volcánica, un dragón que puede o salvar o destruir el reino

La verdad nunca he creído en las deidades, siempre he sido escéptico al respeto, nunca entendí el que pasa con eso porque debemos rezar a algo inexistente o porque hay que ver como flagelan a una persona, eso es tan incomodo

En si prefiero pensar que son mitos o leyendas

Además, un dragón como dios suena algo de mitología, no me gusta en pensar cosas como el fin del mundo

Kino: ¿¡emmm no he Pensado en ello, la verdad no hice casi nada....

Pensando de nuevo en sus hazañas, sumaban considerablemente menos de los que originalmente pensaba. Quizá sería mejor decir que había estado envuelto en varias hazañas, pero sus esfuerzos individuales no habían logrado casi nada.

Emilia: Sheesh. No te preocupes por pequeñas estupideces como esas.

Kino: no lo sé...

Emilia: Todo mundo sabe que trabajaste muy duro, Kinomoto. Roswaal, Ram, y especialmente Rem, ¿verdad?

La expresión de Kino seguía siendo patética a pesar de que Emilia le dio aliento. Corrió unos pasos delante de él y se dio la vuelta. El movimiento repentino hizo que su capucha callera hacia atrás, dejando caer su largo cabello plateado por su espalda, brillando en la luz del sol de la mañana.

Y yo también

Kino: ¿eh?

Emilia: Se muy bien que tan duro trabajaste. Es por eso por lo que no tendremos que estar deprimidos. ¿Entiendes?

Emilia ladeó su cabeza y preguntó...

Kino: ¿Tu respuesta?

Kino se ruborizo por el comentario de Emilia le avergonzaba un poco

Kino: Gracias Emili

Kino: oye Emilia tengo una duda porque usas una capucha cuando vamos al pueblo

Emilia: ... es por...

Puck: si vieran a mi Lia saldrían corriendo

Betty: si niichan, tiene razón acaso olvidaste que es una semi elfa...

Kino: ¿es cierto, pero si eres una candidata a reina no deberías hacerte si quiera a conocer?

Betty: si, pero de verdad crees que es buena idea,

Kino: ....

Kino: (no...)

Emilia: ...

Betty: ...

Kino: ¡bueno cambiando de tema tu capucha esta genial sabes donde las hacen!

Puck: esto no es cualquier capucha es una capucha

Betty: esta capucha esconde tu presencia de las personas es una capucha anti-reconocimiento la creo Roswaal para que nadie reconozca a Emilia

Kino: guaaau ¡eso suena asombroso ¡

Betty: era de esperarse supongo

Betty ya conocía algunas mañas de Kino, las cosas mágicas o singulares son las que mas le gustan , es decir le gusta lo extraño.

Emilia: ¿si tanto te gusta, te gustaría que te pidiera que te hagan una?

Kino: ¡- ¡

¡ENCERIO ¡

Emilia: si, pero antes de que color te gustaría la capucha Kinomoto será mi regalo por todo tu esfuerzo

Kino: ¡enserio me regalarías algo así de preciado!

Emilia: si

Kino: ¡en ese caso quiero la capucha de color negro por favor!

Kino se puso alegre al oír que Emilia le regalaría un objecto mágico tan genial

Mientras se iban el tiempo paso y llegaron a la mansión

La puerta del Feudo Roswaal había estado a la vista durante el transcurso de su conversación. Pasaron unos cuantos minutos hasta que llegaron...junto al final de su dicha matutina.

Hay un... carruaje de dragón estacionado frente a la mansión. Emilia se detuvo junto a Kino y murmuró, él se detuvo también, viendo en la misma dirección. En efecto, había algo parecido a un carruaje de caballos estacionado frente a las puertas. Era "algo así" ya que el vehículo claramente no era de caballos.

Después de todo, la criatura que halaba el carruaje era un lagarto tan grande como un caballo.

Kino: Oh, cierto, los vi pasando por toda la capital real. ¿Carruajes dragón, dices?

¿...? Sí, el dragón de tierra hala del carruaje que tiene detrás, así que es un carruaje dragón. ¿Oh tiene otro nombre?

Emilia: ¿En serio? ¿No estás engañándome? No irás a avergonzarme dejándome usar palabras incorrectas en un lugar inapropiado, ¿verdad? Si me estas tomando el pelo, ¡voy a aporrearte

Kino: no hay razón para eso la verdad soy un poco inexperto en este tema recuerda que soy extranjero en Lugunica

Emilia: eso es cierto perdona por haber dudado

Betty: veo un carruaje supongo

Los había visto varias veces durante su tiempo en la capital real, pero esta era

la primera vez que miraba uno bien y de cerca. El lagarto al que Emilia se había referido como dragón de tierra, en efecto, era tan grande como un caballo, pero más delgado y ligero. Parecía como si pudiera vencer a un caballo en una carrera.

Mientras los dos se acercaban, un hombre se levantó del asiento de chofer del carruaje dragón y anunció:

???: Hey, hey. Atentos ahí abajo.

Ante los ojos sorprendidos del par, el hombre saltó ágilmente desde la parte superior del asiento y quedó de pie en el suelo debajo

Kino contuvo la respiración un poco cuando se percató de que apenas y había provocado un sonido su aterrizaje. El asiento del chofer estaba más o menos a la altura de los ojos de Kino...no era una altura de la cual saltar casualmente. Y que Kino y Emilia habían reconocido a la persona que montaba el dragón

El viejo hizo una reverencia y habló con elocuencia como corresponde a un caballero de edad.

Kino/Emilia: ¡tú eres ¡

Kino: ¡es Wilhelm van astrea ¡

Wilhelm: como lo prometí, he venido a cumplir nuestro acuerdo

Bienvenida de regreso. Por favor discúlpeme por ocupar el frente de su puerta.

Cortésmente echó atrás su cabello blanco sólido antes de ponerse un inmaculado traje negro hecho a la medida. Aunque de edad avanzada, su cuerpo obviamente estaba moldeado en buenas condiciones, y su aura hizo que Kino sintiera algo de admiración, al conocer la historia del demonio de la espada subconscientemente fue ganando algo de admiración por el señor Wilhelm

Wilhelm: El enviado ya está dentro de la mansión y posiblemente tratando con el Marqués Mathers.

El hombre mayor pareció leer sus mentes y contestó su pregunta preventivamente. Kino inesperadamente estaba sin palabras mientras Emilia, de pie a su lado, caminó al frente y encaró al anciano.

Emilia: ¿Enviado...? ¿Esto podría ser...?

Wilhelm: Como sin duda ha conjeturado, Lady Emilia, es referente a la selección real.

El hombre continuó, ―Creo que el enviado tiene un mensaje para usted. Por favor regrese a la mansión a recibirlo en persona.

Emilia: ... ¿He sido convocada?

Wilhelm: Por favor pregunte al mensajero personalmente.

La discreta respuesta del anciano causó que el rostro de Emilia se complicara mientras bajaba la cabeza.

Emilia comenzó a caminar sin ni siquiera voltear a ver a Kino.

Él se apresuró un instante para alcanzarla. En el último momento, volteó a ver atrás, y vio que el conductor seguía haciendo reverencia mientras silenciosamente los miraba marcharse.

Kino: (no me puedo creer que conocí a una leyenda y no lo sabía, el señor Wilhelm es el demonio de la espada el héroe de la canción de Liliana)

Rem/ram: Bienvenida de nuevo, Lady Emilia.

Después de que el conductor los despidió, los dos llegaron a la sala de la mansión y fueron recibidos por una chica con traje de sirvienta...Rem.

Extrañamente, las emociones eran ausentes en su aguda voz, las reemplazaban calma y formalidad.

Gracias. Lamento haber dejado la mansión. ¿Parece que tenemos visitas?

Un enviado de la capital real está de visita. ¿Desea unírseles?

Por supuesto. Es mi problema, así que no podemos dejarme fuera del asunto.

Rem asintió en respuesta. Emilia comenzó a subir las escaleras.

Emilia estaba encontrando difícil decepcionarlo, así que Rem desapasionadamente lo interrumpió por ella.

Onee-sama ya está atendiendo en el cuarto de recepción. No hay lugar para otros sirvientes. ¿Entiendes?

Kino: si lo entiendo

Después de la pequeña disculpa de Emilia, Rem se dirigió gentilmente a Kino, aun en su Modo de Trabajo. Rem caminó hacía el piso superior con Emilia detrás de ella.

Betty: porque no me dijeron que conocían al demonio de la espada de hecho

Kino: porque lo conocimos por casualidad y no pensaba si quiera volver a verlo

Betty: entiendo supongo

Kino: Betty por ahora te dejo tengo trabajo por hacer

Betty: bien supongo que pasamos mucho tiempo juntos de hecho

En el patio

Kino: ¿No te aburre esperar al frente todo este tiempo? ¿Quieres tomar un poco te señor Wilhelm

El viejo en el asiento de conductor abrió ampliamente los ojos en sorpresa cuando Kino llegó con algo de té. El carruaje dragón todavía estaba estacionado frente a la puerta de la mansión.

