El problema principal con el vacío era la falta de energía. Los híbridos y las bestias mágicas estaban en una mejor situación, ya que podían depender del gran escondite de energía contenido en sus cuerpos para seguir luchando, pero lo mismo no se aplicaba a los cultivadores.
Volar, explorar y superar obstáculos obligaba al grupo a agotar energía que no podían reponer mediante métodos naturales. Tenían que depender de sus artículos o de las herramientas del Rey Elbas para mantener sus centros de poder llenos, pero eventualmente se acabarían.
El consumo se aceleraba dependiendo de los obstáculos que tenían que superar. La batalla contra la medusa les había obligado a usar mucha energía, lo que les requeriría usar sus escondites. La misión ni siquiera había terminado, y también tenían que considerar el regreso en sus cálculos.