Voy a confesar...

—Vete con chicos de tu edad y deja de molestarme —advirtió el chico mientras se alejaba rápidamente, y Xiao Min, que lo seguía, chocó con alguien.

—Oye, pequeño. ¿Quieres morir? —dijo el chico con quien Xiao Min chocó.

—Yo... lo siento —dijo Xiao Min, sintiéndose asustado de los dos chicos frente a él, que eran mayores y también más altos.

—Una disculpa no basta. Tienes que hacer algo por nosotros —dijo el chico mientras su amigo que estaba a su lado se reía.

—No lo molestes —llegó la advertencia del chico a quien Xiao Min estaba siguiendo antes.

—Shen Li, no te metas entre nosotros —advirtió uno de los chicos.

—Lo haré si no lo dejan ir —contraatacó Shen Li.

—Shen Li, aléjate de esto porque no tienes padres a los cuales regresar y llorar una vez que te golpeemos —dijo el chico y se rió.

—Inténtalo —advirtió Shen Li, poniéndose de pie entre Xiao Min y esos chicos. Se veía sin miedo e intimidante.