Wilhelm: Perdone mi rudeza. Esto es algo inesperado, ahora, tenga cuidado ahí debajo de nuevo por favor.

Con eso, el viejo caballero saltó desde el asiento de conductor. Justo como antes, su aterrizaje fue casi insonoro. Él continuó, ―Haré lo que sugieres. Ciertamente, mi garganta se ha secado un poco.

Kino: bien, aquí tienes.

Wilhelm: No sabía tus gustos, así que sólo traje el té más caro que pude encontrar.

El anciano caballero tenía una leve sonrisa en su rostro cuando aceptó la bandeja. La expresión remarcó las arrugas propias de su edad alrededor de su boca, notó Kino, estudiándolo atentamente ahora que estaba cerca, entonces...

Repentinamente, un leve impacto desde un costado lo tomó por sorpresa.

Kino: gha ¡

Rápidamente encontró al culpable...el dragón de tierra estaba metiendo su hocico en la axila de Kino. La creatura negro azabache examinaba a Kino con ojos reptilianos agudos.

Su mirada se sentía extraña, más no incomoda. Quizá simplemente no se sentía hostilidad en aquellos amables ojos.

El caballero rápidamente se dirigió a Kino.

Wilhelm: Me disculpo. Este dragón es el mejor en nuestra casa, pero...

Kino: ¿no pasa nada mientras no me muerda no me molesta, puedo acariciarlo señor Wilhelm?

Wilhelm: el dragón es muy orgulloso no sé si se deje

Kino: bueno creo que tomare el riesgo

Kino: hola pequeño en ese momento Kino acaricio la frente del dragón, el dragón de manera dócil se dejó acariciar

Se alejo del dragón cuando lo termino de acariciar

Wilhelm: Me siento aliviado al oír eso. Debo decir, es raro que él actúe de esa manera.

Después de disculparse por la descortesía del animal, el anciano caballero también dirigió sus azules ojos hacia Kino.

el anciano caballero tomó un vaso de té negro y lo llevó a sus labios. Él comentó, ―Un buen sabor. Tiene un considerable impacto, pienso yo.

Wilhelm: ...Bueno, no exageraba. Realmente es el té más caro en la mansión.

Kino: Tendré a ram enojada después de esto así que luego tendré que pagar por él te tomado prestado

Eso tampoco fue una exageración. Ram tendría toda una conferencia esperándolo si se daba cuenta de que había usado el té de más alta clase en "No Tocar" sin permiso.

Wilhelm: Ahora, ¿Qué quieres de este viejo fósil después de haberme alagado con tal té maravilloso?

Enfrentado con el calmado comportamiento del hombre y su perspicaz discernimiento de sus motivos ocultos, Kino sólo pudo tensarse. Como un joven, sabía que estaba tremendamente superado en esta guerra de palabras, por lo que rápidamente levantó la bandera blanca

Kino: parece que fui demasiado obvio, Tal vez no me recuerdes señor Wilhelm, pero mi nombre es Kinomoto Kurosaki mayordomo de la casa L mathers, y lamento haberlo tratado así en la capital le pido mis más sinceras disculpas señor Wilhelm

Kino se inclina en señal de respeto y disculpa por su actitud no Cortez en la capital

Reconociendo su estatus de novato, esperaba que su superior ofreciera un poco de misericordia.

Al ver a Kino inclinar su cabeza mansamente, el anciano caballero relajó su expresión.

Wilhelm: Eso es cortes de tu parte. Me llamo Wilhelm. Actualmente sirvo en la Casa Karsten, y ese trabajo me ha traído a este lugar

Kino: señor Wilhelm tengo entendido que usted es un veterano de guerra, por favor podría contarme una sus historias de guerra si no es una molestia

Con una mirada seria Kino pidió que le contaran sobre la primera guerra demihumana

Era obvio que Kino hablaba enserio y no buscaba molestar a el veterano de guerra Wilhelm van astrea

Wilhelm observo con detalle la mirada de Kino la cual poseía gran interés en un tema tan delicado como la guerra demihumana

Wilhelm: estas seguro que quieres escuchar de este viejo fósil, esas violentas historias de guerra no son historias para niños

Kino: ¡_ ¡

EHMM no soy un niño tengo 18 años soy un adulto

La mirada del chico había parecido que se irrito al ser llamado niño parece que el viejo había tocado un punto débil en el joven chico.

Wilhelm: Dos años antes, una guerra civil, la llamada Guerra Demi-humana, había estallado en el Reino Dragonfriend de Lugunica.

Por más de cuatrocientos años había existido un prejuicio persistente contra los demi-humanos, infundido por una "bruja" todos esos siglos antes. Lugunica no fue una excepción; las relaciones entre humanos y demi-humanos eran frías, el estatus quo sólo se había mantenido gracias a un entendimiento tácito de que tendrían poco que ver los unos con los otros

Kino: gkh

En ese momento Kino entendió que la guerra surgió envase a la discriminación la guerra, no era muy diferente a lo que en su mundo paso con los nazis

Wilhelm: Esa frágil paz quedó destrozada por la colisión de una caravana mercantil demihumana y guardias fronterizos humanos.

La historia cuenta que la caravana mercantil, dirigida por el Imperio de Volachiia hacia el sur, era sospechosa de cruzar la frontera con fines de espionaje, pero los hechos no estaban claros. Lo que sí estaba claro era que, cuando la caravana se topó con los guardias fronterizos, los civiles fueron aniquilados.

Estos comerciantes eran bien vistos por los demi-humanos en todo el país, y sus muertes en manos humanas inspiraron una revuelta armada entre sus compatriotas. Así comenzó el embrollo de la guerra civil

Kino: ¿eso es bastante fuerte, debiste haber luchado con muchas personas?

Wilhelm: si y todas del bando semihumano

Kino: y tuviste alguna complicación en alguna batalla

Wilhelm: uno un gigante Valga Cromwell.

Kino: ¡¡ UN GIGANTE SE REFIRE A LOS DE ESTE TAMAÑO¡¡ señalando con sus manos hizo una pose comparando el tamaño

Kino con gran sorpresa había oído que los gigantes eran seres de una altura de más 20 metros

Wilhelm: no exactamente de ese tamaño, pero tampoco te equivocas luche con el gigante en su altura original

Kino: espera no entiendo como que con su altura original de que altura es la que tenía el gigante

Wilhelm miraba con reojo al chico que parecía más sorprendido al oír su hazaña

Wilhelm: Los gigantes eran una raza de demi-humanos que, aparte de su tamaño, parecían básicamente humanos. Este hombre era uno del pequeño puñado que aún continuaba con vida, y de hecho era el más joven entre ellos. Aun así, había contribuido en gran parte en la Alianza Demi-humana, quizás más que nadie. Fue él quien organizó a los demi-humanos y los convirtió de una turba sin rumbo a una coalición que podía oponerse al reino. Su nombre era Valga Cromwell.

Kino: así que peleaste con un gigante debió ser una batalla demasiado reñida, incluso con el tamaño reducido es difícil pelear con alguien con gran altura

Wilhelm: el gigante con círculos mágicos y los huesos de sus ancestros una bruja los hizo crecer 10 metros de altura

Kino: ¡- ¡

Kino: (¡¡ ¿OTRA BRUJA?¡¡ existen más brujas aparte de satella...!!)

No espera Betty me dijo que devoro a las otras brujas con los pecados eso significa que hay más brujas que no conozco...

Kino: ¿círculos, pero eso cómo?

¿Suenan a pentagramas o me equivoco?

Wilhelm: si como los pentagramas

Kino: ¿entonces lograste vencer al gigante?

Wilhelm: valga Cromwell. Esta muerto

Kino: lo supuse

En ese momento solo se puso a pensar que otra cosa preguntar, realmente preguntar sobre la guerra lo dejo pasmado

Kino: ¿cambiando de tema después de la guerra, hizo algo en particular aparte de ser un soldado? ¿No se pasar el tiempo con una novia o pareja?

Había cambiado de tema, era obvio que el tema lo había dejado algo boquiabierto no sabía si sentir admiración o respeto del demonio de la espada Wilhelm van astrea

Wilhelm: a decir verdad, si,

Mi esposa...

El repentino cambio tema hizo divagar a Wilhelm por un instante. Él asintió inmediatamente.

Ya veo. Ciertamente, es justo como dices. Pienso en mi esposa como la mujer más hermosa en el mundo. Sentía como si todos la estuvieran viendo, y necesitaba cortejarla mientras pudiera. Patético ¿no

Kino: ¡NO como va a ser eso patético!, el amor es algo sagrado y hermoso

Wilhelm: parece que no te molesta hablar de estos temas con este viejo

Kino: ¿no por qué?

