¿Dónde está Gochi, MALDITA SEA!?

Lamentablemente para ella, la atención que prestaba no era apreciada por su objetivo.

—Vete, Ramona. Trabaja —Louie exhala un profundo suspiro, masajeándose la frente.

Él sinceramente no sabía por qué había estado tan enamorado de esta mujer antes. Cada vez que pensaba en ello, no podía evitar estremecerse de asco y vergüenza.

En aquel entonces, solo era un chico de corazón puro buscando amor en medio de todo el caos e incertidumbre. Ni siquiera sabía que ella se había acercado a él a propósito. En aquel tiempo, pensó que se habían conocido por el destino.

Estaba en su restaurante cantina económico favorito —al que iba cada vez después del trabajo— cuando la notó por primera vez.

Ella era bastante bonita, y trabajaba como mesera allí encargada de recoger los platos después de usarlos para llevarlos a la trastienda.