—No te preocupes. No tengo planeado morir, sabiendo que mis hijos me esperan para que los recoja en la casa de sus abuelos.
Luchar contra una organización entera por su cuenta era algo que Cielo había experimentado durante el apogeo de Hera. Había momentos en los que simplemente se escapaba por su cuenta, masacrando a todos sus enemigos y cuando su gente llegaba, el trabajo ya estaba hecho.
Pero en aquel entonces, no le importaba si moría o no. Aquellos tiempos eran principalmente para acabar con la gente —montones de gente— sin pensamientos de proteger a nadie, incluida ella misma. Lo cual marcaba una gran diferencia con su situación actual.