Wilhelm: los jóvenes luego no están interesados en escuchar las historias del ayer y menos las de un anciano

Kino: vaya parece entonces que soy el bicho raro, dijo Kino bromeando con una pequeña risa

Wilhelm mira con reojo al chico de cabello negro, el parecía fascinado por oír sus historias

Kino: ¿disculpe señor Wilhelm?, ¿que lo trae a la mansión L mathers?

Wilhelm: ¿Creo que el enviado está hablando sobre el asunto?

Kino: ehm si

Kino: (era obvio, pero era de esperarse)

Wilhelm: podría preguntar, esa espada acaso prácticas con la espada

Kino: ehmmm creo que si

Kino: (lo poco que hecho con la espada ha sido cortar madera o algunas plantas largas que estorbaban)

Aunque también podría decirse que juego con ella

Wilhelm: ya veo parece que no sabes ni cómo usarla

Kino: ghjj:

Kino: (soy tan obvio...)

Wilhelm: Sin embargo...parece que nos quedamos sin tiempo.

Kino: ¿Ah?

Dijo Kino como tonto mientras Wilhelm señalaba silenciosamente a la mansión.

Kino: Esa es Rem saliendo con... ¿Quién es esa?

La familiar sirvienta de cabello azul estaba dejando la mansión con alguien desconocido. Basándose en el comportamiento de Wilhelm y su conversación previa, él razonó que debía ser el tan importante enviado en cuestión.

Quizá él dijo esto sin pensar ya que el objeto de su atención no parecía un "enviado" en absoluto. El visitante notó la mirada de Kino y respondió con una sonrisa burlona.

???: Oye, es normal enamorarse a primera vista de una persona hermosa, ¿pero no dijeron que es grosero quedarse mirando?

El locutor era una chica con un rostro encantador, su cabello rubio estaba cortado semi largo. Era alta para ser una chica, Sin embargo, su figura era terriblemente delicada, y cada acción tremendamente femenina...todo gritaba chica hacia ti.

¿Un moño blanco adornaba su cabello, y el brillo en sus grandes ojos y orejas de gato?

Kino: ¿Esas orejas son reales?

???: ¿Miau, miau?

Como si respondiera a su murmullo, las orejas animales, del mismo que el cabello de la chica, se estremecieron. No había tenido oportunidad de acercarse y conocer a un semi humano antes.

Claro a excepción de Rom

Kino: (cada cosa que veo de este mundo no me deja de parecer al de un videojuego...)

No estaré atrapado en uno...

No solo sobre pienso las cosas...

???: Oye, Abuelo Wil. Perdona por hacerte esperar afuera. ¿Fue aburrido, miau?

Para nada. Este amable individuo se dignó a involucrar a estos viejos huesos en una conversación, ayudándome a pasar el tiempo de manera muy agradable.

???: ¿Fumyu?

Ante la respuesta del viejo, la chica puso uno de sus dedos en su mejilla y ladeó la cabeza. Sus pupilas de gato se estrecharon mientras observaba a Kino.

Después de una inspección arrogante, junto sus manos aplaudiendo y anunció...

???: Oh-ho. Eres el chico que Lady Emilia miaucionó.

Fue lo que hizo a continuación lo que lo tomó con la guardia completamente baja.

Kino: Ah, eh, ¿¡Ehh!?

???: No te muevas. Es hora de una pequeña inspección. Kino quedó atónito cuando la chica atrapó con un brazo su cuello, abrazándolo con su delgado cuerpo. Ya que sus alturas eran similares, su cara se presionó contra un costado de la de Kino. El susurro de su voz en su oreja hizo todo su cuerpo hormiguear, y se ruborizó muy avergonzado. La suave sensación fue acompañada por una curiosamente buena esencia. El repentino desarrollo de eventos lo entiesó mientras dedicaba cada parte de su voluntad para mantener la calma.

Kino: O...O. O OYE¡¡que estás haciendo ¡_ pregunta alterado

???: ¡Nom!

Kino: ¡Kyaa!

El mordisco hizo que su voz se volviera algo chillona, como si una chica gimiera.

Sus esfuerzos se desmoronaron cuando sintió un simple mordisco en su oreja. Riéndose del adorable gañido de Kino, la chica lo liberó de su abrazo con satisfacción. Él rápidamente retrocedió cayendo sobre su trasero.

Tee-hee, que reacción tan linda. De cualquier modo...Tu flujo de mana se siente un poco inestable ojalá tuviera tiempo para hacer algo

Kino: ¿¡Q-qu-qué estabas haciendo!? Pregunto agitado y alterado

Checando tu cuerpo un poco. La mordida fue complementaria.

Sus ojos brillantes se fijaron en él mientras se mordía provocativamente su dedo meñique. Incluso sabiendo que ella se estaba burlando, Kino seguía agitado y no podía descartarlo como mero humor.

Oh, no te sonrojes tanto. De cualquier manera, supongo que nadie te ha dicho nada, ¿o sí?

¿Qué quieres decir? ¿Acerca de qué?

Acerca de tu cuerpo, el trato, y cosas como esa

Kino seguía rojo y apenado por lo que le habían hecho fue demasiado

Kino: (...Me siento abusado...)

las orejas se alzaron mientras la chica parecía estar saltándose deliberadamente los detalles. Aunque él encontraba difícil ignorar su peculiar disposición, simplemente tenía que aguantar el viaje.

Sabes, sería de ayuda si pudieras decirme que son esas cosas.

Oh, ¿qué hago? Este es un trabajo importante, también... Tee-hee.

Wilhelm: Dejémoslo así, Ferris.

Wilhelm regañó a la chica por sus burlas excesivas.

Ella hizo un puchero en respuesta. ―Thhbt. Eres muy serio Abuelo Wil. No es divertido.

Estoy agradecido con Sir Kinomoto por el té, y, además, es hora de que sigamos nuestro camino.

Wilhelm hizo una reverencia mientras intercambiaba lo que de alguna manera parecía un jugueteo alegre con la chica. La chica todavía tenía una mirada agría, pero pareció recuperar su humor mientras guiñaba en dirección a Kino.

Lo siento. Parece que podría gastarte más bromas, pero ya no tenemos tiempo por hoy. Si no regresamos a casa pronto, nuestra querida Lady Crusch

estará tan preocupada que no podrá pegar los ojos esta noche.

Kino: oí ese nombre antes, pero ¿quién es Lady Crusch?

Un nombre que será mejor que recuerdes...ella es la dama que gobernará este país algún día.

Kino: (¿Sera otra candidata al trono?)

Con la última oración, su descuidado comportamiento se desvaneció, reemplazado por seriedad total. Luego se despidió del atónito Kino. Wilhelm colocó su taza de té vacía de nuevo en la charola.

Fue una buena bebida. Entonces, Sir Kinomoto, le deseo buena salud.

Wilhelm saltó ágilmente de vuelta a el asiento de conductor y tomó las riendas del dragón de tierra.

Bueno, disculpa por no presentarlos, pero Ferris es una persona muy ocupada. ¡Hasta luego!

Ferris: Deberías arreglar todo eso con Lady Emilia. Si el destino lo permite, nos encontraremos de nuevo en la capital real. ¡Bye miau!

La chica se fue sin más, su sonrisa fue lo último que él vio cuando ella entró al carruaje dragón.

Wilhelm azotó las riendas con un breve "Adiós."

El dragón de tierra rebuznó mientras las ruedas del pesado carruaje se ponían en movimiento. Pisó fuerte en el suelo varias veces antes de dar un poderoso paso, acelerando rápidamente en el siguiente instante.

el dragón de tierra estalló esprintando a gran velocidad por el camino, levantando una gran nube de polvo mientras aceleraba en la distancia.

...¿Y cumpliste tus deberes como enviado?

Wilhelm: Bueno, por supuesto. Nunca fallaría haciendo algo que mi Lady Crusch me pidiera. ¡Oh, Ferris: Abuelo Wil, ¡eres tan paranoico!

Sirviente y enviado conversaban mientras el dragón de tierra dejaba la Mansión Roswaal lejos en la distancia.

Wilhelm se sentó en el asiento de chofer, guiando al dragón de tierra sin esfuerzo. Detrás de él, la chica de cabello pálido asomaba su cabeza desde la ventana del carruaje tirado por el dragón.

En cierto sentido, había pocos lugares más adecuados para una conversación privada.

Ferris: Pero tengo que decir, Abuelo Wil, no esperaba que hablaras con ese chico mientras esperabas. No te gusta hablar con las personas, ¿o sí?

Wilhelm: Ese es un malentendido muy grave.

Ferris: Oh, ¿lo es? Lo siento. ...Es solo que te gusta más cortar gente que hablarle, ¿cierto?

Wilhelm: ...Ese es un malentendido incluso peor.

Ella solo había estado bromeando, pero Wilhelm no ofreció colaboración. La chica presionó sus labios en un puchero, disgustada por la pétrea reacción a sus provocaciones.

