—Una vez que nacieron los hermanos de Rena, ella fue nuestro pilar y siempre nos ayudó con la casa y la granja. Pasó mucho tiempo con ambos y nos quiere profundamente —dijo Elina.
—Tista estaba enferma de niña, así que siempre le prestamos especial atención. Tuvo todos nuestros cuidados y ella es quien más durmió en nuestra cama, ya que necesitábamos revisar su estado a menudo.
—Tista sabe cuánto la amas y te preocupas por ella porque se lo demostraste durante años antes y después de que naciera Lith.
—Él, en cambio, fue nuestro bebé milagro y al mismo tiempo el que más descuidaste. Teníamos tantas cosas que hacer y tan poco dinero. Rena pasó más tiempo con él siendo un bebé y yo me quedé en casa con él cuando era niño.
—Era demasiado débil para ayudarte con la granja, así que usó su magia para ayudarme con las tareas diarias y luego con la cocina. Él y yo pasamos mucho tiempo juntos mientras yo le enseñaba mis recetas y cómo cuidar de Tista.