—¿En serio eres el propietario de Cuidado de la Piel Qi Qi? —preguntó tímidamente Han Jue An.
—¿Qué? ¿No lo crees? —Yu Qi le devolvió la pregunta.
—No. No. Solo estoy sorprendido. —Han Jue An negó con la cabeza—. ¿Qué me pasará después?
—Bueno, lo veremos más tarde. —Yu Qi no iba a dejar pasar esto así como así.
Su Yu Hi volvió con su portátil. Yu Qi abrió su correo electrónico para ver la información que Han Baise acababa de enviarle.
«Man Lee Hi... 30 años... Soltera... Vive con su padres... Bla Bla Bla...» También había una foto de ella adjunta a la información. Se veía bonita para su edad.
Yu Qi movió el portátil enfrentándolo a Han Jue An para mostrarle la foto.
—¿Es esta tu amiga? —Yu Qi pidió confirmación.
—Sí... Sí... Ella es. —Han Jue An asintió varias veces.
Luego, otra notificación emergió avisándole que había entrado un nuevo correo electrónico. Yu Qi miró y se dio cuenta de que era de Han Baise. Rápido como siempre. Yu Qi sonrió.