Ferris: No eres divertido. ¿Qué, era más divertido escuchar a ese chico que tu querida Ferris? No parecía tan especial, ¿pero te agrada tanto, miau? ¿Crees que en realidad es muy fuerte, pero está ocultando sus habilidades?

Wilhelm: No es así. Es un aficionado...un cachorro sin melena. Tampoco tiene algún talento que valga la pena mencionar. Estoy seguro de que es muy común.

Ferris: ¿Entonces por qué, Abuelo Wil? Dijiste que odiabas a la gentuza, sobre todo.

Todo lo que la chica decía lo pintaba de la peor forma posible. En respuesta, Wilhelm tranquilamente levantó una mano y señalo su propio rostro.

Son sus ojos.

...¿Ojos?

La chica bajó la cabeza mientras indagaba. Wilhelm simplemente levantó la mirada, pensando de nuevo.

Los ojos del muchacho me resultaron un tanto interesantes. Proclamaban haber trascendido la muerte. Muchos se acercan a la línea, se detienen y regresan, pero...

Wilhelm cerró sus parpados pensando mientras sus palabras se esfumaban.

Esos son los ojos de alguien que ya ha cruzado una vez, no...varias veces, y regresado. No sé por qué fue. Podrías decir que fui obligado por mi curiosidad.

Pero la chica, alegremente pasó por alto la expresión de asombro de Wilhelm.

Miau, eso no tiene mucho sentido...

Esta vez, Wilhelm respondió con una sonrisa incómoda. La chica continuó, añadiendo, ―Pero si eso es cierto, Abuelo Wil, ese chico no encontrará un camino fácil que recorrer.

La chica estrechó sus ojos mientras lanzaba su brillante mirada hacia la amplia espalda sentada contra el asiento de conductor.

Tener al Demonio de la Espada, Wilhelm van Astrea, interesado en ti es tan desafortunado como la bruja teniendo un regalo para ti.

Un rato después

Kino: parece vas a la capital Emilia

Emilia: si, pero tu vendrás conmigo

Kino: ¿eh?

Kino: ¿acaso quieres que te ayude?

Emilia: no necesitas ir por un tratamiento

Kino: ¿Tratamiento, pero no estoy enfermo?

Emilia parecía confligida mientras observaba las reacciones de los otros en la habitación. Sin embargo...

Roswaal: Ah, no me importaaa, eres libre de elegir lo que deseees.

Ram: Este aroma... ¡No puede ser! ¿¡Las atesoradas hojas de té de Ram!? ¡Kisura es verdaderamente capaz de todo...!

Roswaal se zafó de la situación, riéndose todo el rato. Ram, por otro lado, estaba preocupada y conmocionada por el repentino descubrimiento de algo, y apenas y se dio cuenta de la difícil situación de Emilia.

Y Rem, la última persona, dijo...

Rem: Kinomoto kun- es necesario que vayas necesitamos estabilizar tu puerta

Kino: pero mi puerta no estaba bien

Betty: no debido a tu inexperiencia cuando lanzaste esos 2 hechizos el rebote callo en ambos, pero el único que salió mal parado fuiste tu puerta esta algo herida de hecho

Kino: pero pensé que no había habido daños

Betty: la inexperiencia causa estos casos de hecho, por lo que deberías sentirte afortunado de que tengas a Betty para evitar ese defecto de hecho

Rem: es de suma importancia que Kinomoto kun tome el tratamiento

Roswaal: ¿eres libre de elegir si deseas el tratamiento o no? Adeeemas Emilia sama le costó mucho conseguir el contacto con el sanador Félix

Kino: (...no puedo rechazar la oferta además Emilia se esforzó para conseguir la ayuda)

Kino: lo tomare

Yo... no...

Con desconcierto en los ojos de Emilia mientras murmuraba, un incómodo silencio calló sobre la sala de recepción. Fue Roswaal quien rompió el desagradable ambiente con un aplauso de sus manos.

Sí, síii, es suficiente. Parece que esta conversación no está haciendo ningún avance, así que vamos a terminar las cosas. He decidido que Kinomoto te acompañará a la capital. Este es mi comando para él como su empleador.

¿¡Roswaal!?

Roswaal se impuso completamente sobre la vacilación de Emilia. Mientras el impacto se hacía evidente en la expresión de ella,

Sin embargooo, Kinomoto va a la capital por razones estrictamente médicas.

Todos los asuntos refereeentes a la selección real están estriiictamente separados. ¿Entendido?

Kino: si señor roswaal

Rem respondió, Es porque necesitas un sanador de máxima calidad para tratarlo. Kinomoto, ¿conociste al mensajero?

Kino: ¿Te refieres a esa chica con orejas de gato?

Roswaal: Ese mensajero es un usuario especialmente consumado en magia de agua, incluso para los estándares de la capital. Con tal habilidad, sin duda es posible restaurar tu salud. Como es muy caprichosa, Lady Emilia pasó por muchos problemas para negociar su cooperación...

Emilia: ¡Roswaal, espera un...! Eso...

Roswaal, quien aparentemente "metió la pata" a propósito, fingió indiferencia ante la indignación de Emilia.

Emilia se sonrojó furiosamente mientras liberaba su lista de excusas.

Q-quiero decir, es parcialmente mi culpa que no estés totalmente sanado.

Kinomoto. Te heriste y terminaste en la mansión porque me protegiste... Y realmente debería haber hecho algo con las bestias demonio, pero tú lo hiciste en mi lugar. Así que esto es para pagártelo, o compensarte por tu perdida, como lo quieras ver...

La mirada de rem se veía algo arrepentida por lo que paso hace un mes

Kino: Algo que no entiendo porque no quieres que vaya a la capital real. ¿Por qué estas actuando como si estuvieras en contra?

Emilia: ―Porque si salgo y pregunto, te dejarás llevar y harás algo loco. Sé qué tipo de bribón travieso eres...

Kino: ¡Oye no soy un niño ¡

se quejó amargamente

Las firmes palabras de Roswaal se encontraron con una variedad de respuestas de todos los reunidos en la sala de recepción.

Y así, el plan para la visita de los ocupantes de la Casa Roswaal fue establecido.

Antes de irnos un carruaje nos iba a llevar

Por supuesto, era un dragón de tierra quien tiraba de él, pero este se jactaba de un tamaño que avergonzaría a cualquier otro dragón de tierra que había visto antes

Kino: ¡wow que dragón tan grande !

Realmente se comporta como un niño pequeño. ¿Verdad?

Dirigió sus ojos a Rem, de pie a su lado, en busca de acuerdo. Pero Rem miraba al emocionado Kino, Cautivada.

Rem: Kinomoto es lindo cuando se comporta así. ¿No lo cree, Lady Emilia?

Emilia: Bueno, creo que es lindo, pero... Mm, Kinomoto ha sido una mala influencia para ti, ¿verdad?

Emilia exhaló una vez más.

Kino: jmm ... losiento me emocione... dijo apenado

Este viaje a la capital real fue por Emilia, una candidata en la selección real, y Roswaal, su patrocinador. Kinomoto también iba por razones médica acompañado de su espíritu Beatrice, con Rem para servir y proteger a los otros

Kino: Ram ¿segura que puedes sola?

Ram: No es fácil mantener la mansión en funcionamiento con una sola persona.

No lo entiendes, Kisura Después de todo, la gente puede sobrevivir tres o cuatro días sin comida.

Kino: JE No planeas comer tu propia comida, ¿¡Hah!?

Después de que la vivaz y desafiante declaración de Ram provocara a Kino, abruptamente ella agarró su cuello y lo haló a su lado. La respiración de Kino se detuvo cuando su rostro inmaculado se acercó.

Ram: ¿Entiendes, Kisura? Sujeta bien las riendas para que Rem no haga nada imprudente.

...Eres tú quien siempre va a la capital real, ¿cierto? ¿Por qué Rem va esta ve...?

Es irritante que me obligues a exponer la razón con mis propios labios.

Ram lo empujó fuertemente en el pecho, dejando salir un hmph mientras se retiraba. Cuando ella se había ido y Kino miraba de nuevo al carruaje, Rem estaba a punto de terminar de cargar el equipaje.

Al parecer la hora de las bromas amistosas ya había pasado; era tiempo de tomar camino.

Tal fue su despedida mañanera.

El dragón de tierra aceleró, y su velocidad comenzó a incrementarse muy repentinamente. La mansión se distanció en momentos, y la figura de Ram al lado de puerta se achicó rápidamente. Un momento antes de que Kino la perdiera de vista, sostuvo los bordes de su falda y le hizo una pequeña reverencia. Fue una manera excepcionalmente al estilo de sirvienta de ver a alguien partir.

