Su Última Huella

Orum pasó varias semanas después del solsticio sintiéndose entumecido. Había poco que hacer en la Academia ahora que los estudiantes estaban fuera, y no quería mantenerse en vigilia junto a sus cápsulas para dormir, como hacían en secreto algunos otros instructores. Así que, regresó a casa, pasando tiempo con su hermana y sus hijos durante el día y concentrándose en cuidar de su Ciudadela por la noche. Pero incluso cuando Orum estaba con otras personas, seguía callado y distante, su expresión apagada. Su mente estaba muy lejos.

Estaba pensando en Corazón de Cuervo, su corazón lleno de angustia y arrepentimiento. La Muerte era una vieja amiga para los Despiertos originales como él, y había perdido a muchos amigos y camaradas en sus garras. Y, sin embargo, su muerte lo hirió mucho más profundamente que cualquier cosa en el pasado.