Capítulo 14

Todos nos encontrábamos en el estacionamiento, eran las 4:50 am, Júnior llevó a Manuel uno de sus mejores hombres, Negró llevó a Miguel, al parecer se hicieron muy buenos amigos, Maniaco llevó a Rene y yo a Erick.

- Bueno equipó, está es sin duda la misión más difícil que haremos, no les mentiré, algunos tal ves no vuelvan con vida, comenté.

- Ya vasta de cursilerías vamos a destruir a esos malditos, dijo Rene sonriendo.

- De acuerdo, sin hacer la pregunta creó que todos opinan lo mismo.

- Así es ya vámonos.

Abórdanos el vehículo y partimos a nuestra misión, esperando que toda la misión fuese un éxito, pero todos eramos consientes de que algunos no regresarían.

- Bueno y qué opinan de la misión.

- Pues a mi me párese muy emocionante, divertida y excitante, dijo Rene con una sonrisa de éxtasis.

- Maldición Rene no has madurado nada en este año, dijo Erick.

Maniaco conducía, todos bromeamos a cerca de la demencia de Rene, a pesar de ser una misión peligrosa, se respiraba una paz y una tranquilidad.

- Oigan, ya estamos cerca, dijo Maniaco.

- Todos preparados, queda unos 40 minutos, antes de que amanezca, comentó Negró.

Todos preparamos nuestras armas, Maniaco estacionó el vehículo a unas 7 cuadras de la estación, todos bajamos.

- Listos, es la hora, no se mueran idiotas, comentó Maniaco.

- Vamos, guarden silenció y enciendan sus comunicadores, dije mientras me colgaba la mochila con la mitad de los explosivos.

Caminamos muy sigilosos por unos 8 minutos, cada pasó que dábamos los nervios aumentaban, mi corazón se aceleraba a un ritmo fuera de lo normal, a tal gradó que podía escucharlo, observé a todos, se veían igual o peor que yo.

- Ya llegamos.

- Ustedes entrarán, por el sur y nosotros por norte, vamos dijo Maniaco.

Me toco entrar por el sur con Junior, Manuel y Erick.

Saqué el mapa de mi bolso, verifique la ruta dibujada en el, mientras Júnior observaba la zona con sus binoculares.

- Tenemos dos hombres obstruyendo el paso más adelante, están bien armados, procedo a eliminar los, preguntó Júnior.

- Adelanté, pero sutilmente, contesté.

Nos acercaremos lo más posible, Júnior y Manuel los tomaron por la espalda y cortaron su cuello.

- Despejado!!!.

Abrí la puerta con mucho cuidado, una ves adentró nos encontramos con un pasillo muy agostó y con poca iluminación.

- Cúbranme, colocaré el primer explosivo, comenté.

Después de unos minutos, terminé de colocarlo.

- Vamos, al segundo punto.

Caminamos unos 3 minutos, nos topamos con el estacionamiento, avía docenas de vehículos equipados.

- Aquí, cúbranme.

- Vaya esta misión se esta volviendo muy aburrida y fácil, comentó Manuel haciendo muecas.

- Eso es lo mejor, contesté.

Qué no se supone que Rene se fue con Maniaco, pensé respecto al comentario Manuel.

- Listó, colocación correcta.

Pero tenía razón Manuel esta misión era muy aburrida, también me hacia falta un poco de acción, pensaba.

- Cuál el nuestro siguiente punto, preguntó Júnior.

- Las oficinas centrales, contesté.

Saqué de nuevo el mapa, le di otro repaso rápido.

- Es por aquí, síganme.

Entramos de nuevo a la estación, la mayoría de los inquilinos se oían dormidos y roncando, coloque algunos explosivos cerca de los dormitorios.

- Problemas a las 10 en punto, informo Manuel.

- Entremos a éste cuarto, mientras pasan, sugerí.

- Estás loco, es como ir a la boca de León, dijo Júnior negándose.

- No tenemos de otra, insistí.

Júnior término aceptando, todos entramos a el cuarto, por suerte solo avía una persona durmiendo.

- Este lugar es incómodo, comentó Júnior.

Por poco suelto una carcajada, pero tapé mi boca con las dos manos.

Se escuchaban pasos y voces por el pasillo, mi corazón latía a un ritmo muy elevado, la adrenalina recorría todo mi cuerpo.

Los respiros acelerados de Manuel, cada ves subía más el tono.