Cuando profundizaron en el camino, Kino no fue capaz de ver más a Ram, y finalmente se sentó en su asiento en el carruaje y exhaló. Finalmente sintió un alivio suficiente para comenzar a disfrutar del confort de abordar un carruaje dragón. El asiento tenía una sensación de alta clase apropiada para el costoso diseño del vehículo, haciendo del viaje uno sorprendentemente cómodo a pesar de que el camino no era uno especialmente bien mantenido.

Juzgando por cuán rápido el escenario estaba moviéndose a través de la ventana y su experiencia con los autos de su propio mundo, él suponía que estaban viajando a aproximadamente cien kilómetros por hora. Y aun así las vibraciones se sentían mucho más ligeras de lo que se podría esperar, a la par con un típico sedan.

Kino: el carruaje se mueve muy rápido los dragones sí que son veloces

Rem: si porque tienen una protección divina

Kino: protección divina pero que eso no lo tienen las personas

Rem: las protecciones divinas son favores del mundo a las personas, los dragones tienen una protección divina que les permite correr sin ninguna dificultad incluso aunque tengan peso encima

La bendición de 'repulsión de viento' que reciben los dragones de tierra es un ejemplo.

Bendición de repulsión de viento, ¿eh?

Cuando un dragón de tierra galopa, el viento no lo afecta en absoluto. La bendición se extiende al carruaje conectado a él, así que tampoco es afectado por el viento.

Kino: Betty porque no me dijiste algo más siempre como ejemplo

Betty: porque no lo preguntaste supongo

Kino: ... oh verdad...

Roswaal respondió, ―Es porque las bendiciones tampoooco son omnipotentes.

La bendición de repulsión de viento de un dragón de tierra, una vez suspendida, no puede ser reactivada por un breve periodo. ¿Nos detenemos para almorzar?

Kino: eh si mejor no lo cansemos por completo

Y así comenzó el viaje a la capital real de lugunica

Estaban en la capital real. Específicamente, Market Street, una vía excepcionalmente congestionada. Sin duda, dos personas tomadas de la mano en medio del constante bullicio se verían como una íntima pareja.

Kino: ¿emm Emilia es necesario que sostenga tu mano?

Emilia: si te separas te perderás

Kino: ¡por última vez que no soy un niño Emilia ¡

Siempre y cuando, mientras que ningún entrometido escuchara los fragmentos de su conversación.

Emilia: Absolutamente no. Esto era de lo que estábamos hablando, por lo que hará salgo extraño tan pronto como estés fuera de mi vista. No permitiré que des un solo paso sin supervisión mientras estemos en la capital real. ¿Entendiste?

Kino ....

Kino: (que fastidio pensé que podría explorar la capital.)

La capital de lugunica... fue el lugar donde fui invocado a este extraño mundo, pero porque fui invocado aquí, habla habido invocado, ¿pero habla un invocador?

Este es uno de los primeros lugares que debería investigar si quiero encontrar una pista del cómo y porque fui invocado a este extraño que parece sacado de un videojuego

Kino: ¿por otra parte, porque también Betty me agarra?

Betty: soy tu espíritu de hecho solo el espíritu debería tocar a su contratista supongo Y, en cuanto a lo que estaba hacienda la extraña pareja en la capital real...

Una voz tosca y varonil interrumpió su linda y pequeña discusión.

???: ...Oye, ¿puedes dejar de coquetear frente a la tienda de un hombre como esta?

El rostro de Emilia se puso rígido y Kino no fue la excepción

???: Estás alejando a mis clientes. Compra algo o muévete.

Kino: (tiene que ser una broma otra vez este tipo.)

Kino: No seas grosero, y eso que Vine aquí listo para cumplir mi promesa.

???: promesa cual

Kino: lo ves hasta la olvidaste

pensó que el mal comportamiento del tendero hacia sus clientes era un perfecto indicador de que había elegido la profesión equivocada. En la tienda, con un cartel que decía KADOMON, inscrito con colores brillantes, estaba un vendedor de frutas con coloridos productos en exhibición. La tienda tenía un significado más profundo para Kino

Kino: (Kadomon que clase de nombre es ese parece nombre de digimon.)

Kino: bien quieres dinero dame una un kilo de manzenes

Kadomon: Ah, ya veo. Ese es un gran sentido de la responsabilidad. Me gusta.

Ahora que había recordado a Kino, el comerciante sonrió gentilmente, transportando una caja de madera desde el interior de su tienda y colocándola sobre el mostrador con un pesado ruido sordo. Las frutas rojas, redondas y jugosas brillaban en el interior de la caja bajo el sol.

Kadomon: Aquí las tienes, manzenes, tal como prometiste que las comprarías. ¿Cuántas quieres? Su precio es de dos monedas de cobre

Déjame ver, dos cobres por manzene... ¿Entonces dos monedas de plata deberían cubrir diez?

Oye, ¿no sabes el tipo de cambio actual...? En estos momentos son nueve monedas de cobre por una moneda de plata.

Entonces, dos platas y dos cobres, ¿verdad? Aquí tienes.

Kino sacó las monedas apropiadas de su billetera y se las entregó al comerciante. El hombre quedó aturdido, en silencio, inclinando la cabeza mientras suspiraba profusamente.

Me tomas la palabra, ¿eh? Chico, realmente no necesitas ser tan confiado.

Las variaciones en los tipos de cambio se publican en el cartel a la entrada del mercado. Si paseas por ahí sin dar una buena mirada, algún comerciante deshonesto te puede engañar.

El comerciante parecía estar advirtiéndole que su honestidad lo convertiría en un incauto por estos lugares. Es cierto que pagar basado solo en lo que le dijeron podría ser demasiado confiado, incluso si era de sentido común en su país.

Si se tratara del pueblo cerca de la mansión, todos estaban tan estrechamente relacionados en una comunidad aislada que el engaño era inconcebible, pero en una gran ciudad como la capital real era un terreno fértil para hacer maldades. En otras palabras

Kino: bueno gracias por la advertencia señor Kadomon

Solo de vez en cuando. Tendría pesadillas si engañaba a un cliente que había vuelto para cumplir una promesa que casi había olvidado y que pagó exactamente lo que le dije. Solo es eso

Caminando los 3 comenzaron a hablar

Kino: bien ahora tengo unas manzenes, pero en que debería usarlas

Betty: podrías comerlas de hecho

Emilia: ¿y si preparas un postre?

Kino: no es mala idea Emilia

Kino: ¿oye ahora que lo recuerdo sabes que paso con Rom, felt y Reinhard?

Kino: (la última vez que estuve aquí, no supe nada de ellos, pero es algo difícil de no preocuparse por esa loca de las entrañas)

Emilia: Mm, sí. Al principio, pensé que los dejaría ir sin ningún problema, pero... de repente, Reinhard palideció y dijo que se llevaría a la niña con él

Kino: ¡¿porque suena a un secuestro?¡

Betty: ¿supongo que porque lo es?

Kino: (¿me deje llevar por su actitud será uno de esos pederastas lolicones?)

Kino: ¿entiendo, pero por qué?

Pese a que felt le estaba colmando la paciencia, ahora solo podía pensar en la seguridad de la pequeña niña

Emilia miró a su lado y se llevó un dedo a los labios mientras reflexionaba sobre el problema.

Si quieres ponerte en contacto con Reinhard, deberíamos ir a la guarnición de este lado del Distrito de los Nobles. Hay un edificio allí que... Bueno, ahora no es más que una pila de escombros.

estuve de acuerdo con la sugerencia de Emilia. Después de todo, el hecho de que Reinhard hubiera estado caminando por las calles de la capital mientras se encontraba 'fuera de servicio' dejó en claro que era un guardia, muy probablemente uno de alto rango ...un caballero.

Kino: si debemos contactarlo

Ahora que lo pienso, ¿a qué te refieres con ponernos en contacto con él desde la guarnición? Ahí no hay teléfonos, ¿verdad?

Mientras caminaban hacia la guarnición, expresó su repentina duda.

Emilia: ¿Teléfonos?

La expresión desconcertada de Emilia implicaba que nunca había escuchado esa palabra en su vida.

Kino: como un dispositivo para hablar directamente con alguien en un lugar distante...

Emilia: ¿Te refieres a un metia? Deberían tener espejos mágicos...

Kino: ¿Espejos mágicos?

Metia, es un objeto que te muestra a la otra persona y te permite hablar mediante ella. Son bastante comunes como artefactos mágicos, por lo que aparentemente se usan en varios lugares...

Kino: bien supongo que está bien

Supongo que sí. Rem se molestará si no regresamos pronto, así que será mejor que nos demos prisa...

Sin embargo, tenía mucho trabajo que hacer como guardiana del grupo completo, así que, con gran resignación, permitió que Emilia fuera la que lo guiara por la ciudad.

No había duda de que la chica en ese mismo momento estaría arrasando por despecho con su trabajo.

Bueno, es una lástima para Rem; pero para mí, el no tenerla aquí es un poco gratificante...

