Cumpleaños

—¿Eh? —Mirando todo con una expresión desconcertada, Shiro no sabía cómo reaccionar.

—Vamos querida, puedes actuar un poco más sorprendida. Después de todo, es tu cumpleaños —Mio sonrió y abrazó a Shiro.

—Ah cierto... olvidé que es mi cumpleaños hoy —Shiro suspiró ya que últimamente tenía muchas cosas en mente.

Mirando todas las decoraciones de la fiesta y la comida dispuesta, Shiro sonrió suavemente.

Naturalmente, ignoró que Yin ya estaba comiendo en una esquina. Afortunadamente, Mio conocía los hábitos alimenticios de Yin, así que preparó más que suficiente comida para todos.

—Ahora que la abuelita cumpleañera está aquí, comencemos a comer —Aarim sonrió mientras Shiro sentía estallar una vena.

—¿¡Quién demonios es la abuelita cumpleañera, eh!?

—Fufufu~ No necesitas ocultarlo. Isilia ya nos lo contó —Aarim sonrió con algo de vino en su mano.

Mirando a Isilia que miraba hacia otro lado, Shiro no pudo evitar sentirse traicionada.