Un Alma Milenaria

Después de que Connor escuchó esta voz, no pudo evitar quedarse atónito por un momento.

Se detuvo apresuradamente y preguntó en voz baja —¿Quién es? ¿Quién está hablando?

Cuando todos escucharon las palabras de Connor, sus expresiones estaban muy desconcertadas.

No sabían qué quería decir.

—No hay necesidad de buscarme. Estoy en tu mente. Solo tú puedes escuchar lo que digo. No necesitas hacer ningún sonido —el otro explicó con calma.

—¿Estás en mi mente? —Después de escuchar esto, la expresión en su cara parecía aún más desconcertada.

—¿Todavía recuerdas a la persona que te dio fuerza en el fondo del acantilado? —El otro dijo.

—Recuerdo... —respondió Connor.

—Soy esa persona. Sin embargo, mi poder ha sido completamente absorbido por ti. Cuando fusioné mi poder en tu cuerpo, dejé atrás algunas piezas de conciencia —el otro dijo lentamente.

—¿Me estás diciendo que has estado en mi mente durante tanto tiempo? —No pudo evitar fruncir el ceño.