Kino: ¿eh?

Kino: oye y Emilia como te va con las elecciones

la expresión de Emilia desapareció por completo, y la tristeza que llenaba sus ojos violetas solo acentuaba su comportamiento.

La mañana en que llegó el emisario, así como durante el tiempo antes de su partida, Kinomoto había interrogado a Emilia varias veces, pero ella nunca bajó la guardia. Su llegada a la capital real no había cambiado eso.

Emilia: Te lo he dicho varias veces, ¿no? Te traje aquí para que puedas cumplir tus promesas y te recuperes. No necesitas preocuparte por mí.

Kino: ¿No lo sé no has soltado mi mano desde hace rato, realmente no estas preocupada?

Emilia había dejado de caminar, deteniendo a Kino. Debajo de su capucha, un mechón de cabello plateado cayó sobre su cara.

Kino no pudo evitar pensar que parecía una lágrima que caía.

Kino sé que dije que no quería estar en la selección, pero eres mi amiga me preocupa como estas

Vámonos. El sol se pondrá si no hacemos esto pronto.

Emilia comenzó a avanzar otra vez, jalándolo de la mano. Kino la siguió, apretando los dientes ante su propia falta de coraje.

...Será mejor que dejes las cosas así, Kinomoto.

―...!

Soy yo. Estoy hablando directamente a tu mente, por lo que Lía no puede oírte.

El método de comunicación era extraño, pero la voz era ciertamente familiar.

Era el espíritu con el que Emilia había establecido un pacto, el gato sobrenatural que siempre estaba a su lado ...Puck.

Kino se sorprendió por la repentina comunicación telepática.

Kino: ¡ ...! ¿Entonces también puedes oírme

Puck: Captas rápido. Al principio no estaba seguro, pero... fue fácil establecer una conexión, por lo que es posible que tengas una alta compatibilidad con los espíritus. Quizá es por eso por lo que a Betty le agradas.

El conocimiento unilateral de Puck sobre la situación añadió irritación a la tristeza de Kino. Se sintió excluido.

Lía está bien. No pierdas en estos momentos la esperanza sobre esta conversación.

Eso es... ¿Cómo diablos sabes?

Solo lo sé. Sé todo lo que hay que saber sobre Lía, después de todo.

Incluso si no lo puso en palabras, el amor paternal de Puck por ella era evidente en su tono.

La garantía que le había dado el espíritu hizo que se sintiera peor por su propia impotencia. Puck solo le había recordado que, al fin y al cabo, Kino, no sabía nada de Emilia.

Ella era candidata para convertirse en la próxima reina de Lugunica, bajo el cuidado de su patrocinador, Roswaal.

Sabía que ella era honesta, ingenua, obstinada y de buen corazón; su personalidad la impulsaba a ayudar a los demás incluso a costa de sí misma, haciéndola parecer como una hermana mayor, pero a la vez, también un blanco fácil.

En resumen, una chica demasiado inocente además de ser una chica de 14 años con un cuerpo de mujer

Como puedo decir si quiera que soy su amigo si no conozco casi nada de ella...

Puck: Poner el corazón y alma en todo lo que haces es bastante duro para ti, ¿eh?

Incluso si sus labios cerrados pudieran ocultar sus pensamientos superficiales, no podría silenciar su mente. Era imposible esconder todo esto de Puck, quien sacaba pensamientos superficiales como si de una cuchara en un caldo de sopa se tratara.

Oye, Kinomoto.

Él no quería hacerle frente a su propia miseria por más tiempo. De manera poco convincente negó lo dicho por Puck, pero estas palabras, susurradas a la mente y no al tímpano, nunca llegaron. Con Kino expresando su voluntad a través del silencio, Puck continuó

No me des muchas esperanzas, tanto a mi como a Lía.

Kino: ... ¿Eh?

La esperanza es un veneno suave. Incluso si sabes que te arruinará, no puedes evitar el intentar alcanzar la ilusión que parece lo suficientemente cercana como para atraparla. Eres realmente un veneno.

Para Kino, que había visto a Puck como un ser tranquilo e imperturbable, esas palabras contenían suficiente fuerza como para cambiar sus impresiones sobre él por completo.

Kino: Espera a que te refieres con ...

Pero antes de que pudiera terminar su perpleja réplica, Emilia, guiando su mano, dejó de caminar y dijo:

Aquí estamos.

comprendió de manera tardía el por qué se llamaba Distrito de Nobles. El paisaje era más refinado que el de los barrios marginales o el de Market Street, con mucho más dinero invertido en él. Esto era cierto, no solo por los edificios, sino también por las calles, las paredes y los árboles que tenían un atractivo estético.

Como su nombre indica, este era el distrito donde residía la gente de clase alta. Su destino era un edificio que servía de puerta de entrada, sellando la única calle que lo conectaba con el mundo exterior.

La sólida estructura trabajada en piedra era mucho más lisa que cualquier otra cosa en el Distrito de los Nobles, que a la vez se encontraba situado detrás ello.

La parte trasera del edificio contactaba con una sección del muro, permitiendo que alguien que se encontraba en el techo pudiera inspeccionar toda la ciudad con un simple vistazo.

Sin embargo, el objetivo de este punto observación era vigilar lo que estaba por debajo, no el de disfrutar el paisaje.

Podía apreciarlo desde un punto de vista lógico y práctico, pero su disgusto era sin duda una reacción instintiva hacia algo tan emblemático de la burocracia

Emilia no dijo nada al reacio Kino mientras se dirigía a la guarnición.

Consciente del tiempo y el lugar, ella finalmente soltó su mano. Kino se sintió triste tras dicho suceso.

Y justo cuando Emilia estaba a punto de llamar a la puerta de la guarnición, esta se abrió hacia el exterior mientras un joven asomaba su rostro.

...Oh, no es frecuente que me encuentre con un conocido en un lugar como

???: este. Ha pasado un tiempo, señorita Emilia. No ha cambiado nada desde entonces.

El joven se inclinó formalmente ante Emilia ...a quien había reconocido a pesar de que llevaba puesta la capucha. Pero la persona que veía ya la había visto antes

Emilia: Si, gracias. No hay cambios en particular. Veo que también gozas de buena salud, Julius.

Julius: Me siento honrado de que me recuerde. Su belleza solo ha aumentado, señorita Emilia.

Kino: (Julius Jukulius el caballero de cabello violeta)

El hombre llevaba un uniforme extravagante con un emblema de dragón. Una fina espada delgada como un estoque colgaba de su cadera. La apariencia y la manera de hablar de Julius se adecuaban a ese título.

He venido para expresar mi agradecimiento a los soldados por sus servicios y aprovechar la oportunidad para observar la ciudad... o algo así. Un conocido me pidió que hiciera una visita, y supongo que es bueno hacer amigos de vez en cuando. Después de todo, pude poner mis ojos sobre una hermosa flor a lo largo de mi camino a través de estas calles.

Poner demasiado cuidado en palabras y gestos de modo que pierdan naturalidad.

Con un movimiento bien practicado, Julius estrechó íntimamente la mano de Emilia mientras hablaba, inclinándose sobre una rodilla. Sin una sola pausa para respirar, llevó sus labios al dorso de su pálida mano. Tiene sentido tomando en cuenta que podría ser una reina

Julius: Ah, entonces es por eso por lo que vino a la guarnición... Este asunto, ¿le concierne a aquella persona?

Kino: mi nombre es Kinomoto Kurosaki, soy un sirviente del señor roswaal L mathers se inclina mostrando respeto

Julius: un placer Joven Kinomoto

La guiaré hacia el espejo mágico, entonces, aunque me duele el corazón al llevarla a un lugar tan humilde como este, señorita Emilia.

Emilia: No debes preocuparte. Estoy bastante bien, así que por favor.

Muy bien. Adelante.

Julius: ¿y esta pequeña dama? Julius de manera repentina se acercó a Beatrice

Betty/Kino:¡¡¡

Betty estaba sorprendida por la repentina acción del caballero y Kino no fue la excepción

Al igual que Emilia Julius le dio un beso en la mano a Beatrice eso de cierta forma irrito un poco a Kino

Julius: esta damisela que hace en lugar

Kino: es mi espíritu....

Julius: ¿dices que esta damisela es tu espíritu?

Kino: si y te agradecería si no la tocaras...

Julius: lamento haberte incomodado

Kino: incomodarme nooo yo noo yo estoy sereno y moreno dijo con sarcasmo

Betty: soy el espíritu de Kinomoto él es mi contratista supongo

Betty se veía algo nerviosa en la presencia de Julius, la verdad incómoda un poco...

estaba sorprendido. Las largas pestañas de Emilia temblaron un poco mientras bajaba sus ojos.

Emilia: Me gustaría que vinieras, pero no creo que Julius lo tome bien, así que espera aquí.

Kino: bien como quieras...

