Xiulan deseaba que su madre pensara en el estrés que tendría que soportar durante los próximos días.
—Mamá, espero que te den de alta pronto —dijo Xiulan antes de dejar la habitación agotada.
—No te olvides de adobar el pollo durante la noche —le recordó su madre mientras su espalda desaparecía de su vista.
Según las instrucciones de su madre, Xiulan fue al supermercado por la noche para comprar los ingredientes que usaría para preparar el almuerzo para Fu Ling al día siguiente.
Sabiendo de qué tipo de familia adinerada venía, Xiulan fijó ese hecho en su mente mientras compraba. Debía complacer su paladar.
Muy temprano en la mañana del día siguiente, una alarma a las 5 AM despertó a Xiulan de su sueño. Corrió rápidamente al baño para cepillarse los dientes y lavarse la cara antes de apresurarse a la cocina para preparar la comida.