1842. Etéreo

El asombro sentido frente a esa escena era difícil de expresar con palabras. El cielo de Cielo y Tierra era la mayor estructura del mundo. Podía contener todo el plano superior, las tormentas, e incluso se expandía a medida que las leyes caóticas generaban nuevas tierras. Sin embargo, la criatura vacía en los recuerdos podía cubrir un cuarto de la capa blanca.

El Rey Elbas, Noah y Alejandro no pudieron evitar sentirse atónitos. Acababan de presenciar la creación del plano superior y el aumento de poder de Cielo y Tierra, pero esa amenaza masiva parecía estar por encima de todo.

Quedaba claro por qué el Señor Lewis lo llamaba monstruo ahora. La criatura tenía el potencial de devorar el cielo. Era tan grande que incluso Cielo y Tierra tendrían que temerle en algún momento, pero entender la razón de su presencia resultó ser fácil.