Tanto Emilia como Julius entraron a la sala de espejos

Ella dijo que era un guardia real, ¿no?

Si la corazonada de Kino era correcta, eso significaba que era un Caballero de la Guardia Real.

Si las órdenes caballerescas existían en este mundo, sin duda los Caballeros de la Guardia Real servían directamente a la familia real.

Pero ¿dónde se encontraban en un país sin alguien gobernando?

Toda la familia real murió debido a una plaga, eh. Podrían hacer que las élites de los Caballeros de la Guardia Real asuman la responsabilidad al no prever eso y disolverlos, arrojándolos a ellos y a sus familias a la calle...

La situación de este país es sin duda bastante caótica

¿Mm?

Mientras Kino reflexionaba sobre ello, sintió una perturbación y frunció el ceño al ver algo en el borde de su visión. Por un breve momento, su mirada vagó por la ciudad sin ningún motivo en particular y vio un vestido colorido desaparecer en un callejón. El color era de un rojo vivo que pareció quedarse grabado en sus ojos, incluso con solo haberlo visto una vez.

Y si el vestido hubiera estado simplemente pasando por la calle, sin duda no se habría

registrado en la mente de Kino en absoluto.

Incluso al entrar en un callejón, la prenda no le habría llamado la atención, salvo por el hecho de que la chica que lo llevaba puesto era conducida por hombres con mala pinta.

Kino: (esa chica entro en el callejón donde me asaltaron debería detenerla.)

Kino: ¿Betty podrías esperarme aquí un rato?

lanzó una mirada a la guarnición mientras corría hacia el callejón. Se sentía culpable por haber incumplido la promesa de esperar pacientemente a Emilia, pero un deber más elevado lo llamaba. Iba a evitar un asalto

Y al oír un grito de enojo en el instante en que entró al callejón, Kino estaba firmemente convencido de haber tomado la decisión correcta y aceleró el paso.

Ranchis: ... ¡Por qué, pequeña perra! ¡No estoy bromeando!

¡No te metas conmigo, mujer! ¡¿Quieres un golpe en esa cara bonita?!

???: No te apresures, plebeyo. Aquellos de baja calaña gozan de un apropiado destino humilde.

Su cabello era de un naranja radiante, como el mismo sol, fluyendo a través de un único pasador antes de caer sobre su espalda. Su vestido era carmesí y, sobre todo, la belleza abrumadora de la chica misma brillaba en el sórdido entorno. Incluso unos ojos inexpertos podrían decir a simple vista que las joyas en su cuello, orejas y dedos eran de la más alta calidad. Su atuendo completo, combinaba de pies a cabeza, tenía que valer al menos cien veces el dinero que Kino tenía consigo. Y, sin embargo, todas esas joyas extravagantes eran incomparables a su rostro.

Ella tenía ojos rojos y desafiantes. Sus labios ligeramente rosados enfatizaban el tono de su piel, blanca como la más pura nieve.

La chica cruzó los brazos en una postura tranquila que solo acentuaba sus abundantes pechos.

Pero lo que más lo sobresalto fue que eran de nuevo esos tres

Kino sin pensarlo dos veces hizo notar su presencia dejando sus manzanas en el suelo para poder moverse mejor

Kino: otra vez ustedes ¡que no Reinhard les enseño una lección ¡de manera subconsciente Kino saco su espada para amenazar a los tres chiflados

Ladrones/ la chica: ¿ah?

Ranchis: no te metas en donde no te llaman acaso quieres morir

Kino: si claro que valiente de parte de ti amenazar a una chica con un cuchillo

Pensé que no volverían a molestar a la gente desde su susto por Reinhard, pero parece que tengo que darles otra reprimenda

Rachis: bien acércate y te acuchillare

Kino: BUFF quien dijo que duelo a muerte de cuchillos

En ese momento alzo su izquierda al suelo y

Minya ¡

Usando la puerta de Beatrice Kino invoco el hechizo minya 20 estacas de cristal violeta el cual se pararon arriba de Kino

Ladrón pequeño: un usuario de magia¡¡

Ladrón gordo: no otra vez ¡

Ranchis: te crees valiente por usar magia no me haga...

En se momento una estaca paso casi de lado de ranchis esa estaca se clavó en la pared de alado cristalizando la pared y pulverizando parte del muro

Ranchi:¡¡¡

Kino: yo no soy tan amable como Reinhard así que será mejor que se larguen si no los pulverizare hasta no dejar ni siquiera sus cuerpos

Con un semblante de miedo Kino había intimidado y asustado a los ladrones era difícil pensar que no hablaba enserio.

Y no quiero que vuelvan aquí ¡ME OYERON ¡

Ranchis: no me jodas, retirada¡¡

Ladrón chico: este tipo está loco ¡

Ladrón gordo: ¡Huyamos ¡

Los tres ladrones huyeron sin mirar atrás

Kino no podría explicar su señal de satisfacción tras derrotar a esos tres ladrones que lo habían golpeado además que salvo a una chica se sentía como si fuera un superhéroe un sueño de niño, como si algo que solo podría hacerse en un sueño se hubiese hecho realidad

Kino: je maricas dijo en voz baja

Tras asustarlos deshizo el hechizo

De manera subconsciente el chico sonrió a la chica

Chica: ¿Qué? ¿Son esos los ojos de un mendigo? No recibirás nada de mí, plebeyo.

Kino: ¿así me agradeces por ayudarte?

Chica: no necesito ayuda de un plebeyo

Kino: pues parece que no manejabas la situación y te salve de una muerte segura

Chica: ¿Salvarme?

La chica inclinó su cabeza ligeramente con una expresión de confusión.

Ella cerró los ojos, hundiéndose en sus pensamientos, y dejó escapar un pequeño suspiro cuando llegó a una respuesta.

Así que ese parloteo tuyo de antes tenía la intención de salvarme. Mm, no me había dado cuenta.

Kino: ... creo que es obvio...

Chica: No lo malinterpretes. No hubiese tenido dificultad alguna, incluso sin tu ayuda.

Solo puedo asombrarme de que te enorgullezcas de resolver algo que, para empezar, no era un problema

Kino: ... creo que no estás pensando con claridad ese tipo te estaba asaltando...

Chica: Para nada. Es muy simple. Este mundo está hecho únicamente para mi conveniencia. No ocurre nada que no sea para mi beneficio. Es gracias a mí misma que fui salvada, sin embargo, intentas reclamar eso como tu propia hazaña. ¿No tienes vergüenza de robarle el crédito a otro?

Con un descarado empuje hacia adelante de sus abundantes pechos, la chica afirmaba, como si fuera natural, como si fuera obvio, como si fuera de sentido común ...que ella era absoluta.

La forma en que sus ojos irradiaban, similar a la de un arrogante sol, hacía que Kino se pusiera algo

Kino: (¿o es muy arrogante o es muy tonta?)

Kino: bien me retiro si no necesitas ayuda me voy

Kino indignado por la forma de actuar de la chica agarro sus manzenes y se disponía a dejar a la chica en el callejón, es su problema si la vuelven a asaltar

Pero en ese momento fue detenido por la voz de la chica

Kino: ¿Q-qué?

Chica: ¿Qué hay en esa bolsa de allí? Muéstrame.

La chica se paseó a su alrededor, asintiendo con la cabeza para indicarle debería dejar la bolsa. No quería ser obligado, pero desafiarla solo prolongaría

las cosas, por lo que Kino abrió la bolsa de mala gana y mostró su contenido...una montaña de fruta madura y roja.

Chica: No las reconozco. Estas frutas... ¿Qué son?

Kino: ¿son manzenes frutas muy comunes acaso no las conoces?

Parpadeando debido a la repentina respuesta, la chica resopló mientras miraba a Kino como si fuera un imbécil.

Chica: Mientes. No me hagas reír. Las manzenes son blancas, ¿entiendes? Nunca he visto frutas como estas.

Kino: si, pero son rojas por fuera, pero blancas por dentro

Chica: Mm, nunca he visto una que no estuviera sobre la mesa en la cena. Muy bien.

Entrégamelas.

Asintiendo con satisfacción, la chica audazmente le exigió que le diera las manzenes.

Había salvado a la chica de un robo solo para que ahora la chica intentara robarle.

chica: Entrégamelas. Voy a coger uno, lo partiré y lo veré por mí misma. ¿O sólo son mentiras las que salen de tus labios?

Kino: toma una en fin llevaba una de mas

De mala gana sacó una manzene de la bolsa y la puso sobre su mano. La chica tomó la manzene,

dándole la vuelta como si estudiara la sensación sobre su palma.

Luego, su mano izquierda se dirigió hacia la manzene, cortándola vertical y horizontalmente en cuatro partes iguales. La chica lamió el jugo de la fruta que estaba sobre sus dedos, satisfecha con la muestra que tomó.

Chica: Agridulce ... Sin duda, este es el sabor de una manzene. Te perdonaré la vida.