- Que no querías acción, le dije.

Intento contestar, pero por los nervios sólo balbució un poco.

- Parece que se alejan, notifico Júnior.

Abrí un poco la puerta, por una pequeña abertura observé, que se avían alejado lo suficiente.

- Salgamos, ya están lejos de aquí.

- Muy bien, a seguir con el recorrido, dijo Manuel, que se avía recuperado.

Llegamos a la oficina central, que por alguna razón desconocida, estaba vacía.

- Esto es muy raro, comenté.

- Está despejado, aprovechemos, dijo Manuel.

- Tiene razón, esto parece una trampa, dijo Erick.

- ANTES DE HACER UN MOVIMIENTO ESTÚPIDO, TIREN SUS ARMAS!!!, ordeno una voz, sentí el arma en mi cabeza.

- Hagan lo que dice, dije mientras soltaba mi arma.

Todos se quedaron en shock, por la escena.

- Vaya vaya, parece que a pesar de ser unos mocosos los tienen grandes jajaja, dijo reído.

Acto seguido con una patada en los pies me arrojó al pisó.

- Bueno, vasta de charlas, ya fui muy amable con ustedes pero, su suerte, ha terminado.

Apunto con su arma a la cabeza de Manuel, sin pensarlo apretó el gatillo, el cuerpo inerte calló sobré mi, la sangré brotaba a chorros, toda mi cara se bañó de la misma.

- No puede ser, grito Júnior mientras caía de rodillas.

- Jajajaja, parecé que por accidenté, apreté el gatillo, comentó riéndose a carcajadas.

Por mi cuerpo recorrió un miedo que me estremecía, empecé a temblar, después me atacó un dolor en el estómago.

- Tu serás el siguiente, apunto a Erick.

Cuándo escuché que el próximo era uno de mi mejores amigos, todo el miedo que sentía se transformo en coraje, odió y valor.

- Vamos a morir todos aquí, dijo Júnior con una cara de resignación.

- ESO NO PASARA HOY!!, grité con todos mis fuerza mientras, desde el piso lancé una patada con todas mis fuerzas, golpe el mentón de el hombre que callo desorientando, salte sobré el, con un mis puños golpee una, otra y otra ves su rostro, aún cuando dejo de respirar, seguía golpeando y maldiciendo al hombre.

- Ya está muerto, dijo Júnior

- Deténte!!!.

Reaccioné, el coraje y odió me avía segado, miré mis manos llenas de sangré, no me arrepentía de lo que avía hecho, me puse de pie.

- Coloquen los explosivos, ordené mientras limpiaba la sangré de mi rostro.

- Está bien, ya las colocamos, contestó Júnior.

- Gracias......., dijo Erick que poco a poco se incorporaba de nuevo.

- No me agradezcas, no pude salvar a Manuel, contesté golpeando la pared.

Sonó mi Comunicador.

- Qué fueron ésos disparos?, preguntó Maniaco.

- Cuándo salgamos de aquí te lo diré, contesté.

- Si ya terminaron de colocar los explosivos?!!, preguntó un poco alterado.

- Si sólo falta el último, contesté tranquilo.

- Pues salgan de prisa!!!, por qué todos se dirigen hacía ustedes!!!, informó Maniaco gritando.

- Si, nos vemos dónde empezamos, contesté y apagué el Comunicador.

- Que sucede?, preguntó Erick más recuperado.

- Tenemos que salir de aquí, respondí mientras cargaba en mi hombro, el cuerpo sin vida de Manuel.

Salimos de la oficina central, escuchamos pasos apresurados por el pasillo izquierdo.

- Salgamos por acá.

Corrimos por el pasillo contrarió, llegamos a la salida, escuchamos gritos de nuestros perseguidores.

- Vamos, se están acercando, comentó Júnior.

- Suelta el cuerpo, nos alcanzarán, me sugirió Júnior.

- No puedo hacerlo, lo menos que puedo hacer por el, es darle una sepultura, contesté.

Cuándo nos alejamos lo suficiente de la estación, contacté a Maniaco.

- Ya están fuera?, pregunté.

- Si, tu dices cuándo detonamos los explosivos, contestó.

- A la cuenta de tres, 3.....2......ahora, apreté el botón.

"BUUUUUUUUUUUUUUUM"

Un estruendo muy potente se escuchó, la estación voló en mil pesados.