Kino: (¡¿PERDONAR MI QUE? PERO SI YO TE ACABO DE SALVAR NO MAMES?!)

Chica: ¡¡Ab-so-lu-ta-men-te no!!

Su declaración, cruzó la línea de una conducta arrogante a una tiránica, hizo que incluso Kino se encolerizara con indignación.

Ni siquiera te importó el cortar una de ellas de la nada. ¿Por qué tengo que darte todas?

Basta de parloteo. ¿Qué te parece esto?

La chica señaló la bolsa, con los curvando los labios en una sonrisa irónica.

Apostaremos por ellos.

Kino: ... ¿Apostar?

Sí, una apuesta simple. Algo fácil, lanzar una moneda y adivinar si es cara o cruz. Una sola manzene dependerá de cada intento. ¿Qué te parece?

Ella estaba proponiendo una competición,

Kino: ¿no lo sé y que apuestas? No estoy seguro

Por supuesto, voy a tener preparado algo que valga la pena ganar. Veamos...

La chica se llevó la lengua a los labios y se sumió en su pensamiento. Movió sus cautivadores ojos hacia Kino, levantando su amplio pecho con sus brazos cruzados.

Si ganas la apuesta, puedes tocar mis pechos. ¿Qué te parece?

Kino: ¡¡GAH QUE¡¡ se sonrojo era inevitable por la propuesta inapropiada

suspiró largamente y negó con la cabeza al ver que la chica ofrecía su propio cuerpo como una ficha de juego. La forma en la que se ofreció en esta apuesta sin vacilación alguna sobre las consecuencias de perder indicaba el tipo de personalidad que normalmente arruinaba la vida de los apostadores.

Sin duda, ella pensó que su belleza le permitía seducir a cualquier hombre que la mirara, pero, por otro lado, Kino pensó que la visión del mundo de aquella chica era lamentable y bastante triste.

Ella le lanzó una mirada ligeramente sospechosa, tal vez preguntándose qué era lo que le estaba llevando tanto tiempo.

Kino: ¡oye ¡porque ofreces eso!

Chica: cállate y empieza

La intimidante forma de ser la chica había hecho que sin pensarlo dos veces apostara era

Mi suerte no podría si quiera considerarse buena, a ver venido a este mundo fue cuestión de mala suerte, morir cuatro veces no es tener mucha fortuna de hecho, dos muertes a manos de esa perra de las tripas, 1 a patas de esos monstruos, y por último por rem o ram morí

Mi suerte es una mierda, joder nada bueno me pasa, salvo a alguien y en lugar de agradecerme dice que el mundo sirve a su conveniencia y ahora quiere quitarme mis manzenes que acabo de comprar, pero, si gano me dejara tocar sus pechos, sus enormes pechos...

Y un CARAJO nada me sale bien si esa chica se cree la muy muy, le demostrare que no soy una persona con la cual meterse, es su culpa por apostar algo tan sucio, yo soy inocente así que será su culpa así que no me venga llorando si se denigra así misma

Ahora, entonces.

La chica recogió una de las manzenes que tenía delante y la depositó en la bolsa que tenía al lado. Kino estaba con sus últimas dos fichas de cambio, por así decirlo. Cuando el juego comenzó, tenía diez, nunca imaginó que tendría una racha perdedora de ocho, lo que le dejaba en peligro de perder todo lo que había invertido, o incluso más.

Chica: Ahora sabes lo que les sucede a los que me desafían. Existo para estar en la cima, y tú, solo para quedarte en el fondo.

Mientras más apostaba sentía como la chica se burlaba de él y lo denigraba

Kino: (¡SUERTE DE MIERDA!)

Chica: Puedes estar tranquilo. Todo está en el fondo excepto por mí. El mundo me tiene a mí, y todo lo demás está por debajo.

Kino quería refutar su lógica irracional, pero eso solo lo haría sonar como un mal perdedor.

Ahora bien, ¿qué haremos después? Si no confías en tu suerte con los lanzamientos de monedas, una apuesta diferente estaría bien.

Kino: bien creo que fue suficiente ¡pero propongo que hagamos 'piedra, papel y tijera'!

Chica: ¿'Piedra, papel y tijera'...?

Cuando la chica levantó una ceja ante el desconocido término,

Kino: Piedra, papel y tijeras' es una forma de resolver las cosas. A la 'señal', haces un gesto con tu mano y gana el gesto que represente al más fuerte. Los gestos son tres: piedra, papel y tijera. Papel vence a la roca, tijera vence a papel, roca vence a tijera. ¿Entendiste?

Chica: Oh, sí, lo entiendo. Un juego bastante divertido, parece. ¿Cuál es esta 'señal'?

Kino: Bueno, cuando terminas de decir 'piedra, papel y tijera', muestras tu mano cuando llegas a la parte en que se menciona 'tijeras'. Oh, y si ambos muestran el mismo gesto, vuelves a decir 'piedra, papel y tijera' como la señal y repites el proceso en el acto.

Kino: ¿Eso es todo lo que hay que hacer? Muy bien. Iré con papel.

Chica: ¡¿Ya estás mostrando tu mano?!

Kino: jeje ella no sabe que solo es una mentira jugare piedra jeje

se estremeció ante la impresionante velocidad con la que ella propuso su estrategia. Acababa de explicar las reglas, y allí estaba ella, eligiéndolo todo como una profesional, preparada con ansia y con la victoria en su mano. Supuso que debería alabarla. Ella le dijo:

Comencemos, entonces. Piedra... papel...

Kino se sintió nervioso por quedarse retrasado en el juego.

Ah, espera, tiempo fuera. No he decidido qué voy a hacer con...

Con los pensamientos de Kino aún en un revoltijo, la chica alcanzó la señal

y levantó su mano en alto.

...¡Tijeras!

La mano de la chica indicaba papel, tal como ella lo había proclamado. La mano de Kino era piedra. Ella mencionó: Parece que me debes otra manzene, a pesar de que tengo quejas sobre este método.

El estratega había sido derrotado por su propio plan.

Ahora, apostemos por la última manzene y concluyamos con esto, ¿de acuerdo?

Todas las manzenes que llevas me pertenecen. Dejar una de ellas en tu posesión es lo mismo que dejar que te quedes con todas. Es todo o nada.

Siendo ese el caso, también podemos apostar por todas las manzenes en la ronda final. Eso va para los dos...

Agregó la chica, lo que significa que serían sus diez manzenes contra la única que poseía Kino. Fue verdaderamente característico de la desastrosa y arriesgada forma de pensar de la chica.

Kino preguntó: ¿Qué tal un último 'piedra, papel y tijera'?

Ya tomé mi decisión. Todo lo que queda es que elijas el método y me des mi manzene.

La chica no mostró vacilación sobre su victoria, ni intención alguna de dejar ir a Kino.

Los dos gritaron simultáneamente, ― ¡Piedra... papel... tijeras!

Cuando ambos mostraron sus manos, el sonido se desvaneció del mundo.

Con su puño apretado en una roca, el estremecimiento en los ojos rojos de la chica solo aumentó.

E-esto es...

Chica: ¿Que es esa cosa?! ¡No me dijiste que una jugada como esa era posible!

Kino: ¡tú no preguntaste no te quejes, pero es tu culpa el que no lo hayas preguntado!

Esa parte es piedra, aquí están las tijeras, ¡y aquí papel! En otras palabras, ¡el gesto que hice ha vencido a tu roca!

Chica: Si tal lógica se mantiene, una parte diferente pierde ante mi roca.

Era consciente de que su lógica era absurda, un desesperado intento de lanzar la apuesta misma a la duda. Pero la chica desafió las expectativas de Kino, suspirando profundamente cuando dijo:

Ya veo. Ciertamente, soy yo quien estaba equivocada. Al mismo tiempo, me divierte ver cómo se han superado mis expectativas... Muy bien, has ganado. Puedes hacer lo que quieras. Aquí tienes.

Después de su mínima advertencia, ella dio un paso brusco hacia adelante. Sin pensar Kino solo quedo observando a la chica

Chica: No me digas que ahora que es el momento de sentir mis pechos, ¿has perdido el valor?

Kino: kjjj no...

Kino: (me lleva estúpida moral porque dudo ¡gane, pero de verdad voy a tocarle los pechos a esa chica si ni siquiera conozco su nombre)

Chica: ¿bien entonces lo harás o no?

De manera provocativa la chica se acercó más mostrando más sus voluptuosos pechos

Chica: ¿y bien? Lo harás o no

Kino: (¿De VERDAD ESTA CHICA QUIERE QUE LA TOQUE PARESE QUE NO HA TENIDO ACCION O QUE?)

Kino: bien pero solo porque tú ...lo dijiste, pero antes podrías decirme tu nombre es raro que haga esto sin siquiera saber tu nombre

Chica: Priscilla Barielle, recuerda ese nombre plebeyo.